キツネの聖域 Kitsune no seiiki

⛩️•4

A pesar de que su mañana estuvo aburrida ver clases durante medio día , luego volver a casa para cambiarse no hacía sus tareas prefería hacerlas en el templo por qué lo único que quería hacer en su casa era cambiarse y nada más .

Abrió la puerta de aquella gran casa y se encamino hasta su habitación subía las escaleras con velocidad no queriendo tardar ni un minuto más , tras llegar a su habitación giro el pomo de la puerta para abrir de esta se adentro y asu vez cerro nuevamente la puerta corrió al baño para cambiar se .

Tras salir de la ducha abrió su armario sacando de este un pantalón Color mostaza claro y una camisa blanca con botones , sus zapatos eran negros . El pantalón era algo ajustado en los tobillos y pegado algo en las piernas usaba aquel amuleto en su tobillo que su antiguo maestro le dió este era para su protección o eso decía el

Al verse listo salió de su habitación tomando su mochila dispuesto a irse de casa a la montaña. Tomo un autobús y aquel mismo camino hasta llegar a aquellas escaleras cada que subía esas escaleras sentía que todo el peso en sus hombros desaparecía y le daba ánimos de subir con más prisa — oh hola Mika – le saludo la joven sacerdotisa con una sonrisa

— hola maestra Shinoa – hizo una pequeña reverencia hacia su mayor está se sintió honrada por el gesto ese joven tenía buenos modales – ¿que haremos hoy?

— bueno por qué no me ayudas a preparar el almuerzo

— claro con gusto , ¿que haremos hoy?

— mm puedes preparar lo que quieras aunque se me antoja el curri

— de acuerdo – el rubio hizo una última reverencia para irse a la cocina

— yuu espero que hoy no le hagas la vida imposible a Mika – suspiro la chica mirando al zorro de cabellos azabache quien miraba al rubio de manera burlesca imagínaba que ya estaría planeando cómo hacerle sufrir ese día

— eh si si claro como tú digas maestra – exclamó el joven zorro tomando una forma de un simple zorro pequeño para correr a la cocina

— aaah – suspiro la chica mirando al cielo – que voy hacer con el

El rubio cortaba los condimentos que usaría para preparar el almuerzo de ese día , sentía como las cosas se movían pero aún así no veía nada ni sentía ninguna presencia o al menos no una mala , suspiro pesado — si hay alguien aquí a demás de mi da una señal

De repente un frasco se quebró y el rubio quedó paralizado, okey no estaba solo verdaderamente, aunque no sentía hostilidad en ningún momento — ¿eres bueno o malo? – que pregunta más estúpida había formulado

De la nada un tenedor había empezado a levitar y miro que se acercó a la harina esparcida en el suelo "depende de ti" – había Sido escrito eso en la harina

No lo entendió verdaderamente — ¿a qué te refieres?– volvió a preguntar

"¿Por qué no tienes miedo? , La mayoría se asusta grita chilla se desmaya y corre pero tú no eres así , ni ahora ni antes"

Ni ahora ni antes? Que queria decir? — Mika – miro a su maestra quien había llegado a la cocina y miro a donde estaba el cochinero de harina regado en el suelo , tomo una rama de algo y dió un golpe al aire luego sintió cómo si tuviera algo encima suyo pero no veía nada –¡puedes dejar de jugar!– ordenó su maestra – no boten la comida , hay personas que no tienen que comer – regaño , y le daba la razón – asegúrate de hacer muchas comida Mikaela iremos a visitar a las personas que viven cerca de la montaña

— si maestra

La mujer se fue y se sintió ligero , pero ahora la pregunta por qué su maestra hablo en plural? Y lo que era más extraño por qué diablos no se asustó con todo lo que presencio , la persona normal llora grita corre y se desmaya pero el , se sintió tan normal como si fuera algo de todos los días

Estaban entregando comida para aquellas personas que vivían cerca de la montaña estás tenían pocos recursos y ellos a veces solían ayudarles . Quería preguntar le a su maestra si ella podía ver espíritus y por qué hablaba en plural — oiga maestra Shinoa – no pudo aguantarse más , al ver que iban de regreso decidió preguntar

— ¿si?

Está le miro con mucha atención esperando a que hablara pero ahora como le preguntaba?— ¿puedes ver espíritus? – pregunto sin rodeos

La chica guardo silencio meditando un poco su respuesta — ¿que esperas tu que sea la respuesta?– pregunto la chica

— eh bueno yo , me gustaría que dijera que si

— entonces allí está tu respuesta

— ¿cuál es el espíritu que estaba en la cocina? Y no solo en la cocina en todas partes, es que veo que le gusta molestarme

— es un zorro – exclamó mirando al zorro azabache sobre el hombro del rubio jugando con su cabello mordisqueando lo un poco la razón? Quería vengarse de él por qué gracias a ese idiota rubio estaría castigado por solo estar jugando un poco con el y como su perfecto cabello rubio le hacía enojar le dejaría calvo a mordiscos

— ¿un zorro?

— si – exclamó está

— ¿por qué yo no puedo verlo?

— podrás hacerlo quizás cuando llegue el momento – exclamó está

— ¿segura?

— si ahora vámonos rápido tu debes volver a casa o tus padres se van a preocupar

El chico corrió subiendo la montaña mientras la chica miraba a ese par aunque Mikaela no pudiera verle ni escucharle aún yuu le gustaba molestarle y si tanto le gustaba hacerle la vida imposible por qué se negaba a qué fuera su sucesor? Encerio que a veces no entendía a ese zorro para nada