Jisung era solo un omega más, trabajando en un bar sirviendo tragos, todo muy normal. Hasta que por casualidades de la vida, conoce a los trillizos Bang.
Jisung jamás pensó que el sólo conocerlos lo llevaría a tener un gran cambio en su vida, un ca...
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Jeongin veía inquisitivamente a su mejor amigo, estaban en la oficina del omega intentando firmar una serie de documentos que tenían que ser aprobados por los tres alfas líderes y por el omega Luna de Gimpo. Pero estaba siendo muy difícil para Jisung concentrarse, principalmente porque ese día amanecido con muchas náuseas y parecía que nada se mantenía en su estómago.
Llevaban cerca de seis meses siendo los nuevos líderes, Jeongin había decidido ser la mano derecha de su mejor amigo para que Jisung no se sintiera tan solo entre todos los asuntos que debía atender.
No había sido nada fácil adaptarse, incluso pelearon una que otra vez, pero siempre terminaban disculpándose y volvían a trabajar como siempre. Pero In estaba preocupado, Jisung se veía tan pálido, no creía que estuviera bien que se estuviera preocupando tanto por esto.
—Jisunggie, enserio tienes que ir al hospital —comentó Jeongin preocupado.
—Pero tenemos mucho trabajo In, no puedo dejarte todo a ti, además no puedes firmar en mi nombre, tengo que hacerlo yo —suspiró intentando enfocarse en los documentos.
—Pero Jisung, también tu celo se ha retrasado una semana y ahora estas con estos síntomas ¿no crees que puede ser...?
—No lo digas, ya una vez pensamos que podía ser y no fue, no quiero volver a ilusionarlos —murmuró.
—Pero...
—Jeongin por favor déjame hacer mi trabajo — pidió.
—Bien, pero si empeoras, le diré a Pher-hyung que te sientes mal —señalo decidido.
Jeongin salió de la oficina para conseguir un té que pudiera calmar al omega, pero seguía preocupado. Jisung había tenido su último celo unos meses atrás, también Bangchan, Christopher y Chris habían tenido el suyo unas semanas después. Ahora Jisung llevaba unas semanas de retraso en su celo, pero eso había pasado en ocasiones anteriores y luego su celo había aparecido, así que entendía porque Jisung estaba tan renuente a aceptar lo obvio.
Debía pensar en una manera de llevarlo al hospital para hacerse unos análisis sin que se negara o pusiera el trabajo como excusa. Observando la agenda con las reuniones para el omega Luna de Gimpo, observo una cita para ir a visitar el gran hospital de Gimpo. Jisung tenía que hacer una visita para saludar a algunos pacientes, en especial a los niños, podría aprovechar ese día para obligarlo a tener una cita en dicho hospital.
Jeongin estaba decidido, ayudaría a su mejor amigo, aun si este se mostraba renuente.
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—Es un placer tenerle aquí Omega Luna, espero que su salud este estable y que su matrimonio sea uno muy feliz —saludó la enfermera que lo estaba guiando por el área pediátrica.
—Muchas gracias, es un placer conocer a una de las personas que se esfuerzan tanto por ayudar a los que no tienen tan buena salud —saludó.
—Es mi trabajo, alguien tiene que ayudar ¿no es así? —sonrió con nerviosismo—. Sígame por aquí —pidió—. Esta es el área de los niños con enfermedades terminales, la mayoría son betas y lamentablemente no podemos hacer mucho más que aliviar sus dolores —suspiró con melancolía.
