Capitulo tres

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efímero

—Aquello que dura por un período muy corto de tiempo—

Abrió sus ojos ante el leve cambio de iluminación en el ambiente, parecía que estaba a un par de horas de sonar la alarma, tan acostumbrado a estar alerta que algo tan simple lo había despertado, mas sin embargo se ayudó a disfrutar el momento, quizás eran de los últimos que podría ver. A su lado estaba cierto pelinegro abrazándolo a su cuerpo brindándole calidez y un sentimiento de protección que; sabia que nunca sentiría con ninguna persona, una pequeña sonrisa se formo en su rostro, verlo dormir era algo que le gustaría hacer siempre, cuidar y velar por su sueño le hacia sentir dichoso y afortunado de poder ver aquella faceta de alguien que aveces podía ser intimidante

Yo se que no eres para mi

Sonrió al ver la expresión relajada de su acompañante, aquello era para él una pequeña felicidad y un arco iris en su tormentosa vida, estabatico miraba con tranquilidad las facciones del rostro contrario, no quería perturbar el sueño contrario con algún movimiento brusco. Sus pestañas que estaban algo enredadas entre ellas, su nariz perfilada y las pequeñas ojeras que tenia debajo de sus ojos; ¿Aquello era por preocupación o por otra cosa?; Sus labios, aquellos que mas de una vez deseo tocar y besar con todo el amor que le tenia, amor que nunca expresaria en palabras. ¿Para qué? Quizás en un pasado podría haberlas dicho, pero en este presente ya aquello era imposible, quizás en otra vida, quizás si hubiera tomado diferentes decisiones.

Voy a desear que no nos hubiéramos conocido, el día que me marche

Aunque sabia que pedir eso era egoísta, la imagen que tenia delante suyo era egoísta, sentirse tan feliz en ese instante era egoísta, desear y pedir un "para siempre" era egoísta, ¿Alguna divinidad escucharía su deseo desesperado de que esa noche mar eterno? No lo sabia y lo que menos quería era ser egoísta con la persona que mas quería en el mundo, el simple hecho de imaginar un diferente desenlace para toda esa situación era egoísta.

Yo te veo de rodillas, porque dicen que la miseria ama la compañia

Esos momentos eran efímeros y lo sabia, siempre lo supo, que ver dormir al pelinegro era algo que solo podría hacer contadas veces y que no duraría para siempre, ese sentimiento de calma que sentí siempre que estaba al lado del asiático y podía sentir el aroma a té que siempre llevaba en su cuerpo era efímero, su felicidad era efímera porque cuando apretó el gatillo hace unos meses condujo su destino a uno con una felicidad pasajera y las decisiones que tomo después de aquello hicieron que no pueda disfrutar del todo la compañía del otro. Porque sabia que su vida también seria efímera cuando todo saliera a la luz, como aquellas sombras que desaparecen cuando son iluminadas.

Y no es tu culpa, que yo lo haya arruinado todo

Y no es tu culpa, que yo no puedo ser lo que necesitas

Con sus dedos se atrevió a tocar las mejillas algo pálidas del pelinegro su toque era suave y delicado, no quería despertarlo o arruinar el pequeño ambiente con explicaciones que no quería decir, deseando decir unas palabras que jamas expresaría verbalmente. De manera suave se acerco un poco mas al cuerpo contrario aferrándose a la calidez que sintió intentando ahogar la culpa y el sentimiento egoísta buscando descansar su cuerpo para otro día que se avecinaba en comisaria, al menos podría recordar las facciones del pelinegro con mas claridad mientras sus horas de trabajo pasaban con lentitud.

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⏰ Última actualización: Dec 04, 2022 ⏰

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