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—Se ve hermoso

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—Se ve hermoso. ¿A qué sí?—Dijo Jungkook con el niño en brazos.

—Sí. ¿Cómo te fue en el trabajo?—Se sentaron en el sofá.

—Bien, lo de siempre...bueno, no realmente. Pero sí, decisiones y reuniones programadas.

—Ves. ¿Ahora entiendes por qué no podía dejarte la responsabilidad que implica cuidar a Soobin?

—Mmm...supongo que tienes algo de razón. Yoon...¿le dijiste a YongSun de mí? ¿De nosotros?

Yoongi lo regresó a ver.

—No, pero me preguntó de algunos comentarios que haces en twitter.

—¿Y qué le dijiste?

—La verdad es que no dije nada. Jungkook, su opinión no me importa.

—Y si ella supiera que tu y yo...vamos a intentarlo ¿crees que se opondría?

—Partiendo de la base de que siempre pensó que la engañaba contigo, odiará la idea. Pero lo dicho, no me importa lo que diga.

—Mmm ya, pero a mí me importa. No por mí, si no por Soobin. Cuando crezca ella podría decirle cosas y ponerlo en contra.

—No creo. YongSun parece que cada vez menos quiere ser parte de la vida de Soobin.

—Pero si vas a la casa de su madre, ¿cómo dices eso?

—Es su abuela la que quiere ver a Soobin, no YongSun. Ella solo va, para que la madre no la regañe.

—Oh...¿por eso has estado raro?

—Claro. ¿Por qué más lo estaría? Me duele que Soobin vaya a crecer sin su madre. Bueno, sin el amor de ella.

—Pero el nos tiene a ti y a mí, Yoon. Yo no los pienso dejar...

La voz de Jungkook tembló un poco y Yoongi apreció sus ojos cristalinos. Algo que le hizo sentir ternura, porque el pequeño niño con su ropita de conejito dormía en el pecho de Jungkook, abrazado de manos y piernas a su amigo.

—Lo sé. Tenemos suerte de tenerte.—Besó su frente.—Déjame llevar a Soobin a la cuna.

Cuando regresó, Jungkook lloraba abrazado a una almohada.

—Ey, ¿qué ocurre? —Palmeó las piernas de su amigo y Jungkook lo abrazó.

—Solo quiero hacerlos feliz. Quiero enamorarme de ti.

Yoongi sonrió y soltó una pequeña sonrisa por la honestidad de Jungkook.

—Pero tengo miedo. Yoongi, siempre quise una familia.

—Lo sé. Y veo que te has dado cuenta ¿no? Solo me eliges porque —alzó el índice y habló.—Tengo un hijo que amas.—Alzó el siguiente dedo.—y soy una persona que quieres y te quiere.

Jungkook lloró en su cuello porque era verdad.

—Era lo que intentaba hacerte entender Kook. Mereces que te amen, que te deseen, mereces lo mejor Kook, no tengo que ser yo...puede que yo no sea el indicado para ti. Y eso, no es un problema, hay mucho chicos en el mundo.

El menor seguía abrazado al mayor y Yoongi comenzó a acariciar su cabello y colocar su mentón encima de la cabeza del contrario.

—Yo pensé, bueno, pienso...que si soy padre, yo...puedo ser feliz. Soobin me hace feliz, pero claro...yo...no puedo simplemente apropiarme de tu hijo ¿no?—Se rió agriamente.—Te impediría rehacer tu vida. Buscar el amor y eso.

Yoongi asintió aunque no estaba convencido de encontrar a alguien.

—Está bien intentaré ser solo el tio de Soobin.

—Ay, tampoco digas eso. No puedes ser como su tío cuando te he besado y visto desnudo.—Jungkook se rió y se alejó del pálido para verlo.

—Ya...eso también es cierto. Hyung, ¿y si al final nos enamoramos?

—Pues habremos ganado. Pero no hay que forzarlo...ambos hemos actuado mucho impulsivamente.

—Pero el deseo en esos momentos, para mi es real. ¿Y para ti Hyung?

—También.

—¿Entonces como vamos a hacer?

—Hagamos lo que se sienta correcto, no forcemos nada. Es obvio que nos sentimos atraídos, pero eso no es suficiente para estar juntos... ¿estas de acuerdo?

—Sí. Creo que sí. Gracias...—Lo abrazó y besó su mejilla, pero Yoongi suspiró y le dio un besito corto en la nariz, por no dárselo en los labios.

Agradecía tanto que Jungkook fuera sincero con él, y haber podido serlo también.

Si las cosas iban poco a poco, Yoongi sabía que podía sentir más cosas por Jungkook. Porque de hecho, ya las empezaba a sentir.

Pero no impondría su sentir al chico que seguía confundido ante todo.

Padre Soltero | Yoonkook libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora