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32- Las Distantes

[ #4 One-shots ]

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En la mitología griega, existen dioses que no se llevan bien (se odian o tienen rivalidades); como el triángulo de Ares, Poseidón y Atenea, o como el desdichado en el amor, Apolo y el pequeño delincuente, Eros.

En fin, Perséfone y Afrodita, no eran diosas que se odiasen mutuamente, de hecho, tenían una relación normal.

No eran amigas pero tampoco se desagradaban la una a la otra, era normal, hasta que llegó el día en que Adonis, entró en sus corazones y todo se volvió un caos.

Desde su fallecimiento, ninguna de las dos se ha vuelto a ver a la cara. Hasta que se hizo un “pequeña reunión” (en realidad era una gran fiesta), hecha por Zeus, que podían asistir los dioses de cualquier tipo.

Hades no le gusta salir, menos cuando está con su esposa pero está por alguna razón, si quería asistir.

De todos modos, era un día tranquilo aparentemente.

La diosa obligó a su marido a ir, inmediatamente, ya había pelea entre su madre y esposo.

Perséfone, no estaba de humor para soportarlos a ambos, por lo que se dejó llevar por la música y se fue danzando hacía otro lugar.

En esa fiesta, estaba Afrodita y Ares, quién estaba distraído con la comida que se le estaba dando a los invitados.

La diosa amorosa, lo dejó solo por un momento y este, ni lo notó.

La rubia, no haría mucho, aparte de caminar, sin ningún rumbo fijo y sin importarle, quien le hablase.

De repente el destino hace sus jugadas, las dos diosas se fueron a una parte sin tanto público y Perséfone y Afrodita, se ven desde hace mucho tiempo.

Al principio solo era silencio y mirar a otra parte, pero luego empezó una pequeña conversación.

—Me sorprende que asistieras hoy —dijo la rubia, rascándose la nuca—. Tú decías, que este tipo de cosas apestaban.

—Y me lo sigue pareciendo —respondió devuelta, luego puso sus manos en su cadera—. Pero, algún día, tenía que venir ¿No? O ¿es que acaso te molesta mi presencia?

Afrodita se alteró un poco por lo antedicho.

—Eh, claro que no. Yo no dije eso.

—Pero apuesto que lo pensaste.