·˚ ༘₊· ͟͟͞͞꒰➳ 𝘏𝘰𝘶𝘴𝘦 𝘰𝘧 𝘤𝘢𝘳𝘥𝘴 𝘢𝘯𝘥 𝘤𝘳𝘺𝘴𝘵𝘢𝘭 ˏ➳ ͟͟͞͞꒰·₊༘˚·

༻𓊈𒆜2:Preparación 𒆜𓊉༺

Después de un largo día en casa y tanto dormir por el cansancio del viaje los tres jóvenes cayeron en un sueño profundo hasta el amanecer, siendo Mateo el primero en despertar, se sentó sobre su cama y observó con detenimiento su tapete frente a las patas de madera, lo observo durante un buen rato y después alzó la vista a su armario, estaba abierto pues no terminó de guardar su ropa y realmente le parecía innecesario, de alguna manera volvería a sacarla en algun momento, se levantó por fin pisando de aquel tapete de tonos frios y cafeses, dio tres pasos para caminar hasta que toco la lamina del suelo fria hasta su talón, pego un salto del susto y entonces, recordó que no traía puestas sus pantuflas, las tomó con molestia y las colocó en sus pies. Salió de su habitación para bajar pero al querer retirarse del pasillo Jest estaba ahí, con enojó en la mirada se acercó a el.

-Vuelve a gritar de esa manera y te las verás conmigo, estaba durmiendo- La chica tenía los cabellos alborotados y el ceño fruncido con enojó, después de aquellas palabras que destilaron miedo se dio la vuelta para irse, pero la presencia de Mae la sorprendió.

-¿A donde vas pequeña?, bajaremos a desayunar y saldremos- Mae mencionó a aquella peli azul y posteriormente tomó de los hombros de esta misma para que los tres juntos bajarán a comer algo. Iba a ser un largo día.

No era necesario que los tres guardarán silencio mientras esperaban la comida pero lamentablemente estaba siendo de esa manera, la más pequeña se encontraba indignada por haberle negado el seguir durmiendo, Mateo juraba que estaba pensando temas aleatorios y Mae simplemente tenía hambre, quería comer en ese precisó momento.

Los platos fueron servidos ante ellos, la primera comida del día debía ser la más importante, solo esperaban que se enfriara un poco para empezar a comer, tomaron los utensilios para comenzar hasta que las puertas fueron tocadas y Mr.Lucas se apresuró a recibir a quien fuera que deseaba visitarles.

Mateo miro su reloj, eran las 8 de la mañana y eso era demasiado temprano para ellos, agradecian haberse cambiado antes de bajar pues se trataba de una pareja la cual no conocían.
Entraron a la casa con confianza como si constantemente acudieran a ella, entonces al ser la mayor, era responsabilidad de Mae recibirlos.

-Buenos días, lamento el desorden que haya es solo que apenas llegamos ayer y no hemos terminado de acomodar-
Mae a pesar de todo en realidad no sabía cómo reaccionar frente a gente adulta y mucho menos darles una recibida, ni siquiera sabia quienes eran.

-No hay de que preocuparse pequeña, soy Artur y ella es mi esposa Linda-
Aquel hombre de quizás 50 años señalo a su esposa, una mujer de aspecto frío.

-Probablemente no sepan quienes somos, pues al momento en el que ustedes se fueron de aquí eran muy pequeños para recordarnos, éramos amigos de sus padres, y al momento de irse nos nombraron encargados de la casa. Cuando supimos que volverían realmente nos alegramos y nos gustaría mostrarles el lugar, quizás no recuerden todo.-

Aquel menciono como sugerencia a la mayor, con una sonrisa en el rostro esperando ser reconfortante.

-Estamos bien así, por el momento gracias. Cuando sea necesario nos comunicaremos con ustedes, gracias por su visita-

La menor mencionó mucho antes que sus otros hermanos, apuntando la puerta para que su visita terminará, había algo en ellos que no le gustaba.

La pareja entendió a la perfección y se retiraron del lugar con rapidez para no molestarles.

Volvieron a sus lugares y después de la plática con esas personas comenzaron a comer por fin para apurarse a ir por las cosas que faltarán del hogar.

-¿Que van a comprar? - preguntó Mae al subir a la camioneta para irse.

-Quiero ropa, si vamos a vivir en un lugar nuevo es un cambio de hogar, falta un cambio de estilo, y también quiero decoraciones más para mi habitación-
Respondió la menor, siempre quería estar a la moda y un cambio de hogar jamás cambiaría eso.