-Capítulo 3 - ( Alguien especial)

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El día siguiente kukui dejo que ash fuera solo, ya sabía el camino y ese mismo día tenia unos asuntos pendientes en la escuela, por lo que debía llegar más temprano de lo normal.

Resultaba que, la noche anterior recibió una llamada de parte de todos sus alumnos, quienes se habían puesto de acuerdo para hacerle una fiesta de bienvenida, claro que el también quiso formar parte y batalla contra el sería la quinta y última sorpresa. 

Esperaba pacientemente su turno viendo como iban los retos de los chicos, la de sophocles, la de lana, y finalmente la de kiawe, bajo emocionado a retar a ash a una batalla.

-Profesor kukui, rockruff.-Miro ash.

-Ahora estas viendo a tu quinta sorpresa, si pikachu acepta, tengamos una batalla pokémon.

El chico lo miro asombrado, y luego se emociono.

-Una batalla pokémon? y contra el profesor kukui? Muy bien es la mejor sorpresa de todas!.-Kukui sonrió, era claro que desde antes lo que ash buscaba era una batalla real.

Pero si no antes almorzar, mallow se dispuso a preparar el almuerzo para todos, después de todo era la imagen de su restaurante familiar. Los alumnos almorzaban alegremente, cuando ash pareció escuchar algo, sin embargo como el otro día nadie más que él oyó realmente algo.

Hasta que el mismísimo tapukoko apareció frente a Ash, todos quedaron perplejos, ash le agradeció al guardián por el aro, sin embargo el legendario empezó a gastarle una broma con su gorra y salió de ahí. El kantoniano lo siguió seguido de toda la clase, parecía que iba hacia el bosque. El profesor tardó un poco en llegar por ayudar a sus demás alumnos y para cuando llegó parecía que tapukoko quería retar a ash en una batalla.

-Supongo que su quinta sorpresa no seré yo, si no tapukoko.-Dijo serio, no estaba molesto, estaba intrigado por lo que pasaría.

Tapukoko comenzó la batalla con un campo eléctrico, atacando a pikachu de una embestida, el pequeño pikachu logró soportarlo, y esquivo un brillo mágico a pesar de la increíble velocidad del legendario.

-Bien pikachu, atactrueno!.

Lograron dar al blanco, sin embargo el contrario no lo recibió, se había protegido de el ataque.

-No le hizo nada..-Comento ash asustado, kukui sabía a que nivel podía llegar tapukoko cuando se trataba de batallas, así que ya tenía una pokebola lista por si se ofrecía, a diferencia de tapubulu y tapufini, los otros dos guardianes solían retar a los isleños y dejarlos sin energías, aunque suene aterrador.

Tapukoko se lanzo a ash, la clase se hizo piedra por el susto y justo kukui iba a sacar a su braviary, sin embargo lo único que hizo el pokémon fue a ver el cristal Z, haciendo que este sacara un resplandor.

-Ose que....¿Quieres que lo use?.-El chico miro su cristal Z, dudo un poco pero acepto con toda emoción, toda la clase no creía que lo hiciera, y kukui sabía que hacer un movimiento Z, no era nada fácil de hacer.

Siguiendo la guía de tapukoko, utilizaron gigavoltio destructor, dejando a toda la clase sorprendida, nadie conocía a alguien que haya logrado hacer un movimiento Z al primer intento. Una enorme explosión dejo esa parte del bosque en ruinas. y como era de esperarse, entrenador y pokémon agotaron sus energías en el movimiento.

Tapukoko salió de escena, mallow corrió con ash a preguntarle si estaba bien, seguido de felicitarlo por la gran batalla, y kiawe notó que el cristal Z se había desintegrado. 

Entonces ash decidió hacer el reto de las islas, algo que dejo contento a todos, más a kukui y kiawe, los cuales sabían que ash tenía un enorme potencial que debía explotar en las grandes pruebas.

𝑨𝒑𝒓𝒆𝒏𝒅𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝒂 𝒔𝒆𝒓 𝒖𝒏𝒂 𝒇𝒂𝒎𝒊𝒍𝒊𝒂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora