Hubo un tiempo en el que la pasión, el deseo y los sentimientos los envolvieron.
Para Naruto Uzumaki, las personas no eran más que efímeras. Se encontrarían en su vida por un corto lapso de tiempo, y después, harían lo que todos hacen, desaparecer...
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|Naruto|
"¡Oh eres tú Naruto! Cuánto tiempo, ¿Cómo van las cosas allá con Iruka?"
"Están bien Leah, gracias."
"Kiba está arriba, apuesto a que le alegrará verte."
Asiento hacia ella y voy hacia arriba dónde la música suena cada vez más fuerte con cada escalón que subo.
De repente, Don't cry de Guns N' Roses no parecía tan deprimente comparada con la imagen de este idiota sufriendo en cama.
"¿Quieres que regrese cuándo no estés llorando?" Él bajo el volumen del estéreo antes de darme a recibir su dedo medio y una sonrisa cómo respuesta.
"Oye idiota, ¿Esa es la forma de consolar a un amigo? Mi hermana pudo a ver muerto y tú sigues siendo un maldito insensible."
"Tú hermana no murió."
"¿Cómo estás tan seguro de eso?"
"No lo sé, tal vez porque fue ella quien me recibió debido a que tienes tú culo aplastado aquí en cama, genio."
"Bueno de cualquier forma deberías ser más gentil, no tienes ni puta idea de lo que estoy sufriendo."
"Tamaki rompió contigo, ¿No?"
"No, espera... ¡Sí! ¿Cómo demonios lo sabías?"
Jodido imbécil, tal vez porque no paras de publicarlo en cada maldita red social que tienes.
"Lo supuse solamente."
"Bueno, bueno, no vienes hasta aquí sólo para animarme, ¿Qué quieres?"
"Necesito condones."
"¿No hay una farmacia más cercana allá donde vives?"
"Sí bueno, estoy corto de dinero, no seas un imbécil y dame algunos, ni siquiera tienes con quien ocuparlos ya." El imbécil de Kiba gruñó una especie de insulto mientras se levantaba de la cama y empezaba a buscar entre sus cajones.
"Pensé que tenías un trabajo en una librería o algo así. ¿Qué paso, te follaste a la hija del dueño y te corrió?"
No, pero sí estuve tratando de follarme a la linda clienta habitual del lugar.
"Me compre un maldito auto horrible y no tengo ni un centavo, eso pasó."
"¡Vaya! ¿Llegaste aquí en él?" Lanzó una tira de preservativos en cuanto la encontró.
"Está justo afuera" Señalé la ventana y él se acercó deslizando las persianas hasta ser capaz de visualizar el viejo y oxidado Mercedes estacionado en el pavimento.
Una mirada bastó para que soltara un largo chiflido.
"Viejo, ¿esa mierda siquiera es segura?"
"Necesita un par de arreglos y pintura, pero no explotó mientras venía de camino."
