La alarma de mi teléfono sonaba dando las 6:45 de la mañana, abrí los ojos y me levanté de golpe mirando hacia abajo esperando tener un pecho plano, pero aún seguía con esas grandes bolas de grasa.
— "Carajo." 😒
Me quedé sentado un rato en la cama viendo la bolsa que me había traído Jaqueline.
— "Bueno, es hora." 😒
Tomé la ropa y adormitado bajé al baño, empecé a quitarme la playera, abrí la puerta y para mí sorpresa ahí estaba Rolando, desnudo, saliendo de la regadera.
Por un segundo nos vimos a los ojos y por otro baje la mirada y solo vi como el pene de Rolando empezaba a tener una erección después de que el me viera las tetas.
— "¡😳!"
Cerré la puerta de golpe.
— ¿¡Por qué demonios no tocas la puerta!?" 😰
— ¿¡POR QUE NO LE PONES SEGURO A LA PUERTA!? 😡
Rolando salió del baño con una toalla en la cintura.
— "Ya puedes pasar."
— "Gracias." 😒
— "Pero antes... ¿Quién eres? Paulo no me contado de ti." 😏 me dijo Rolando tapando el camino y poniéndose cerca de mi.
— "Si te lo digo no le vas a creer..." 😶
— "¿A qué te refieres?" 🤔
— "Soy Paulo."
Al principio todo eran risas para Rolando, una broma, pero al contarle todo poco a poco se fue convenciendo de que si era yo.
— "Bueno... ¿Ya me dejas pasar?" 🤨
— "Si, oye..."
— "¿Que?" 🤨
— "¿Me dejas ver?" 😏
— "Vete al diablo" 😒
— "Jaja, tenía que intentarlo, por cierto cierra la cortina de la regadera para no salpicar, anoche dejaste todo mojado."
— "No volverá a pasar..." 😶
Entré al baño, vi el retrete, suspiré profundo y me senté.
— "Solo será hoy Paulo." 😪
Relajé mi cuerpo e hice lo que tenía que hacer. Era tan extraño hacerlo sentado, sentía que no tenía el control, al terminar me metí a bañar. La regadera se sintió muy bien, entre el sueño y el estrés, al menos me daba un poco de calma.
Con el jabón recorría todo mi cuerpo, definitivamente era más suave, lave como pude mi cabello, era tan extraño querer enjabonarme las bolas y no encontrar nada. Abrí los ojos y me encorve para tratar de ver, pero solo había bello púbico. Además de volverme a encontrar con mis nuevas tetas, comencé a enjabonarlas y por un momento recordé que mi Rolando había tenido una erección por estás cosas.
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Tarjeta Rosa
RomancePaulo sueña con jugar en primera división pero su soberbia lo meterá en problemas.