ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 II

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Poco a poco fui entrando a la realidad, el brillo de las cámaras al sacar fotos me había hecho volver. Estaba por preguntar cómo llegué a este punto, pero recordé estar sentada esperando el auto y luego me trajeron aquí, los periodista ya estaban aquí esperando. Mire a los guardaespaldas y ellos estaban a un lado de la puerta con sus mirada puesta en mi.

No iban a moverse de la puerta si esas cámaras no estuvieran apuntando todo el tiempo... No dije ni una palabra para aquellos que ansiaban una verdad mía salida de mi boca para confirmar los rumores, me irritaba y quería moverme para así entrar a la reunión. Di un paso atrás decidida a irme hasta sentír cómo un teléfono se chocaba a mi mejilla.

El flash de las cámaras nunca se detuvieron pero el silencio de los periodistas fue lo que atrajo más la atención de los guardias. Miré a la mujer quien palideció.

- Q u i t a t e.

La mujer fue retirando lentamente el teléfono y luego se alejó. Se había notado el error que cometió, podría amenazarla con la única excusa de que me dejarán ir. Mi postura encorvada se enderezó, compartieron miradas entre ellos notándose el miedo. 

Me alegra de que hubieran estudiado bien mis actitudes o fácilmente como empezaría la masacre.

Me dirigí a lo que sería el edificio más reconocido de New york, City Scientists, tan conocida por buenos rumores como por malos, para una persona que no estaba acostumbrada entrar a este lugar solo diría: "Es el FUTURO".

Policías por cada uno de los rincones que te observan sin pestañear, sus elevadores no necesitaban estar dependiendo por unas cuerdas ahora dependía de otra cosa. Cuando al fin llegamos a ese lugar despreciable solo escuche sus voces, desde afuera sus vidrios eran oscuras así que no se podría ver.

- Usted, es consciente? mirando sus datos y su historial ella es una NIÑA, tiene apenas dieciocho. A los diez años ingresó a un mes después del fallecimiento de sus padres al servicio militar por orden de su tío y dio una gran suma de dinero para que ella pudiera ingresar.

- Comprendo tu angustia pero ella es una de las mejores candidatas, renunció el servicio militar después de que su general... Ya saben. Nicolle no se ganó así como así el apodo de-

Y de repente silencio. Eché atrás mi cabeza, debieron informar que estaba aquí. La puerta se abrió y se dejó ver un hombre de mayor edad. Desde aquí sentía la incomodidad, opinaba igual que ellos. No debía estar ahí. Al ingresar y escuchar cada "Alagó" se fue a la conversación más importante.

- Para que puedas entender estamos haciendo unos... - Miro a la chica pidiendo una ayuda para que se explicará correctamente lo que en papeles decía.

- hace unos meses nos llegó una información secreta... Trata sobre estos nativos alienígenas llamados Na'vi, aparentaban ser un pueblo ignorante pero resultó ser una farsa. Gracias a qué tenemos ADN podemos hacer Humanos/Na'vi en resumen avatar. Pero queremos hacer un experimento que va más allá de lo imaginado y-

- Bien. Si acepto, que me dan a cambio? Porque tengo un niño al cual crío y su alimentación e educación no es gratis.. o si?

- Eh... Tienes razón, mientras estés aquí te daremos dónde dormir y comida, le daremos a tu hijo una niñera. Recibirá un cheque por mes o por semana.

- Cuanto? - Me acomode en mi asiento y esperaba alguna respuesta. Mientras se miraban y susurraban terminaron por decidir cual seria la cantidad de ceros que pondrían en ese cheque.

Así como se decidió todo, el primer día no recibí nada. Al siguiente me llevaron al laboratorio, estudiaron mi sangre buscaron alguna enfermedad para así quitarla pero al ver que no la tenía continuaron.

Iniciaron con ciertas pastillas para ver que alteración tenían sobre mi. Al principio sentía calor hasta después de unos minutos empecé con vómitos y cólicos.

El proceso sería doloroso, dijeron.

Antes de desaparecer de mi trabajo como camarera y como hermana/madre, dije que estaría de viaje por unos tres o cuatro años.
Costaba mucho concentrarme aún sabiendo que mi terror era las agujas.

En resumen fue un infierno... Ahora ya no era un humano, Mi oxigeno dependía del oxígeno de pandora (A veces). Fue repentino, un día estaba completamente bien no tenía fiebre hasta que en la madrugada empecé a toser, toque el botón que me dejaron en la pared cerca de la puerta. Mis pulmones necesitaba aire, me ahoga en ese entonces. Lo último que vi fueron aquellos científicos que entraron alterados. Hasta creí haber visto a..-

- Ya estas lista. - Dijo Lorenz. Me observó de arriba y abajo, miro bien mis ojos aunque con la máscara que llevaba puesta le dificultaban examinarme bien.

- Hubo unos cambios en ti. Tu oxigeno cambio de forma drástica pensamos que no iba adelantarse una semana. La lista es larga pero en aspectos físicos sigues igual solo que tu cabello... Se volvió blanco, tus ojos ya no son marrones... Tienes Heterocromía.

- Enserio? Entonces no será necesario ir a las peluquerías para hacerme decoloración. - Bostece. Ya estaba preparada para volver con mi hijo, solo necesito un cálido abrazo de el. Su hermosa sonrisa que siempre fue mis fuerzas para aguantar este dolor físico.

- Teniente general. - dijeron los soldados quienes me reconocieron de inmediato y dejaron a un lado sus armas y se pararon firmemente.

- Espera cómo que teniente...? - Lorenzo parecía desmayarse y lo hizo.

- ¡Mamá! - Grito mi pequeño corriendo a mi dirección

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- ¡Mamá! - Grito mi pequeño corriendo a mi dirección.

Una vez que me arrodille para que pudiéramos abrazarnos, parecía flash corriendo, al ya sentir su cuerpo chocar con el mío, lo abrace con todas mis fuerzas. Me levante con el y gire sobre mis talones y escuchaba su pequeña risa.

- Mi niño... No sabes cuanta falta me hiciste.

- ¡Yo te extrañe mucho! ¡Mucho! ¡Mucho! - Empezaba a besar la máscara, aunque se notaba el disgusto pero no me lo quito.

Acomode la ropa que tenia puesta, hasta note algunos moretones en su hombro y cuello. Empecé por analizar la situación en la que se encontraba Nethan, los hombres que habían elegido a la niñera estaban nerviosos, sus trajes lujosos los empezaban acomodar ya que empezaban a molestarlas. Gotas de transpiración empezaban a caer de su cien al notar mi mirada.

- Como te trato la niñera, cielo? - Esperaba que su mirada se mantuviera fija en la mía para que mis dudas y el miedo que empezaba a recorrer por todo mi cuerpo no fueran confirmadas. Pero sus bellos ojos azulados se fueron en esa mujer, su sonrisa se agrandó más, podía oler ese maldito aroma amargo en ella.

- Me trató muy bien, fue amable conmigo. Me compro dulces y comida muy rica! - Dijo. A través de la máscara podía oler su miedo, sus latidos los oía y eso... Empezaba a despertar los instintos animales que habían puesto los científicos en mi. 

Mire a Lorenz quien llevaba observando la situación.

- Quiero que se lleven a Nethan con Rocié, tengo una conversación un tanto importante con la Ex-niñera. - Su sonrisa cayó al escuchar lo último, su mirada completamente llena de arrogancia se reemplazó a una de miedo.

𝑇𝑜𝑎𝑘'𝑘𝑎𝑚 || Avatar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora