Desde que nací viví rodeada de lujos absurdos, rodeada de personas falsas, que con tal de quedar bien harían de todo a su beneficio.Jamas me lleve bien con mi familia, a excepción de mis padres, ellos por más de que me cumplían cualquier capricho no eran como todos ellos, ellos si eran reales, tengo suerte de no ser un de esas a la que sus padres le dan todo menos una mínima de atención.
Mis padres eran como cualquier padres normales, me complacían cualquier gusto, pero también me castigaban, pero seguían siendo comprensivos.A mis padres nunca les importo verse bien ante la sociedad, eran amables solo porque así son, respetuosos hasta que la paciencia de aguantar a gente hipócrita y falsa desaparecía.
Cómo en este preciso momento.. la bomba acaba de estallar.
-Como te atreves a ser alguien tan desubicado!!. Mucha sonrisita y carita de angel, pero no eres más que un vil infeliz.
Mi madre era la bomba.. siempre muy linda pero nunca se sabe que puede pasar cuando estalla.
-No eres más que un canalla, mediocre y sin futuro.- dijo mi padre.
Mi padre era más calmado, aunque estuviera por meterle una bala en el cerebro a alguien el seguiría calmado. Actúa siempre con elegancia y sin importarle las consecuencias que generan sus acciones y a veces sus palabras hirientes.
Familia poderosa, son intocables.-Rob es un malentendido, no quiero ofender a nadie pero tú mujer.. -Antes de que continuara con su estúpido acento de idiota,y su historia mediocre. Mi Madre le arrojó una copa de vino tinto y mi padre le dió una bofetada.
-Sñ.Lee me parece muy inapropiado el vocabulario que usa refiriéndose a una mujer. Pero peor aún a mi mujer, olvídese de que firme su absurdo contrato.-Mi padre se levantó tranquilamente de la mesa y tomo la mano de mi madre para salir del elegante restauran.
Algo que amo de ellos aparte de su sinceridad y autenticidad. Es que por nada del mundo se perderían el uno al otro, aunque pienso que el amor es una perdida de tiempo a veces, mis padres me demuestran lo contrario.
-Rebe Hija vámonos cariño.- Mi madre cambio su tono y me miro con dulzura para dirigirse a mi.
-si madre.- Me apresure a colocarme a su lado para marcharnos juntos.
La historia de amor de mis padres parece un cuento, largo complicado y hermoso.
Una vez mi madre dijo que yo tendría mi propio cuento, fue cuando tenía 5, si en esos tiempos uno se emociona por todo.A si mis padres, Rob y Elena Díaz.. y yo su querida hija única Rebeca Díaz. Somos una familia poderosa, somos europeos que decidieron mudarse a Corea del Sur porque nos beneficiaba mucho. Estudio en una secundaria prestigiosa, eso significa que ya estoy acostumbrada a estar rodeada de hipocresía y drama. Y voy cursando el ante último año. Ya casi salgo de la cárcel de princesa..
~•Eunwoo•~
Lamentablemente está vida no es para mí lo mejor del mundo. Me encontraba discutiendo una vez más por cualquier estupidez con mi padre.
-Estas castigo oíste, no vuelves a salir de esta casa amenos que sea para ir al colegio. No te quiero serca de esa tienda en la que vendes tonterías. Eres mi hijo no nesecitas ganarte dinero de forma tan humillante, si alguien te viera y reconociera tendría que limpiar tu nombre.
-No estube en la estúpida cárcel, solo me gano mi propia vida. Tanto te cuesta entender, no quiero nada de ti ni tu estúpido dinero ni tu estúpida sociedad ni tu estúpida compañía. Ten en claro que no la heredare. -Sali de mi casa lo más rápido posible para no volver más. Estaba harto.
Sabía que después de ese dia mi padre me buscaría en cada rincón para regresarme a su casa. Al principio fue así.. pero ahora ya no tengo a los hombres de mi padre intentando secuestrarme, solo se que me vigilan. Mi padre se rindió y me dejó tener mi estúpida vida.. pero no iba a bajar la guardia. Mi padre haría cualquier cosa para convertirme en su versión de hijo perfecto.
Yo por mi parte seguí llendo al tonto y prestigioso colegio, no gracias a mi padre ya que desde ese día que me escape decidió bloquear mis tarjetas de crédito y no pagar mi educación.Mi abuela era la única que me entendia y a la única que quería, ella me heredó su fortuna, y me acogió en su casa. Paga mi educación y me deja hacer lo que me gusta y lo que yo quiero hacer con mi vida.
Dejando de lado todo eso, en este preciso momento me encontraba entrenando con el equipo de baloncesto.
-Oye Eunwoo. -Jackson el número ocho se ocupó de pasarme el balón sin ningún problema para que yo tan solo lo encestara. Poco después de eso se empezaron a escuchar los chillidos de ratas que se encontraban viendo desde las gradas.
-Ahhhhh! Eunwoo!!. -Una chica loca y acosadora desde primero de secundaria chillo tal cual rata aplastada.
En esta escuela era conocido por ser el capitán del equipo de baloncesto y ser considerado guapo.. algo que a veces uso a mi favor.
-Dios Woo tu acosadora me dejó sordo, podrías calmarla?.-Jackson el al igual que yo con muchas chicas detrás, y como no es un tipo guapo con un buen branceado y buen físico, de no más de un 1,74m y 64kg de facha. Pero comparado conmigo la diferencia era que el no tenía fans acosadores.
-Ni me lo digas .. estoy semi sordo desde las estatales.- Jackson solo se rió y los dos junto al equipo continuamos con el entrenamiento.
Unas horas después del entrenamiento, me encontraba bajo las duchas de los vestuarios, dejando que el agua se llevará todo el sudor. Salí con una toalla enredada en mi cintura y me dispuse a vestirme. Cuando de repente levanté la vista y Vi la loca sicópata acosadora compulsiva, lo que me hizo pegar un princo del susto y casi infarto que me dió.
-Que carajos haces aquí?!- me daba miedo hasta mirarla fijo a los ojos.
-mi amorcito te estoy visitando..
-que no ves que estoy ocupado? Solo salte.-conteste de mala gana y harto.
-pero..
-pero nada ya vete no deberías estar aquí.-La empuje hasta la salida de los vestidores y ya por fin pude vestirme en paz.
Al salir y caminar por los silencios pasillos de la escuela donde solo quedaban alumnos que formaban parte de algún club o deporte. No pude evitar fijarme en una chica que iba pasando de la que jamás había notado.
Cabello corto hasta los hombros y oscuro, ojos brillantes y semi verdosos, piel tan pálida como la nieve, labios de una tonalidad perfecta,un delineado perfecto,sus mejillas con un leve sonrojo que le daba un toque adorable y vestía prendas costosas unos tenis blancos, pantalones del mismo color un suéter tejido celeste ,una boina blanca y un pequeño collar con una luna y una inicial que era la R ,que alcance a ver antes de que desapareciera de mi Vista.
Tan solo pensé.
-Que hace la hermosa blanca nieves en esta escuela?.
ESTÁS LEYENDO
•𝑨𝒎𝒐𝒓 𝑫𝒆𝒏𝒆𝒈𝒂𝒅𝒐•
RandomRebeca Díaz es alguien perfecta en muchos sentidos, adinerada, hermosa, con buenas calificaciones, y buenos padres y amigos, que más puede pedir. Pero llega un momento en el que tu vida se pone de cabeza por una persona que te puede hacer sentir mil...