T.I.D

Diagnóstico

Tanto Sunny como sus padres habían salido del psiquiátrico, con una terrible noticia.

Su hijo padecía un transtorno, a tan corta edad ya tenía un severo daño psicológico.

¿Se le puede culpar?

La muerte de Mari, el alejamiento de sus mejores amigos, sus pésimas habilidades sociales, el abandono emocional recibido por sus padres fue lo que detonó la estabilidad del adolescente.

El joven no decía palabra alguna, estaba consciente de lo que tenía y padecía, sabía desde antes que no era normal esas lagunas mentales que aparecían cada que se sentía amenazado, nervioso o con miedo.

La consulta se debió por una pelea contra Aubrey.

Sus padres estaban preocupados, obviamente lo estaban y pagarían lo necesario para llevar a cabo su tratamiento.

Por su parte Sunny estaba completamente neutro, eso lo caracterizaba siempre y era su "personalidad original"

Al menos su madre así lo quiso tomar.

No era fácil de digerir para nadie.

Sunny no recordaba nada de lo que había pasado.

Lo último que recuerda fue que Aubrey empujó a Basil a un lago y kel se había sumergido para rescatarlo.

La familia salió del hospital psiquiátrico y se apresuraron a ir al hospital, donde se encontraban Basil y Aubrey.

Sus padres tomaron responsabilidad y decidieron pagar lo que fuera necesario para la recuperación de Aubrey.

Según Kel, cuando subió con Basil pudo ver a Sunny intentando enterrar un cuchillo en el pecho de la joven.

Pudo detenerlo pero no había llegado antes para todo el daño que Sunny le hizo a Aubrey.

Sunny entró a la habitación de su amiga.

Tenía varias cortadas y moretones por toda la cara y estaba seguro que en todo su cuerpo.

Sintió un gran arrepentimiento al verla de ese modo, se acercó a disculparse.

—¿Qué quieres?

Se podía notar la molestia en su voz, aunque también miedo.

—Perdón.

—Si es todo lo que tienes que decir mejor vete.

—No era mi intención lastimarte.

—¡Lo pude notar en tu intento de asesinarme!

—Yo no quiero lastimar a nadie de mis amigos.

Aun se mantenía sereno pero comenzaba a desesperarse, sentirse pesado y arrepentimiento no le ayudaba a pensar bien.

—¿Entonces no soy tu amiga?

—Eres mi amiga de hace años, no quería lastimarte.

Antes de seguir con esa discusión sus padres también entraron a la habitación, Sunny se retiro de la habitación junto con ellos, también tenía que visitar a Basil, era quien más le preocupaba, aunque no quisiera admitirlo.