Nadie le advirtió que el amor adolescente llega tarde o temprano.
Baji nunca estuvo interesado en las relaciones serias, solo quería disfrutar de la libertad y no hacer llorar a su madre, pero todo se fue al carajo cuando conoció a cierto rubio de o...
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Chifuyu Matsuno.
Me remuevo incómodo por la posición en la que me encontraba, para luego ágilmente darme vuelta y chocar con el rostro tranquilo del moreno. Vuelvo a dormir pero está vez apoyándome en su pecho desnudo para así tener más comodidad, al notar mi movimiento Ryusei inconscientemente empezó a dar caricias en mi cabeza provocando que el sueño me agarrara pronto.
Una manos acarician mi espalda, mientras el pecho del moreno subía y bajaba calmadamente, bostezo mientras me incorporo para mirarlo. Este me sonríe, yo le devuelvo la sonrisa, me intento levantar para ir al baño y una punzada en mi cadera me detiene.
Vuelvo a recostarme a su lado tapándome por completo dándole la espalda, este se gira y me abraza por detrás pegándome a el, eso precisamente no me desagrada en lo absoluto por lo que pongo mis brazos sobre los suyos
— Buenas noches. - dice el.
— Buenas noches.
— ¿Como dormiste?
— Bien, ¿y tú?
— Bien también, ¿Tienes hambre?
— No, ¿Tú?
— Tampoco...
El esconde su cabeza en mi cuello provocando que sienta su cálida respiración en este. Cierro los ojos dejándome llevar por sus caricias para así respirar tranquilamente.
Unos pasos sobre mí me hacen abrir los ojos, peke-j estaba acomodándose en la cama de Ryusei para echarse una siesta, este simplemente le restó importancia por lo que yo decidí hacer lo mismo, mi vista recae sobre el reloj de la mesita de noche.
— ¡Ryusei es tarde! - exclamó preocupado.
— ¿Tarde? Pero si son las 12 de la noche y es sábado.
— Oh, es cierto.
— Ahora volvamos a dormir, no pienso dejar que te vayas a esta hora.
Asiento ante su petición y me acomodo a su lado para volver a dormir.
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Me remuevo incómodo buscando forma de eliminar el sonido de un teléfono sonando, siento como el moreno gruñe por el ruido y pone su cabeza bajo la almohada para apaciguarlo. Muevo mi brazo hasta mi móvil para prenderlo y ver quién llama a estas horas, mi sorpresa no se hace de esperar al ver que son las diez de la mañana pero más sorpresa me da quién está llamando.
Llamada entrante de "kazutora"
Responder colgar
Me incorporo un poco para así atender al llamado un tanto curioso, acepto la llamada y dirijo el móvil a mi oreja donde suenan tres toques anunciando la conexión por distancia.
