Hirai Momo, una chica de 26 años, tuvo un accidente por lo que quedó paralítica, evitando poder levantarse y caminar.
Entro en una fuerte depresión, evitando al círculo social que la rodeaba, dejando de comer, dejando la gran pasión que tenía por el...
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Dahyun caminaba por las frías calles de Londres, pues ya era invierno y estas estaban cubiertas por una gran capa de nieve. El humor de Dahyun había caído y ahora no se encontraba con esa chispa alegre que la caracterizaba, varias personas que pasaban la saludaban pero ella solo les correspondia con una sonrisa, dejando a las personas confundidas.
Le había contado todo a su madre a travez de una llamada telefónica, esta inmediatamente la consolo, pues aunque se trate de un trabajo perdido, Dahyun le había agarrado cariño. Fueron tantos años tirados a la basura, y lo peor es que no le habían dado alguna explicación.
Llego a su hogar, cenando con sus familiares y contándoles como le fue en su dia, se lavo los dientes y se puso una cómodo pijama con dibujos de águilas. Sus padres le habían dicho que no se preocupara, pero ella insistia en buscar otro empleo. Y mañana no seria la excepción.
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— ¿Crees que me den el trabajo? — pregunto Dahyun, a su novia, Tzuyu.
Llevaban 2 años de relación, conociéndose en su universidad, pues ambas tenían una gran pasión por el canto, estudiando la misma carrera. Empezaron siendo amigas, pero luego de 1 años, ambas sabían que lo que sentían no era un simple cariño de "amigas", por lo que con el tiempo, obtuvieron una primera cita, enterándose ambas de sus sentimientos y asi comenzando una bonita relación.
— ¡Por supuesto que si, cariño! — Apoyo la castaña.
Dahyun sonrio ante la ternura que transmitía su novia.
— Mañana tengo que ir a una entrevista con la señora.
Dahyun, por la mañana se dedicó en buscar algún empleo nuevo, y por supuesto que la suerte estaba con ella el día de hoy, pues le recomendaron un trabajo en donde solo tenía que cuidar y hacerle compañía a una discapacitada de 26 años, aparte, le ofrecían una paga buena.
— Espero y la muchacha esa no se haga caca en sus pañales —bromeo su novia, soltando una carcajada. Obvio que a Dahyun no le gustó para nada esa broma.
— Oye, no digas esas cosas, respeta - regaño la peliplateada a la castaña, ésta solo bufo.
- Lo que sea. Tengo una reunión con mis amigos, ¡Suerte, cariño! - dahyun asintió y suspiro, observando como su novia se alejaba.
Suponía que el trabajo era bueno, pero contaba que solo eran 6 meses, ¿la razón? no se sabia. Solo era cuidar de aquella chica de 26 años y hacerle compañía, quizá pueda hacerse su amiga y por supuesto que esto le agradaba, le haría el mejor chocolate caliente del mundo, y exclusivamente para ella.
Termino su taza de Té y se dirigió a su respectivo hogar, no sin antes pagar. Habia sido un dia agotado, mañana tendría un nuevo empleo y esto la entusiasmaba. Seria un gran dia.
Y valla que si.
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