Oscura perdición (Versión antigua)

Mente confusa

+ N-No es que no me guste... p-pero tú me das miedo y me, me violaste y-y me acosas ¿Cómo quieres que acepte que... que a-alguien así me haga sentir bien?- Preguntó el inocente Liu cuya mente se hallaba ahora envuelta en un manojo sin fin de preguntas y planteamientos contradictorios, de dilemas que iban contra su moralidad y de ganar de gritar hasta hacer desaparecer el mundo mismo.

-Es muy fácil aceptarlo, recuerda, solo te tienes que entregar Liu, las dificultades las pones tu- dijo sonriendo y mostrando de nuevo los poderosos caninos antes de volver con su boca al miembro del chico que delante suyo se desesperaba por no saber qué hacer. Alex pasó la lengua por la punta de este y Liu chilló de placer aún con las dos manos oprimiendo su boca, después volvió a meterlo todo en su boca y siguió succionando y lamiendo el pequeño falo del chico mientras este hacia, inconscientemente, movimientos con su cadera entre las manos del vampiro.

De nuevo Liu estuvo a punto de correrse pero Alex actuó más rápido y se sacó el miembro de la boca antes de tapar la punta mojada de este con el dedo pulgar, usando seguramente demasiada fuerza y haciendo chillar al humano.

+ Por favor...-suplicó Liu sabiendo que no aguantaría mas esa dolorosa sensación que le hacía perder la excitación pero que de nuevo recuperaba por culpa de Alex- Por favor... duele...- gimoteó Liu retorciéndose en la cama mientras Alex movía el dedo pulgar estratégicamente situado, haciendo circulo que conseguían arrancar esos dulces gemidos que tanto amaba Alex.

-Si no me lo pides no pienso hacerte sentir placer, ya te lo he dicho- Alex se estaba divirtiendo demasiado con ese juego, había hallado nuevas maneras de torturar a su pequeña presa y hacerla sentir placer al mismo tiempo. Los ojos lloroso de Liu solo le incitaron a una cosa, a meterse de nuevo en su cuerpo, de ensuciarlo hasta que se odiara, pero no lo hizo, no, quería sentir como el pequeño se rendía, quería que perdiera las fuerzas luchando contra su fuerte voluntad y al final, cuando no tuviera más opciones, se entregara- Liu, tu eres muy inexperto ¿de verdad crees que podrás aguantar más? Pídelo y lo haré, de lo contrario...- dejó morir la frase mientras masturbaba el miembro de Liu y acto seguido, cuando de nuevo el menor estuvo a punto de llegar al clímax, acercó sus afilados colmillos al pene que entre sus manos crecía y Liu abrió los ojos como platos revolviéndose, no quería que ningún vampiro le mordiese, pero mucho menos ahí ''estoy perdido, no aguanto más, y encima sus colmillos están tan cerca de mi... ¡oh dios mío! Pero me está haciendo sentir tan bien, no solo su tacto, su compañía... me siento mejor que cuando estoy solo ¡pero debería odiarle! Esto está mal, yo estoy mal... ¡maldita sea! ¿Por qué no le odio? Joder, esta sensación me mata, tengo que pedírselo'' pensó el humano tomando una dura decisión.

+ ¡No! E-eso no...- dijo al ver de nuevo como los colmillos de Alex se acercaban a su zona íntima- por favor... déjame s-sentir placer, yo... q-quiero correrme...- pidió Liu sonrojándose y acto seguido tapándose la cara con ambas manos y sintiendo vergüenza de lo que acababa de decir, él nunca habría hecho o dicho algo así, Liu no era así ¿acaso Alex le estaba cambiando?

-¿Perdona? Es que no te he oído bien, dilo más alto- se burló el vampiro lamiendo la longitud del miembro del otro haciendo que se estremeciera.

+ Q-Quiero... co-corre... correr...me- dijo Liu aún en un tono más bajo que antes, ya no lo soportaba, odiaba esa situación, se odiaba a si mismo por comportarse así pero ¿Por qué no odiaba a Alex?

-Bueno chico, veo que empiezas a portarte bien Liu- dijo Alex antes de volver a meter ese miembro erecto en su boca, lamiéndolo y succionándolo al ritmo de los gemidos de Liu. No fueron necesarios apenas segundos para que Liu se corriera dentro de la boca de Alex, que albergaba sin dificultad todo su miembro.

Alex sonrió por enésima vez esa noche lamiéndose los labios mientras el pequeño respiraba agitadamente.

+Por favor v-vete ¡¿ya tienes lo que querías verdad?! V-vete por favor... déjame en paz y deja de usarme para... para tus juegos enfermizos- pidió Liu sabiendo que realmente si Alex se iba no sentiría más que un vacío doloroso e inexplicable.

-¿Por qué finges que te molesta mi presencia? Acabo de leerte la mente Liu, y por lo que veo el único momento del día en el que no te sientes miserablemente solo y abandonado es cuando yo estoy ahí ¿de verdad quieres que me vaya? No respondas, no necesito que lo hagas- dijo Alex de nuevo en tono burlón.

+ ¡No hagas eso! –Estalló Liu lleno de furia, podía enfadarse tanto como quisiera con Alex pero ¿Por qué seguía sin poder odiarle?- No te metas en mi cabeza ¿es que ni ahí tengo intimidad? A-Alex por favor...-murmuró Liu mientras se hacía un ovillo en la cama, abrazado a sus rodillas pensó en que su única compañía solo sabía meterse dentro de él, de una forma u otra, sin permiso.

-¿Se puede saber qué te pasa Liu?- preguntó el vampiro sin ser amenazante ''Realmente le jode tanto aceptar que le gusto ¿Qué es lo que le pasa? ¿Tanto me odia como para molestarse si le hago sentir bien? Aidan tenía razón, lo estoy volviendo loco'' pensó Alex alargando la mano para acariciar los sedosos cabellos del muchacho que ahora lloraba.

+Me pasa que yo nunca habría hecho ninguna de estas cosas que ahora hago... yo no soy así Alex ¿Qué me estás haciendo? Yo nunca pedí esto...- Sollozó el muchacho deseando que Alex no se fuese pero que se quedase solo su parte buena, si es que había una- No sabría ni como llevar una relación de amistad ¿c-crees que se manejar esto?- Liu solo estaba recostado en su cama, boca abajo y tapándose la cara con el cojín, ni si quiera estaba seguro de que Alex siguiese ahí pero un presentimiento le dijo que así era.

-Solo estas probando cosas nuevas- explicó Alex con toda la amabilidad que le fue posible reunir- es normal que al principio estés confuso pero ¿Qué hay de mal en hacer algo que te gusta?- sus palabras sonaban tan convincentes que a poco estuvo Liu de caer en su engaño, por muy coherente que fuese lo que de esa boca salía, todo lo que en esa mente había era insano hasta puntos incomprensibles.

+Pero yo no estoy haciendo esto porque me gusta ¡Tu me has obligado! Y-y me... me v-violaste...- Liu estaba cada vez más confuso, a cada cosa que decía encontraba nuevas razones como para odiar a Alex y aún así era incapaz.

-Liu, me estas cabreando- dijo amenazante Alex mientras cerraba sus ojos y tomaba con sus dedos el puente de su nariz, haciendo una negación con la cabeza. El tono severo de Alex hizo que Liu sintiera un escalofrío de terror en todo su espinazo- Me voy a ir antes de hacer alguna tontería, pero espero que mañana te portes mejor- advirtió señalando al aludido con el dedo índice antes de desvanecerse como la bruma delante de los ojos de Liu, que con un solo parpadeo perdió por completo la visión de ese hombre que de alguna manera imperceptible dejó la estancia.

La mente de Liu estaba demasiado confusa, él no entendía lo que le pasaba, no era capaz de comprender el motivo por el cual su mente se negaba a odiar a  Alex después de todo el dolor que le había causado, pero realmente todo era muy simple: Liu nunca había destacado, nunca nadie le había prestado atención, nunca nadie había dedicado unos momentos a decirle unas palabras bonitas, ni si quiera sus padres lo quisieron a su lado y ahora alguien le presentaba la oportunidad de estar en su compañía, pero al ser Alex ese alguien Liu no comprendió, abrumado, como entender la situación, él deseaba tanto dejar de estar asquerosamente solo que fue incapaz de odiar al único que le dedicaba actos gentiles por puro interés. Incapaz de diferenciar entre el bien y el mal de aquel sujeto Liu se rehusaba a admitir el placer que aquella noche sintió en sus manos, en las manos manchadas de sangre que todo lo rompían, su calma, su equilibrio mental y, por suerte o desgracia, su amarga soledad.