Lancelot hace lo mismo se inca un poco y se presenta.
Lancelot: es realmente un placer y honor servirle Doncella Rose, mi nombre es Shad...Sir Lancelot.
Ambos se quedan viendo fijamente y Amelia no puede evitar ruborizarse por aquellos hermosos ojos carmesí, se quedan por bastante tiempo así, hasta que tocan la puerta.
Príncipe: ¿Am's puedo entrar?
Amelia nerviosa: claro...claro...
Príncipe: disculpa no pensé que estuvieses acompañar, oye Sir Lancelot por favor puedes salir.
Lancelot (con tono molesto): no creo que sea apropiado dejarlo solo con la doncella Rose.
Sonic: ¡pero que!, es mi prometida jamás la dañaría, puedes salir ahora.
Lancelot sale de la habitación aún más molesto.
Príncipe: quería hablar contigo me tendré que ir por algunos días. Alguien está causando problemas en el pueblo y tengo que ir a solucionarlos, sé que te quedas en buenas manos, pero aun así me harás falta, aun mas tu sonrisa.
Amelia sonrojada y triste: entiendo eso eres el príncipe y tal vez muy pronto serás el rey tienes que preocuparte por lo demás, y aún más por este pueblo, sé que nos veremos pronto, pero también te echare mucho de menos, Sonic te extrañare.
Comienzan a rodar unas cuantas lágrimas de sus ojos y sale una sonrisa forzada.
El príncipe quiere acercarse, pero aún es muy pronto para que se acerque es una falta de respeto, entonces se retira de la recamara.
Lancelot entra y ve a Amelia limpiarse los ojos.
Lancelot: ¿el príncipe le ha hecho algo doncella Rose?
Amelia voltea asombrada por lo que dice, al mismo tiempo le gusta que la llame Rose ya que nadie la había llamado así.
Amelia: no ntp el príncipe no ha hecho nada es solo que soy muy sentimental, es tonto de mi parte llorar por cosas tan absurdas.
Lancelot: si es tonto y es tonta por ello, pero siempre ha sido así. Lo lamento.
Amelia: aaa, creo que eres el primero que lo reconoce sé que los demás solo piensan y no me lo dicen, pero agradezco que me lo digas.
Le suelta una pequeña sonrisa.
A la mañana siguiente Amelia se despide del príncipe y de los demás caballeros.
Amelia: por favor cuídate, príncipe, duque Tails por favor cuídalo, bueno será una larga semana, que podría hacer en este enorme castillo y sola.
Amelia recuerda que desde que llego observo un árbol de manzanas y quería comer algunas, pero no le prohibieron bajarlas por sí sola, decían que para eso estaban los sirvientes, sin embargo, ahora que no se encontraba el príncipe quería bajarlas por sí misma, comienza a correr con rumbo hacia el jardín, trepa el árbol y comienza a estirarse para tomar algunas , pero repentinamente resbala esperando el golpe de la caída se sorprende a ver que aún sigue a la altura del árbol y de las manzanas, siente en su abdomen una mano , voltea a ver y es Lancelot quien la está sosteniendo con una sola manera de su abdomen , empieza a sentir su corazón latir con mucha intensidad y recuerdos no muy claro empiezan a acumularse en su cabeza.
Flash Back.
Amelia: promete qué que no me soltaras.
Erizo: lo prometo, siempre estaré ahí para sostenerte.
Fin del Flash Back.
Amelia comienza a sentirse mareada Lancelot al darse cuenta de ello la abaja con cuidado.
Lancelot: ¿doncella Rose?, ¿está bien? ¿se siente bien?
Amelia: si es solo que me duele un poco la cabeza, creo que perdí la habilidad de subir a los árboles, pero mira logre tomar dos ricas manzanas ¿quiere una caballero Sir Lancelot?
Amelia sonríe mientras le ofrece la manzana.
Él se la acepta y ambos se sientan en el balcón del jardín, disfrutando de la mutua compañía. Por alguna razón sentían paz cuando estaban juntos.
Cae el atardecer Amelia se da una ducha, procede a ponerse el pijama, se recuesta un rato pensando en quien era el erizo que aparecía en su recuerdo lo único que veía era una imagen borrosa, así tardo un buen rato hasta que quedo profundamente dormida, de madrugada unos fuertes gritos perturban sus sueños se levanta a ver que estaba ocurriendo y escucha sonidos provenientes de la habitación de Lancelot toca, pero no recibe respuesta entonces entra y ve a Lancelot recostado durmiendo y gritando.
Lancelot: No, no, no la toques, ¡MALDITO!, te matare, ¡Rosee!
Despierta de golpe apuntando su espada a la cara de Amelia.
Amelia: Caballero Sir Lancelot tranquilo soy yo Amy.
Lancelot: Doncella Rose, lo lamento. Respirando cada vez más fuerte y con sudor en su frente.
Amelia se acerca al baño toma una toalla y la pone encima de su cabeza.
Amelia: tranquilo solo fue una pesadilla, una en la que me nombra, caballero deje de pensar en el trabajo no soy una carga o alguien de la que siempre tiene que estar cuidando, también puedo defenderme se magia poderosa, así que no tienes que preocuparse.
Lancelot: No es nada, sé que su magia es poderosa, pero doncella yo siempre, siempre la protegeré.
Se pierden de nuevo en sus miradas.