Los gemelos Tokito estaban cenando en silencio, sin discutir entre ellos, un momento memorable y para recordar, Muichiro no tenía intención de entablar una conversación para no comenzar una pelea como de costumbre, así que solo comía de su plato disfrutando los sonidos de los grillos y búhos del exterior, lastimosamente Yuichiro no tenía sus mismos planes.
Yuichiro- Mui, mañana iré a talar madera yo solo, tu te quedarás aquí.
Muichiro- ¡¿Qué?! No, Yui yo te puedo ser de ayud-
Yuichiro- No quiero excusas, no vas a venir, ¿me escuchas? NO-VAS-A-VENIR.
Muichiro- ... Porqué siempre haces eso...Es injusto...
Yuichiro- ¡¿Injusto?! ¡injusto es que tú no hallas muerto en vez de mamá o papá! ¡Eso es injusto maldito inútil! Ya me tienes harto y más te vale no empezar con tus lloriqueos estúpidos.
Muichiro- se levanta y sale corriendo fuera de la casa evitando con todas sus fuerzas empezar a llorar por las palabras de su gemelo.
Al pequeño se le rompió el corazón, no sabe porque le dice esas cosas, son hermanos y los hermanos y se quieren y cuidan mutuamente, ¿Porqué él no lo trataba así? ¿Porqué no lo quería? ¿Qué había hecho mal? Esas preguntas invadían su mente mientras empezaba a llorar, lo que nublaba su vista haciéndolo no ver bien por donde caminaba...y sin que nadie pudiera salvarlo en ese punto, calló, calló por una cuesta realmente empinada por la que nunca pasaban de día por lo peligroso que era y mucho menos de noche.
Rodaba cuesta abajo golpeando su cabeza contra las muchas piedras que se encontraban ahí, en ese punto el Tokito menor ya se encontraba inconsciente. Yuichiro apenas estaba caminando a paso lento pensando se solo se estaba escondido mientras lloraba.
De un momento a otro Muichiro ya estaba tumbado inconsciente con mucha sangre brotando de sus múltiples heridas al borde de la muerte bajo la empinada colina, es decir, ya había bajado toda la montaña por lo que había caído al pueblo al que iban a vender la madera. Toda la gente de allí se acercó con armas creyendo que era un depredador como un oso pero al ver a Muichiro algunos se alejaron sin darle importancia, otros quedaron en shok, unas personas se calleron de rodillas llorando pensando que ya había muerto y solo una anciana se acercó a él para comprobar su estado. Esa mujer era la "abuela" de los gemelos, o eso decían ya que siempre les daba dinero, comida o cosas necesarias para vivir cómodamente, Yuichiro lo negaba pero Muichiro si la trataba como su abuela.
Ella con algo de dificultades cargó al pequeño Muichiro y lo llevó a su casa.
Volviendo con Yuichiro, él ya estaba bajando la montaña a paso rápido pero sin correr, empezó a pensar en lo que le había dicho y con lo sensible que era seguramente estaría llorando o se habría caído. Y ahí se encontraba, a las 2:53am bajando toda la montaña con vendas, trapos, desinfectantes y cosas variadas para curar cualquier tipo de herida que pudiera tener, solo podía imaginarse a su hermanito muerto en cualquier sitio con un charco de sangre. Le dolía, le dolía muchísimo solo lo que imaginaba por lo que solo rogaba internamente a todos los dioses que lo perdonaran por lo que le había hecho y dicho, también les rogaba por el bienestar de su hermano menor.
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Muichiro- este abre lentamente sus ojos con un horrible dolor en todo su cuerpo que le impedía mover ni un músculo, solo podía abrir y cerrar los ojos con mucho esfuerzo - Duele.... duele mucho...
"Abuela"- Mi niño... - acaricia con mucho cuidado la cabeza del más pequeño con una mueca triste en su cara - ¿Qué te pasó mi niño..?
Muichiro- ¿A-abuela...? Me duele...mucho... - la mira con los ojos llorosos por el terrible dolor que le inundaba.
"Abuela"- No te preocupes..la abuela está para cuidarte y hacer que te sientas muy bien - posa un suave beso en su frente sobre su flequillo mientras agarraba una pequeña jeringa de la mesilla apretando con su dedo pulgar la parte donde hacer presión haciendo que salga un líquido semitransparente tirando a color verde.
Muichiro- ¿Abuela..? ¿Qué tienes ahí..? ¿Qué me vas a hacer..? - en un segundo suelta un grito al notar un fuerte apretón en su antebrazo y segundos después un pinchazo notando como se introduce el líquido verdecino en él empezando a llorar por el dolor - ¡Para! ¡Me duele mucho! Porfavor... P-por..favor.... - cae inconscienteen cuestión de milisegundos por el dolor y el líquido que se incrustó en su sangre.
"Abuela"- Ya lo tienes, ahora déjame en paz - mira a la puerta viendo un joven hombre de pelo negro vestido de traje con un sombrero haciéndose parecido a...¿Michael Jackson?
???- Oh vamos, ¿no fue divertido ver sus expresiones de sufrimiento y oír sus gritos de dolor? Se que te divirtió.
"Abuela"- llévatelo, no lo quiero aquí.
???- agarra al pequeño niño inconsciente y desaparece en un segundo.
¡Aaaaahhhh! 823 palabras! Es segunda parte más larga que escribo😭 me gustó mucho como quedó
