Capitulo 15.

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"Oh, the miseryEverybody wants to be my enemySpare the sympathyEverybody wants to be my enemy"Enemy - Imagine Dragons

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"Oh, the misery
Everybody wants to be my enemy
Spare the sympathy
Everybody wants to be my enemy"
Enemy - Imagine Dragons

"Oh, the miseryEverybody wants to be my enemySpare the sympathyEverybody wants to be my enemy"Enemy - Imagine Dragons

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La mafia y la agencia habían recibido una carta. Una carta que los citaba a encontrarse con el ruso, al principio costó que estos aceparán la reunión pues se les hacía sospechoso la repentina invitación, pero luego aceptaron, pero estarían alertas a cualquier movimiento extraño. Quizás sería la última oportunidad que tendrían de salvar a sus compañeros.

Se encontraron en el bosque, todos estaban preparados para una posible pelea. Pero algo que los sorprendió fue sentir que la gravedad comenzaba a hacer efecto en ellos, elevándolos en el aire. Para luego dejarlos caer al suelo con fuerza, de entre los árboles apareció la figura de Nakahara flotando en el aire, sus ojos ya no eran azules, sino rojos.

— Chuuya, ¿que demonios haces? — cuestionó Rynosuke, veía a su superior flotando sin hablar, para luego escuchar una risa.

— ¿Les gusta mi nuevo juguete? — indicó el chico, mientras acariciaba a un tigre blanco y abrazaba por la cintura al pelirrojo.

— ¿Que les hiciste?...— Dazai sentía su sangre hervir al ver cómo tenía agarrado la rata a Chuuya.

— Digamo que una simple droga que los hace sumisos ante mi...— indicó con burla, para luego mirar a su enemigo— déjame decirte Dazai, ahora entiendo porque lo amas tanto... es un gran amante — se burlo mientras el pelirrojo miraba de manera fría a su antiguo amor.

— Maldito hijo de puta — mencionó mientras se acercaba hasta el ruso, pero el tigre blanco impidió su camino.

— Déjame desirte, que este tigre es un gran compañero... todavía no sabría decirte que tan buen amante es, Akutagawa — se rio mientras veía como el joven activaba su habilidad— si yo fuera tu no me atacaría o ellos sufrirán una descarga eléctrica — sonrió de manera cínica mientras mostraba un control.

— ¿Que es lo que quieres? — preguntó el líder de la Agencia Armada de Detectives, veía al joven tigre convertirse en hombre.

— Destruirlos, pero que mejor que destrozar el corazón de Dazai y a su antiguo discípulo—indico mirando a los mencionadas, los cuales no dejaban de ver atentamente a su otra mitad en manos de ese demente.

— Vete al diablo, ellos no tienen nada que ver — el castaño estaba más que molesto en ese instante, ver como aquella rata agarraba tenía el control sobre su único amor le hacia doler el corazón.

— Oh... claro que tienen que ver, que mejor que ser destruidos por alguien de su propia agrupación — se rio, estaba amando como ese hombre que lo encerró estaba sufriendo— además, estoy planeando conservar a Chuuya y Atsushi.... bueno, siempre y cuando sobrevivan al tigre y a la corrupción— apego mas a el al mafioso mientras acariciaba los cabellos albinos del joven.

—Los mataras...— murmuro Ozaki, no podía soportar ver a su pequeño en brazos de ese idiota.

— Eso dependerá de Dazai... pero creo que es muy probable...— el ruso mantenía sus manos en la cintura de ambos chicos, mientras estos solo miraban fríamente a quienes tenían en frente— el único que puede salvarlos serías tu... pero muchas veces le has demostrado a Chuuya que no te interesa — se burló oyendo cómo el castaño gtuñia ante su comentario.

— Eres un desgraciado...— susurro Kunikida, no sabía a qué se refería con el estado de "corrupcion", pero no era nada bueno si logro poner a la mafia y a Dazai a la defensiva.

— O pero créeme Dazai, no me gustaría perder a mis lindas armas y amantes por el tigre y el estado corrupto.... la mayoría sabemos que pasaría si Chuuya lo activara— claro que lo sabían.. la sangre correría, pues en ese estado poco le importaba a Chuuya dañar a las personas, pues ese dios tomaba el control de cada sentido cuerpo del pelirrojo—  pero por ahora... que empiece la diversión..— índico con una sonrisa el ruso, antes de comenzar a alejarse de aquel lugar.

Antes de que cualquier pudiera hablar, una lluvia de balas cayó. Si bien lograron ponerse a salvo y no resultar tan heridos por esta, era sólo el comienzo. Miembros de la mafia comenzaron a flotar en el aire antes de ser azotados contra el piso, otros estaban sufriendo de la bestia salvaje que era aquel tigre blanco. Akutagawa trato de contraatacar con su habilidad, pero pronto su cuerpo dejó de responderle, comenzó a sentir que se ahogaba.

Pues Chuuya estaba controlando la gravedad que su cuerpo poseía para así lograr atacar en su punto más débil, la enfermedad que padecía el chico. En cuando Dazai intento intervenir, el tigre atacó, si bien no lo tocó, se encargó de mantenerlo completamente alejado del mayor.

Estuvieron un largo tiempo así, la sangre comenzó a manchar el suelo, personas heridas y algunas muertas adornaban el piso. Chuuya estampó a Akutagawa contra un árbol, para así poder arrogar una pila de balas hacia Dazai, Atsushi se había encargado de atacar al resto de la port mafia y de la agencia, dándoles pelea hasta dejarlos mal heridos por culpa de sus filosos colmillos y afiladas garras.

Un silbido sonó, provocando el fin de ese ataque. Los atacantes se miraron mutuamente, antes de que Atsushi volviera a su forma humana y Chuuya dejara de atacar. Así ambos emprendieron camino hacia el bosque, adentrándose en este sin dejar rastro alguno. Ambas organizaciones tenían sus respiraciones agitadas, no dieron tanta pelea pues no querían herir a esas personas que querían. Pero ellos no corrieron la misma suerte, Yasano controlaba las heridas, verificando que no estuvieran gravemente heridos. Sus miradas fueron a los caídos, todos sabían que Chuuya jamás atacaría a sus subordinados sin razón y que Atsushi jamás mataría a nadie, verlos atacar así, sin siquiera impórtales el daño que causaban, los descoloco.

Por otro lado, en las profundidades del bosque el ruso miraba a ambos chicos, sonriendo al ver las manchas de sangre en sus ropas. Limpio una mancha de sangre de la mejilla del menor antes de hablar.

— esta fue la primera prueba de lo que son capaces, la próxima ves los dejare acabar con ellos...— el ruso hablo antes de sacar una daga, dirigiéndose al pelirrojo— esto lo matará, tu habilidad nunca logrará tocarlo... pero una daga empuñada por quien ama le quitará la vida— el mafioso miro la daga en sus manos y asintió.

— Matare a Osamu Dazai... para que no impida su dominio sobre los portadores de habilidad..— el pelirrojo miró a su compañero luego de guardar aquella arma.

— Matare a Rynosuke Akutagawa, no dejare que interfieran en sus planes...— las voces serias y frías de ambos chicos, lo hizo mostrar una cínica sonrisa.

— las voces serias y frías de ambos chicos, lo hizo mostrar una cínica sonrisa

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My light in the darkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora