𝐈𝐧𝐞𝐟𝐚𝐛𝐥𝐞 - 𝐈𝐳𝐚𝐧𝐚 𝐊𝐮𝐫𝐨𝐤𝐚𝐰𝐚 𝐱 𝐨𝐜

02

Así sucedió entro kakucho caminando rápidamente, dando pasos largos hacia Izana.

A pesar de Ren estar dando la espalda sabía que kakucho traía consigo una cara de enfurecido.

— ¡¡Izana!! ¡No estoy de acuerdo con esto! ¡Porque estás cooperando con ellos!—grito kakucho molesto

—...HMM— alcanzó a escuchar Ren, supuso que vino de kisaki, ya que es el que siempre parece molesto con la presencia de kakucho

—Silencio, kakucho, Esta es nuestra única manera para derrotar a touman— dijo izana

—Yo...No le veo razón alguna...¡¡ A MATAR!!— terminó por decir kakucho

Ren solo seguía sin decir alguna palabra mirando hacia la nada, pensando en cómo hicieron para terminar ahí.

Izana por su parte tampoco abrió la boca para decir ninguna palabra, solo se dedicó a mirar al suelo, tan lejos que se veía desde ahí arriba.

De pronto izana se marchó de el lugar sin decir nada.

—Bien hecho kakucho, hiciste que tu rey se molestara— hablo kisaki

Kisaki y hanma también se marcharon de el lugar, Justo después de izana, no tenían una buena relación con kakucho y con Ren apenas y le dirigían la palabra sin que izana les diera una mirada de muerte.

—Ren debes hacer algo, debes detenerlo, decirle que esa no es la manera de hacer las cosas, podría buscar otra solución, matar ya es más haya de lo que hemos hecho, o al menos más haya de lo que yo he hecho— dijo kakucho mirando a Ren

Ren seguía sin moverse, sin decir alguna palabra.

—Sabes que no puedo kakucho— dijo Ren

—Pero porque no puedes, solo a ti te hace caso cuando le aconsejas algo, claro que puedes hacerlo si tú le dices que no lo haga, no lo hará y...— fue interrumpido por Ren

—Y nada kakucho no lo haré, es una decisión que ya está tomada, si tanto aprecio le tienes a tu rey, solo haz lo que el té diga y no lo desobedezcas y punto— dijo Ren interrumpiendo a kakucho

—¡Pero no entiendo porque no le dices algo! ¡Tú podrías hacer la diferencia!— alegó kakucho

—Entiende que no puedo kakucho— hablo entre dientes Ren tratando de irse de el lugar, pero la detuvieron las palabras de kakucho

—¡¡Si puedes, es soloque no quieres, eres una cobarde!!—le grito kakucho desquitando su enojo con izana en ella

—¡¿Quieres saber que fue lo que me hizo la última vez que le dije cómo hacer las cosas?!¡Esto fue lo que me gane por decirle a izana que era lo que tenía que hacer!— grito alterada Ren

Dijo Ren y lo siguiente que hizo fue quitarse la mascarilla de la cara, dejando ver la cicatriz que tenía hace varios años.

—La cicatriz? Esa cicatriz te la hiciste...—

—Jugando cuando era pequeña, esa fue la mentira que te dije, en ese entonces no tenías edad para saber que fue lo qué pasó realmente así que te mentí diciéndote que me la hice jugando, la realidad fue que ese día hice algo que no debía de hacer y que izana me había dejado claro que no quería que lo hiciera, lo hice parecer débil, se molestó tanto que me tiro al suelo y tomó una roca afilada de el suelo, con ella me hizo una cortada enorme en mi rostro, es agüe la última vez que hice algo que a izana no le gusto, desde aquella vez solo hago o digo cosas que a él le gustarían— explicó Ren más tranquila

—Yo... Ren lo...— intento hablar kakucho, pero Ren lo interrumpió

—Guárdate tus disculpas kakucho, en este momento son por lastima y no son verdaderas, cuando sean verdaderas, sólo en ese momento, me las dirás...— dijo ren y se marcho de la azotea

Ren camino hasta la planta baja, estaba molesta con kakucho, con izana, pero estaba más molesta consigo misma.

En su camino ni siquiera se detuvo a mirar a quien la estaba llamando, ella sabía que se trataba de alguno de los haitani, pero no se detuvo y salió de el edificio por completo.
Por suerte ya contaba con su propia moto, así que subió a su moto y condujo a el lugar donde encontraría a alguien quien si la escucharía.

Pronto comenzó a manejar por las zonas más lujosas de la ciudad, buscando una casa en específico, hasta que logró llegar a ella.