Alegria 🌑

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N/t: hoy tuve un día horrible, saben lo difícil que es cuidar niños pequeños es un asco, aclaro cuido a hija de una tía de 5 años y hoy me hizo un drama horrible y asta me golpeo, ya solo se la deje a mi abuela y me encerré en mi cuarto.... Yo solo quiero decir aquellas que son madres que valentía y paciencia a los niños en cerio. Bueno los dejo con un capitulo corto y sorpresas ❤😊













Los molestos rallos de sol empezaban a molestar a Bakugo el cual estaba recargado en la puerta de Kirishima, por alguna razón Bakugo se sentía extraño, pero eso, duro poco al recordar lo que paso la noche anterior con su amigo o amante, en este punto ya ni el mismo sabía que era de Kirishima.


-Liz, esa maldita perra – si recordó lo que había escuchado de la habitación de alado, el simple hecho de recordar eso le producía asco. Por la cabeza de Bakugo pasaron múltiples ideas de lo que encontraría al momento de entrar a esa habitación, las manos le empezaron a sudar del solo hecho de pensar que tipo en escena podría encontrar en la habitación entre ellas ambos sin ropa o los múltiples desechos de condones era una simple tortura.

-me rendiré y daré mi derroto, si soy Bakugo katsuki, tengo orgullo y – antes de poder terminar el sonido de la puerta siendo abriéndose y él cayendo, adentro de la habitación – ah

-buenos días! – saludo alegre un pelirrojo, una pequeña sonrisa y con ello Bakugo volvió a caer ante ese chico – veo que despertaste, trate de llevarte a tu habitación anoche, pero estabas necio con que querías quedarte a hacer guardia en mi puerta, te pregunte el porqué, pero solo decías que no me importaba

-me quede aquí – pregunto incrédulo, pero eso no importaba ahora. Se levantó de golpe y empezó a inspeccionar la habitación del pelirrojo, pero esta estaba normal, nada fuera de lo normal, ningún rastro de condones, velas o siquiera de olor a chocolate o de olores de sexo – donde escondiste a esa maldita dime

-a quien? – el pelirrojo solo se sentó en el piso y tomo una almohada para poder ponerla de soporte – a hablas de Liz, bueno ella no está aquí, lo más seguro es que esté haciendo algo o en los dormitorios de su clase

-dios esa chica está loca Kirishima

- loca? Creo que no es el término para el cual me referiría a ella

-me largo, tú y tu novicita pueden hacer lo que les venga en gana


Bakugo solo salió y entro de prisa a su habitación, claro si notar un hecho Kirishima había recuperado sus emociones cada una de ella.


-todo fue un mal sueño – se dijo – si, un asqueroso sueño, me alegro de poder ver de nuevo a Kirishima – sonrió, pero esa sonrisa duro poco al recordar que la noche anterior dormida en el pasillo – creo que vale la pena dormir en el pasillo si es para proteger a Kirishima











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-como que la maldita alucinación dura solo unas horas – gritaba una rubia a su celular – pagué demasiado para que me digan que esa maldita cosa tiene una duración de unas horas y donde está lo interesante de este estúpido producto

-señorita, como ya le habíamos informado antes, nuestro producto dura unas horas, máximo unas 6 horas no más ni menos, en la misma página se especifica esta en letras grandes y en negrita, así que no pude reclamar – se podía escuchar la voz de alguna vendedora la cual ya había llegado a su límite de paciencia

-ah, pero esta maldita cosa no funciona como lo promete, especifica que la persona con la cual la usaras será ligera como una pluma

- señorita, es una simple frase que usted inventó, ay mismo dice que con quien use nuestro producto caerá en una pesadilla para él, ya sea temor a un payaso o a un simple insecto, y que caerá a los minutos

- tsk – la rubia solo colgó la llamaba y volvió a ver aquella botella – maldito seas Bakugo katsuki










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La noche anterior, Bakugo encontró a Liz en el pasillo.

-que te trae a este lugar, perra – dijo con desprecio Bakugo a la rubia

-ya sabes, Eijiro es quien me trae a este horrible pasillo – contesto la chica altanera – pero dime pequeña mierda, que no tienes pasantías como los demás chicos, oh… ya sé lo más seguro es que nadie te quiera en su agencia por mal hablado o por tú asquerosos modales para dirigirte a los civiles

-tsk, eso no debería importarte maldita rubia oxigenada

- es natural imbécil, no como tu cabello

- no se nota, tu cabello es de tinte, de seguro del más barato o me equivoco – una sonrisa de triunfo se posicionó en el rostro de Bakugo – ahora que hacer aquí

- lamento informarte que este rubio no es de ninguna caja de tinte – se acomodó el cabello, para empezar a acariciarlo – y yo solo he venido a traerte un pequeño e insignificante presente




-presente? No quiero nada que venga de una rubia como tú



- lo amaras – Liz, solo lanzo la lata, la cual Bakugo solo la agarro y la exploto. Un humo entre azul y morado salió de esa lata, la cual dejo atarantado a Bakugo.

-qué diablos era eso?

- un regalo, ten horribles pesadillas – La chica solo dejo el pasillo y dejo a un moribundo Bakugo el cual se recargó en la puerta de Kirishima.

-yo te protegeré Kirishima – Soltó el rubio antes de caer en un sueño, el cual era una pesadilla. Una horrible pesadilla, la cual parecería real ante él, pero solo sería un sueño

Corazón de Hielo ❄️ TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora