K.S.J/ES UN IDIOTA 2/4

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Suspiré una vez más aburrida, mire al chico detrás del escritorio y aún se notaba pensativo casi triste, y ahí es cuando me puse a pensar si hice mal en hacer ese comentario.

- Aveces odio tener de papá a un ángel.– tomé mi mochila buscando el dulce que siempre me dejaba en esta, - toma.– lo puse frente a el a lo que me miró sin entender, - quiero disculparme, mi padre dice que una buena disculpa viene mejor con algo dulce.– me alce de hombros, - así que toma.– lo tomo en manos aún confundido.

-- ¿Por qué te disculpas conmigo?.– ladeo la cabeza confundida, -- con la que si deberías disculparte es con Kim.– suspiré rodando los ojos.

- No me disculparé con ella, prefiero mil veces hacer servicio comunitario que disculparme por algo que no siento la necesidad.– me cruze de brazos, - si me disculpo contigo fue por mi comentario de mal gusto, no quería herir tus sentimientos.– di la vuelta regresando a mi lugar, - idiota.– murmure sacando los libros para así distraerme.

Sentí el golpe en mi cabeza a lo que levanté la mirada, -- Toma, te comparto.– mire como partía el chocolate en dos y me daba la mitad, -- no me gusta comer solo.– se sentó a mi lado comiendo, -- se que soy hermoso, más no es para que me mires tanto hermosa.– me tiro un beso a lo que rodé los ojos volviendo mi atención al libro.

- Idiota.– negué escuchando su risa.

Después de unos minutos termine mi tarea, suspiré cerrando el libro para así meterlo de nuevo a mi mochila, me recargue en la silla mirando a la ventana ya estaba oscureciendo.

- Kim.– este soltó un sonido, - oye, ¿porque tú si puedes usar tu teléfono?.– lo mire indignada jugando con este.

-- Yo no soy el castigado.– se alzó de hombros, -- aparte solo me mandaron a qué te vigilara.– volvió su atención al juego.

- Cómo sea.– suspiré recargado mi espalda de nuevo en la silla, - ¿hasta que hora estaremos aquí?.– sentía sueño, ya que parecía tarde.

-- No lo sé.– se volvió alzar de hombros a lo que negué, -- ¿que haces?.– se sobresaltó al sentir como me recargaba en su hombro.

- Deja de moverte, quiero dormir un poco.– este solo hizo caso a lo que no se movió más.

-- Eres tan mandona.– sonreí a lo susurrado.

A los segundos escuché el ruido del teléfono depositado en la mesa, para después sentir como me recostaba mejor en su pecho, reí al ver qué se debatia si me abrazaba o no.

- Eres tan niño.– susurré tomando su mano para que me abraza.

-- No quería que te sintieras incómoda.– negué pegándome más a el.

El ruido de un móvil se escuchaba por todo el salón a lo que me hizo abrir los ojos, sonreí al ver qué él también se había dormido, tomé su móvil apagando la alarma que solo decía “hora de ir a casa”, reí negando, me levanté sin hacer ruido para así tomar el mío, regrese tomándole una foto a escondidas, una vez hecho eso lo guarde para así despertarlo.

- Kim.– lo moví un poco, - Kim.– mire como se removía alzando sus gafas, - es hora de irnos, ya casi son las ocho.– este solo asintió aún adormilado, - vamos flojo que quiero irme a casa.– este solo sonrió.

-- ¿Por qué no vas?.– pregunto tallando sus ojos, -- los dormitorios aún están abiertos.– fruncí el entrecejo.

- Yo no me estoy quedando en los dormitorios.– tomé mi mochila cuando se levantó.

Historias De BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora