Capítulo Ⅰ: É𝗅 𝗉𝗎𝖾𝖽𝖾 𝗏𝖾𝗋𝗅𝗈𝗌

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La campana sonó, entendiendo al instante que empezarían las clases como de costumbre, automáticamente, los que serían mis nuevos compañeros entraron al salón como si nada, platicando entre sí de cosas triviales.

El asiento a mi diestra fue ocupado por alguien más, que extrañamente tenía una máscara eléctrica que dibujaba sus ojos, le resté importancia ante eso al notar que nuestra nueva profesora había llegado.

Todos, incluyéndome, se levantaron para saludarla, a lo que la mayor correspondió, indicándonos que volviéramos a sentarnos.

—Buenos días, soy la profesora Fukahori Rino; seré su maestra a partir de los tres períodos. Mucho gusto en conocerlos a todos.— Los demás asintieron ante la presentación.

Suspiré aliviado al notar que la nueva sensei*¹ no sea muy estricta, pero no debería juzgar antes de tiempo.

Luego de su presentación, nos hizo pasar al frente para presentarnos y tal vez conocernos un poco mejor, sinceramente esto de las presentaciones o estar expuesto ante un montón de miradas que te presten atención no era lo mío, parecía que todos te juzgaban con la mirada y por decir o hacer una estupidez, las burlas y las críticas se hacían presentes.

Aún así, quise mostrarme indiferente al momento de presentarme, sentí un peso salir de mis hombros cuando dejó de ser mi turno, la verdad necesitaba quitarme la timidez de estar con gente nueva y desconocida.

Las clases pasaron de un momento a otro, dándome cuenta que las materias resultaron ser bastante interesantes, para que mentir, es cierto que hubo una que otra anécdota irrelevante en algunas materias, y a decir verdad no fueron tan aburridas como creía.

Marcaron las una de la tarde, la hora del receso dió inicio, solté un suspiro aliviado cuando finalizaron las primeras horas de clases, ya me estaba muriendo de hambre.

Saqué de mi mochila un bentō blanco, noté que los demás salían a comer o a disfrutar lo que restaba de la hora, por lo que nuevamente había quedado solo en el aula. No le dí mucha importancia a eso, así que me dispuse a comer, no sin antes agradecer por la comida que hizo mi progenitora. ¡Y vaya, realmente sabía bien!

Cuando terminé mi almuerzo, quise explorar la escuela un poco para poder adaptarme a las nuevas instalaciones que nos brindaba, caminé serenamente por los pasillos, saludando con educación a los demás chicos y chicas que asistían en esta escuela.
A punto de cruzar por un pasillo a la izquierda, me detengo abruptamente por casi tropezar con otro estudiante, abrí ligeramente los ojos por la altura de este tipo, sus ojos fríos de un tono oscuro junto con su cabello negro y corto me hacen sentir algo, intimidado.

❝𝐑𝐄𝐒𝐈𝐋𝐈𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀❞ 𝗚𝗕!𝗬𝗮𝗻𝗱𝗲𝗿𝗲 𝗦𝗶𝗺𝘂𝗹𝗮𝘁𝗼𝗿 𝘅 𝗢𝗰!𝗠𝗮𝗹𝗲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora