DIECINUEVE | Las consecuencias de ser una Black

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Este capituló está dedicado a la persona de TikTok que hizo dos Edits de Heroes, te amo "dear reader" 😭 me hace sentir famose.
Un beso grande XXXX

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De lo que llevaba del semestre, le sorprendían varias cosas: la primera era que su papá fuera tan buen maestro, no dudaba de sus habilidades, pero jamás creyó que tanto ella como casi todo Hogwarts esperara con ansias sus clases, y aun que puede que la mayoría de la emoción fuera porque en realidad sus antiguos maestros no habían sido otra cosa más que incompetentes, Leia no podía negar que su papá tenía un don para enseñar.

La segunda era que al contrario de las de su padre, después de lo del Hipogrifo, las clases de Hagrid se habían tornado extremadamente aburridas. Leia, quien adoraba las bestias fantásticas, estaba harta de cuidar gusarajos.

La tercera no era algo que le sorprendía, era más bien algo que  había descubierto que le gustaba incluso más que el Quidditch y cocinar. De hecho, se trataba de algo que no era una actividad como tal, si no más bien un sentimiento.

Había acabado de entrenar con Slytherin. Por lo general siempre se cambiaba todo el uniforme sudado antes de volver a su habitación y ducharse pero se le había olvidado su ropa de cambio sin querer, así que tuvo que regresar con el resto a la sala común. Le sorprendió encontrarla bastante alegre y con bulla, intento preguntarle a Draco pero se había adelantado y ya subía a su habitación y Miles ya se había escabullido con su novio nuevo hace un par de minutos. Por lo que no encontró mejor cosa que ir donde Pansy, en unos sofás a la esquina  del fondo de la sala común.

—¿por que todo mundo está tan...feliz?—pregunto recargándose en el respaldo del sofá.

—estas sudada—le dijo Daphne, que estaba en un sillón de al frente, con una mueca de asco.

—gracias, no lo había notado—respondió ella blanqueando los ojos—¿Por qué todo mundo está tan feliz?—repitió.

Miró a Pansy que acababa de bajar una revista de brujas y se le quedaba mirando unos segundos sin decir absolutamente nada. Leia encaró una ceja y se miró así misma pensamos que tenía algo.

—tu...—espero que dijera algo más—ahm...Hogsmeade, se acerca el primer fin de semana en Hogsmeade.

Leia abrió la boca con sorpresa, lo había olvidado.

—es primera vez que te veo con el uniforme de Quidditch, quiero decir, el de entrenamiento—comentó Pansy de repente, por forma con la que lo decía, se notaba a lo lejos que algo sucedía. Leia le sonrió.

—si, suelo cambiarme antes de venir a la sala común—explicó ella. Luego algo se le pasó por la cabeza.

Leia había estado sobre pensando demasiado desde la charla sobre parejas que le había dado Pansy la primera semana. Ahora sabía quien era ese tal Anthony Goldstein y más de una vez había visto como, efectivamente, le sonreía a Pansy. Una parte de ella solo quería molestarla, aun que no estaba segura de la razón concreta del porqué.

—¿por qué? ¿Te gusta?—añadió. Leia pudo ver la sorpresa y por un momento dudo en haberlo dicho.

De repente, Pansy se sonrojó. De verdad se sonrojó.

Algo en esa reacción hizo sentir a Leia bastante bien y se preguntó si Pansy alguna vez se habría dado cuenta de cuantas veces ella había provocado la misma reacción en Leia, y si así era, si se sentía de la misma manera.

Pansy desvío la mirada y bufó.

—pfff...estas sudada—le dijo volviendo a su revista, pero aun con esa respuesta, Leia no quito su sonrisa de su rostro.

HEROES | libro I : año 1 - 4 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora