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—¿Qué quieres comer?—, preguntó Hyunjin secando su cabello con una toalla, acaba de salir de bañar. Felix lo miró de pies a cabeza y se movió un poco del sillón, dándole espacio para que este se sentará.

—¿Qué es lo que hay?—, susurró con suavidad mirando la televisión.

—Mmmm, no hay nada, por eso pregunto, para ir a comprar—, soltó una ligera risa.

—¿Oh? ¡Tacos!—, sonrió feliz mirando a su pareja.

—¿Tacos? ¿Me esperas aquí o vas conmigo, cielo?

—¡Quiero ir contigo! Luego compras los que no me gustan—, formuló con un puchero en sus labios, Hyunjin sonrió con ternura y acarició sus mejillas.

—Vayamos entonces—, depositó un pequeño beso en la frente de Felix y se giró para ir a su cuarto, aún no se había terminado de vestir, solo llevaba un pantalón.

—Hyunjin Hyung, ¿puedo ir así vestido?—, se levanto del sillón para que este pudiera verlo mejor, un pequeño short blanco, una camisa rosada larga y unos tenis blancos, Hyunjin asintió con una sonrisa.

—Se ve muy bien, claro que puedes—, el menor dio un pequeño salto de emoción y se volvió a sentar a ver la tele en lo que esperaba a su pareja.

Hwang se giró con una sonrisa en su rostro y entro de nuevo a su cuarto. Se acerco a su clóset para sacar alguna camisa, al estar revisando, se dio cuenta que la camisa que Felix llevaba puesta era suya, una pequeña sonrisa se posicionó en sus labios, tomó una sudadera negra, junto a una camisa interior, para ponérselo. Terminó de vestirse, entro al baño para cepillar su cabello.

Una vez listo, salió de nuevo a la sala, Felix estaba acostado con sus ojitos entrecerrados mientras miraba un programa de televisión infantil, Hyunjin se acercó a él y lo abrazó, Felix soltó un pequeño quejido y se giró.

—¿No vas a ir?—, rió divertido.

—Espera—, susurró mientras tallaba sus ojitos con sus pequeñas manos hechas puño. Hyunjin sonrió y dejó un sonoro beso en su mejilla—¡Hyung!—, se quejó con una sonrisa.

—Vamos, conejito—, susurró dejando otro beso en su mejilla.

—¡Vamos, vamos!—, Hyunjin se levantó, y ayudó a Felix a pararse, el mayor tomó las llaves de la casa y el auto, para después tomar la mano de Lee y salir de casa. Ambos caminaron por el edificio para poder llegar al elevador y bajar al primer piso.

Ambos, sin soltarse de las manos entraron al elevador, la carita de Felix de desfiguró un poco cuando este comenzó a bajar, lo que hizo a Hyunjin reír, su pequeño era muy tierno.

—¿Estás bien, amor?—, musitó entre risas. Felix lo abrazó con fuerza, y escondió su rostro en su pecho, a lo que Hwang sonrió y acaricio su cabello—¿Por qué te asustaste?

—No estaba preparado—, susurró avergonzado. Hyunjin asintió y lo abrazó con fuerza.

—Vamos, mi cielo, vamos por tus tacos—, soltó divertido.

Ambos salieron del elevador y caminaron a la salida para poder entrar al carro, condujo con tranquilidad, mientras Felix cantaba alegre, dando un ambiente demasiado cómodo.

Manejó al rededor de 15 minutos hasta llegar a un puesto de tacos, en específico, los tacos favoritos de Felix, apagó el auto y bajo de este, para poder abrirle la puerta a su pequeño novio, quien bajo alegre.

—¡Vamos! ¡Vamos!—, exclamaba feliz tirando de la mano de el mayor, este lo siguió, acercándose al puesto.

—¿Qué le puedo dar?—, preguntó el taquero.

—Me da una orden de desebrada—, pidió Felix, en su susurró, y detrás de Hyunjin.

—Disculpe, no escuché...

—Una orden de desebrada y una de trompo—, repitió Hyunjin, el señor asintió y comenzó a prepararlos, Felix y Hwang se alejaron un poco, el mayor se recargo en su propio auto, y Felix se recargo en el pecho de este, mientras esperaba.

—Mira, que bonito—, susurró apuntando a un perrito. Hyunjin tomó su mano, entrelazo sus dedos y bajo ambas manos.

—No apuntes a la gente, mi cielo, es de mala educación—, sonrió—Y el perrito está muy bonito.

—¡Ya están sus ordenes!—, gritó aquel señor. Ambos se acercaron a revivir la comida y entraron de nuevo al carro.

—¿Podemos comer ya? Tengo mucha hambre—, si estómago comenzó a hacer ruidos. Lo que le provocó una risa en Hyunjin. Felix se sonrojo, el mayor asintió y entregó su comida.

—Puedes comer, amor—, sonrió con amor mirándolo.

Estrellita ¿Dónde estás? | HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora