CAPITULO 8

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-¿Te gusta la casa?- me dijo a la vez que le daba la vuelta a la hamburguesa.
-Sí, sobre todo el jardín.
- Mi parte favorita de la casa es el jardín- hizo una pausa y me puse nerviosa porque no sabía que decir, pero siguió hablando- de pequeño me gustaba jugar a fútbol con mi padre y mi madre siempre nos reñía por si rompíamos algo- me empecé a reír y el siguió hablando- no no, lo gracioso es que al final si que rompimos algo. Ves aquella ventana de ahí- dijo señalando a la ventana que había al lado de la habitación de Abby-.
-Sí, si la veo. Madre mía la que liasteis- le dije mientras que seguía riéndome.

Seguimos hablando y al rato salieron Helen y Edward para cenar y Jacob le grito a Abby que casualmente aún no había bajado. Una vez todos abajo nos sentamos. Yo me senté al lado de Abby y enfrente estaba Jacob.

-¿Ya te has instalado en la habitación?- me preguntó Helen mientras que ponía agua en los vasos.
-Sí, bueno aún me faltan algunas cosillas.- le dije mientras que miraba al plato y a Jacob.

Mientras que cenamos nos reíamos mucho, Edward y Jacob estaban todo el rato haciendo tonterías y era imposible no reirse hasta que paso otra vez y me quede como una completa inútil mirándolo. El se dio cuenta. Se empezó a acariciar el pelo un poco nervioso y yo me acorde de una cosa.
-¡Ayy! Tengo que daros unas cosas, esperaros aquí.-les dije mientras que me levantaba y subía a la habitación a por los regalos que les había traído de España.
Cogí todos los regalos y baje corriendo para dárselos.
-Ya estoy- dije casi sin aire.- Esto son regalos que os quería hacer por acogerme de esta manera en vuestra casa y para que tuvieseis un pedacito de España aquí-. Este es para ti Helen- le dije mientras que se lo daba- Es un imán de la bandera de España y una pulserita que ponía "visca València".
-Muchas gracias, Kiara- me dijo Helen mientras que se ponía la pulsera.
-Este otro es para ti, Edward- es una pulsera de España y un llavero de Valencia.
-Gracias Kiara- mientras que se ponía el llavero en las llaves del coche.
-Este es tuyo- dije mientras que estendia el brazo hacia él.- Abby me dijo que te gusta mucho el fútbol y pues decidí comprarte la camiseta de la selección española.
-Muchísimas gracias, me encantas, perdón me encanta- dijo mirando a sus padres, a la camiseta y por último a mi. Esa mirada me recordó a la mirada de antes en la cocina.
-Bueno y por último el tuyo Abby, toma- le dije mientras que le daba la bolsa con tops, faldas y algunas sudaderas.- esta sudadera la tengo yo igual, la compre para ir iguales.- le dije señalando la primera sudadera que había, de color marrón clarito con la típica imagen de las manos que se van a coger.
-¡Ayy! Te adoro, enserio eres la mejor- me dijo mientras que me daba un abrazo.

Después de dar todos los regalos empezamos a recoger la mesa, luego vimos una peli todos juntos y me dejaron elegir a mi y por supuesto puse una tipica película romántica española en la cual aparece Mario casas.
- ¿Al final que película vamos a ver?- preguntó Helen.
-Viniendo de Ki, me la puedo imaginar- dijo Abby con tono de ironía.
-Vamos a ver "A tres metros sobre el cielo".
-No fallaba ehh- dijo Abby mirando a su madre.

Acabó la película y a Helen le gustó mucho, Abby ya la había visto porque se lo dije yo y a Jacob y a Edward no le gusto tanto como a Helen pero también les gusto sobre todo a Jacob por las carreras con las motos.
-Bueno yo me voy a dormir que mañana tengo entrenamiento con el equipo- dijo Jacob mientras que se levantaba.
-Sí nosotras también nos vamos a la habitación que Ki está muy cansada del viaje y todo- dijo mientras que me miraba.
- Sí, la verdad es que estoy bastante cansada- dije mientras que me levantaba del sofá.
-Buenas noches a todos- dijeron los dos a la vez.
- Hasta mañana- les dijo Abby.

Cuando subía por las escaleras me acorde de que me deje el móvil abajo.
-Abby ahora subo que me he dejado el móvil en la mesa.
-Vale, no tardes.

Baje las escaleras y fui directa a por el móvil, lo cogí y volví a subir las escaleras y ahí estaba el, a veces pienso que hace aposta eso de cruzarnos constantemente.

-Buenas noches Kiara.
- Buenas noches Jacob.- hice una pausa y antes de que el cerrase la puerta de su habitación le dije- ¿Porque no me llamas Ki como tú hermana?Sabes que me gusta más.- le dije- A ver a mi me da igual pero se me hace un poco raro.
-No se la verdad es que no me ha salido nunca llamarte así.- me dijo mientras que se pasaba la mano por la parte de atrás de la cabeza, se puso un poco nervioso.
-No pasa nada tranquilo.
Me dirigí a abrir la puerta de la habitación cuando de repente note una mano que me recogía toda la cintura y me atrajo hasta el y me dio un abrazo y finalmente un beso en la frente.
-Buenas noches Ki- me dijo mientras que entraba en su habitación y me guiñaba un ojo.

Que acababa de pasar, me quede un poco perpleja, se me abrieron los ojos como platos.
Abrí la puerta de la habitación y Abby ya se había puesto el pijama.
-¿Que has visto un fantasma o algo en el pasillo o que?
-¿Que?
- Que que te pasa que tienes la cara blanca.
-Ahh nada nada, bueno voy a cambiarme.
-Sí tú lo dices...- me dijo en tono irónico mientras que se ponía con el móvil.

Cogí el pijama y fui al baño, me cambié y me quite el maquillaje que llevaba y me mire al espejo aún pensando en todo lo que había pasado en un solo día que había estado aquí. Salí del baño y me acosté en mi lado de la cama.
-Buenas noches Abby.
-Buenas noches Ki.

Después de casi una hora intentando dormirme, aún con el pensamiento de él, de lo último que había pasado antes de entrar a la habitación.
Este chico me lo va a poner muy difícil.
Ese fue mi último pensamiento antes de quedarme dormida.

EL INTERCAMBIO🇺🇸✈️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora