LIVING DEAD [Fanfic Youtubers] (Terminada)

Capítulo 16- Las galletas de la suerte

[Narra Naomi]

Me despierto en el mismo sofá que la otra vez que me desmayé, pero ésta vez, en vez de estar Samuel, esta Guillermo conmigo. -Buenos días.- me sonríe. Yo me pongo la mano en la cabeza, cansada. -¿Que ha pasado?- -Unas chicas te pegaron, las espante y te desmayaste.- entonces recuerdo todo.

-Es verdad...- me siento en el sofá. -Oye, tengo una sorpresa para ti.- me sorprendo. Le sonrío y le digo irónica:

-¿Un huevo de pascua esta vez?- se ríe.

-No, algo mejor. Ven.- me levanto y salgo por la puerta con él. Andamos un poco por la calle, y nos paramos frente a un restaurante.

-¡¿Que?! ¿Estas loco? Este restaurante es súper caro.-

-Algo que vale mucho para alguien que vale mucho.- -Guillermo, yo no puedo...- me interrumpe.

-Sí puedes; ya lo he pagado.-

-¿Como...?-

-El partner.-

-¿Que?-

-Algún día te lo explicaré.- entra, y al ver que no le sigo, me coge de la mano y me arrastra al interior. Me quedo flipando. Es todo súper elegante y refinado. -Ahí esta su mesa.- un camarero nos lleva a nuestra mesa. Guillermo, caballerosamente, me ayuda a sentarme y después se sienta él. Nos dan la carta, y la miro sin entender nada.

-¿Que van a tomar?- miro a Guillermo en busca de ayuda.

-Tomaremos los dos espaguetis a la carbonara.- cuando el camarero se va, miro a Guillermo culpable.

-Guille, no esta bien que hayas gastado tanto dinero en mí. ¿Por qué lo has hecho?-

-Porque me importas y quiero darte lo mejor.- nos quedamos mirandonos el uno al otro durante un rato que se me hace eterno. Despierto, cuando el camarero trae un plato gigante de espaguetis. -Que aproveche.- miro el plato sin saber por donde empezar. Veo que Guillermo coge el tenedor y empieza a comer, así que hago lo mismo. -¡Estan buenisimos!- Guillermo se empieza a reír sin parar. -¿De que te ríes?- No entiendo nada, hasta que me miro en un espejo que hay en la pared y veo que tengo la boca manchada de nata.

-¡Ahora verás, por reirte!- cojo nata del plato y se la frotó por la cara. Ahora soy yo la que no puedo parar de reírse. -¡Oye!- se mira en el espejo simulando enfado, pero al momento él también se echa a reír. Nos limpiamos y terminamos de comer. De postre nos sacan una galleta de la suerte. -Abrela tú primera- cojo mi galleta y la abro con cuidado. Saco el papel y leo lo que pone. Me quedo flipando al leerlo.