𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 2

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Quiso hablar con Harry Potter, para encontrar una explicación lógica del sorprendente parecido entre ambos, pero no pudo, no porque no quisiera sino por todas las clases que tenía.

-Allí, mira.

-¿Dónde?

-¿El de gafas?

-¿Has visto su cara?

-Es tan parecido a Harry Potter

-¿Crees que sea su hermano gemelo?

Los murmullos siguieron a Aiden Williams desde el momento en que, al día siguiente, salió del dormitorio. Los alumnos que esperaban fuera de las aulas se ponían de puntillas para
mirarlo, o se daban la vuelta en los pasillos, observándolo con atención.

Solo por parecerse al niño que vivió.

Aiden deseaba que no lo hicieran, Al menos no por su parecido a Harry. Al principio decidió restarle importancia al asunto sin embargo cada minuto algún alumno se lo recordaba.

Estaba desayunando cuando justo en aquel momento llegó el correo. Entraron unas cien lechuzas en el Gran Comedor durante el desayuno, volando sobre las mesas hasta encontrar a sus dueños, para dejarles caer encima cartas y paquetes.

Atenea llego con una carta para él y algunos dulces, su lechuza de color negro tenía aquel nombre "Atenea". Algunas veces volaba para mordisquearle una oreja y conseguir una tostada, antes de volver a dormir en la lechucería, con las otras lechuzas del colegio.

Él lo abrió de inmediato.

Querido Aiden

Lo que nos has escrito nos ha desconcertado, ahora entendemos el porque Albus Dumbledore nos mando a llamar. Hablaremos contigo cuando lleguemos.

Scarlett

Aiden suspiró definitivamente la posibilidad de que Harry fuera su hermano estaba descartada, sus padres también estaban sorprendidos por lo que él había escrito.

-Entonces ¿Cómo explicas tu parecido con Potter?.-preguntó Draco de camino a la clase de pociones.

Las clases de Pociones se daban abajo, en un calabozo. Hacía mucho más frío allí que arriba, en la parte principal del castillo, y habría sido igualmente tétrico sin todos aquellos animales conservados, flotando en frascos de vidrio, por todas las paredes.

-Coincidencia, pero él no es mi hermano.-Aiden se limitó a contestar, en verdad él tampoco entendía aquello sin embargo estaba decidido a que lo reconocieran como uno de los mejores estudiantes por sus propios méritos no por su parecido a Harry.

Snape, como Flitwick, comenzó la clase pasando lista y, como Flitwick, se detuvo ante el nombre de Harry.

-Ah, sí.-murmuró.- Harry Potter. Nuestra nueva... celebridad.

Draco Malfoy y sus amigos Crabbe y Goyle rieron tapándose la boca. Mientras que Aiden prefirió mantenerse serio apostaba a que también se detendría al decir su nombre para después voltear a ver a Harry.

Y justo eso sucedió, Snape terminó de pasar lista y miró a la clase.

-Ustedes estan aquí para aprender la sutil ciencia y el arte exacto de hacer
pociones.-comenzó. Hablaba casi en un susurro, pero se le entendía todo. Snape tenía el don de mantener a la clase en silencio, sin ningún
esfuerzo.-Aquí habrá muy poco de estúpidos movimientos de varita y muchos de ustedes dudaran que esto sea magia. No espero que lleguen a entender la belleza de un caldero hirviendo suavemente, con sus vapores relucientes, el delicado poder de los líquidos que se deslizan a través de las venas humanas, hechizando la mente, engañando los sentidos... Puedo enseñarles cómo embotellar la fama, preparar la gloria, hasta detener la muerte... si son algo más que los alcornoques a los que habitualmente tengo que enseñar.

𝐷𝑜𝑝𝑝𝑒𝑙𝑔𝑎𝑛𝑔𝑒𝑟 | Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora