Capitulo 13.

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"And you say"As long as I'm here, no one can hurt you"Everything i wanted- Billie Eillish

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"And you say
"As long as I'm here, no one can hurt you"
Everything i wanted- Billie Eillish

Abrió sus ojos lentamente para lograr acostumbrarse a los pequeños rayos de luz que se filtraba entre las rejas de la pequeña ventana

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Abrió sus ojos lentamente para lograr acostumbrarse a los pequeños rayos de luz que se filtraba entre las rejas de la pequeña ventana. Su cuerpo dolía, aún recordaba el dolor de los golpes contra su cuerpo, no contaba con su habilidad y ese desgraciado ruso no perdió la oportunidad de golpearlo en busca de una pequeña venganza contra el suicida. Pero cuando se negó a hablar, a contar la verdad de su supuesta habilidad, los cortes llegaron, no eran profundos pero aún así dolían.

Miro a su costado, el pequeño tigre aún dormía. Cuando lo llevaron a la celda la noche anerior, el pequeño tigre ya estaba acostado en un pequeño colchón durmiendo. Tomo aire antes de soltar un pequeño suspiro, se levantó del colchón, caminado hasta el menor y sentarse a su lado, apoyó una de sus manos en el hombro del joven sintiéndolo temblar.

— Atsushi... hey, despierta — le dijo en un tono suave para evitar que se asustara al estar junto a él, pero no consiguió despertarlo, solo logró notar cómo el joven empezaba a murmurar cosas, pero al notar como las lágrimas empezaban a caer por las mejillas del menor se asustó— ¡Atsushi despierta! — gritó consiguiendo que el joven abriera los ojos asustado.

El joven albino sentía su respiración acelerada, sentía las lágrimas resbalar por sus mejillas mientras y su cuerpo temblaba. No reconocía el lugar donde se encontraba, pero su mirada se encontró con un par de ojos celestes, el mafioso había puesto sus manos en las mejillas del menor para secar sus lágrimas.

— Tranquilo, inhala, exhala — indicó haciendo dicha acción, en busca de que el pequeño tigre lograra regular su respiración y calmarse, el menor acató las órdenes del mayor.

— ¿Nakahara-san?....¿Donde estamos?....— pregunto una vez su respiración estaba más tranquila, pero su cuerpo no dejaba de temblar y se asustó más al no sentir a Byakko... no había sido una pesadilla— no logro sentirlo... Byakko no está...— sus manos empezaron a temblar y las lágrimas nuevamente caían, aunque a veces se sintiera asustado por su habilidad, aquel tigre formaba parte de él.

My light in the darkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora