Me fui a mi salón y me quede pensando en porque, estabas muy distante. Había decidido no volver a hablarte, por que me molesto que me dejarás regresarme sola a mi salón, recuerdo el momento en que un día te había pedido que vengas a mi salón por que estaba sin chompa y viniste a mi salón, me miraste y te burlaste de porque no había traído chompa. Me diste la chompa que tenias y me enamoro esa acción que hiciste. Sin pedirlo me abrigaste, fue muy gracioso cuando te quitabas tu chompa, porque casi te desnudabas en pleno salón. Yo estaba con una amiga a mi costado, éramos tan inocentes los dos, ninguno tenia pareja y pensarte mucho me enamoraba más. Pero no podía pensar siquiera que me rompería el corazón por ti.
Me distancie de ti unos meses, por que pensé que solo era yo la que te buscaba, siempre pensé eso. Nunca pensé en que sentías tu.
1 año después y ya éramos distintos, casi como el principio pero más maduros.
Despertar de ese sueño tan vívido, recordarte me volvió a entrar la intriga en que estarías haciendo, me levante de la mesa, con los planos y el lápiz casi sin punta.
Y ahí estabas mi celular vibro...
Sonreía mirando la pantalla, estabas saludándome.Me enamoré de nuevo pero esta vez con más intensidad, sonreía por el simple hecho que estabas ahí otra vez.
Y la llama que estaba apagada volvió por ti.
Me saludaste después de mucho tiempo, chille de emoción porque pensé que había perdido tu número.
Normalmente, cambiaba de celular porque siempre se me malograban, pero ahí estabas tu, de nuevo.
Me apure en alistarme ya que estaba estudiando Diseño en la universidad y te respondí, luego empece a empacar mis cosas para la universidad.
Me arregle y estaba lista para mi largo viaje a mi universidad.
Cada día era un hermoso día, veía la ruta con mucha calma, solo tenia una sudadera y mis infaltables audífonos, escuchaba mucho Luis Miguel en Spotify, ya que me había recomendado ese cantante la radio, me aprendi casi todos su álbums.
Después vi q vibro mi celular y eras tú.
Casi nunca respondías rápido pero era un comienzo, era muy gracioso cada conversación de nosotros, me sentía muy enamorada pero solo era eso.
Entre a clases esperando a los profesores, normalmente el camino de ida duraba 2horas en el metro pero aveces llegaba temprano.
Me habías comentado de que estabas bien y que estaba yéndote bien en clases, me alegre por ti ya que eras un cerebro en matemáticas, mientras yo era más de colores y diseños.
Sin pensar en como nos reencontraríamos para volver a ver tu rostro y ver tus lindos ojos de chocolate oscuro.
Recordaba las veces en que almorzábamos juntos en la preparatoria, normalmente te ponías tímido cada vez que te citaba para comer.
Y me decías que estaría bien, nos sentábamos en un restaurante pequeño a una cuadra de la preparatoria
Después íbamos a nuestras casas, por lo general yo me quedaba a las asesorías para reforzar matemáticas, pero por lo general tu te ibas a casa luego de comer conmigo, siempre esperaba un paso de tu parte pero solo éramos amigos.Me acompañaste a la estación de buses una vez y te quedaste muy callado que me intrigaba en que pensabas, yo era normalmente lo contrario de ti, yo era muy expresiva y tu eras más callado y reservado.
Recuerdo que ese día esperaba que me dijeras algo especial, pero no fue así, había llegado mi bus y tu solo te despediste, me fui algo triste y ese fue nuestra ultima vez que habíamos hablado los dos solos.
Sonreía cuando recordé ese momento y entro el profesor de Diseño, nos dio la bienvenida y empezamos a bocetar planos.
Llegando ya en casa pude ver con tranquilidad tus mensajes, me dijiste que estabas en la universidad estatal que estarías estudiando Ingeniería Electrónica y estabas por el tercer ciclo.
Yo estaba recién en el primer ciclo de mi carrera y te di mis felicitaciones, luego me quede pensando en como había pasado los tiempos casi dos años desde que me recordaba cuando cruzamos miradas, y carcajadas tímidas e inocentes.
Me extrañaba tu rostro y te dije que quería hablar contigo por la noche.
Aceptaste, escribirme por la noche
Estaba esperando ese momento, después de la cena, hablaríamos, éramos algo distantes pero la comunicación no era la misma.
Me dijiste que estabas en tu cama escuchando música y me preguntaste por que tanto misterio de hablar a esta hora.
Respondí: Con una sonrisa feliz y te dije que no quería molestarte en tu horario de día.
Me dijiste porque tanta intriga, que querías decirme me insistías.
Me recuerdas en la prepa te respondí.
Paso dos minutos y dijiste claro, la niña que llevaba pantalones cortos y muy alegre.
Me reí, y te dije si te gustaba así.
Respondiste: Como no? Si eras tan alegre y muy feliz
Una parte de mi quería preguntarte si pensaste en mi en todo este tiempo.
Así que empece con un juego simple y directo, te dije si estabas interesado en jugar un juego de Verdad y Reto.
Demoraste en responderme pero lo hiciste con un Por supuesto.
Empece a formular las preguntas y los retos y empezó la primera ronda.
Termine entendiendo que te gustaban mis juegos, quedamos en vernos y te resistías.
Me dijiste que estabas muy bien, en todo ese tiempo, solo me concentraba en tus mensajes, en las notas que me decías, trataba de entender si era verdad, trataba de priorizarte más que mis estudios.
Solo quería volver a hablarte cada noche y jugar contigo, y tu eras cada vez más misterioso y así eran todos los viernes, por la noche.
Solo me centraba en que llegara ese día, por que era el único día que descansabas y yo no mucho pero lo intentaba.