❛ ⚽ ; loves !

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pov. Lionel Messi

Abrí los ojos lentamente. El dolor de cabeza era horrible y mis pensamientos se vieron Interrumpidos cuando me di cuenta que no estaba en mi cuarto de Hotel. Me di lentamente la vuelta y ahí estaba el, se veía tan lindo durmiendo sus lindos rulos cubriendo su cara. Todos los recuerdos de la noche anterieron llegaron a mi mente y me culpe varias veces. Entonces busque mi ropa y me la coloque, lo mire por unos segundos para luego solo darme la vuelta y salir de la habitación.

Tome el ascensor y coloque el piso 3. Seguro cuando llegara mi equipo me iba a preguntar donde me había quedado o muchas cosas más, aún estaba confundido por todo lo que pasó y a la vez avergonzado de volver a verlo. Había llegado al piso y abrí la puerta del departamento, tomé una pequeña muda de ropa y metí a dar una ducha la necesitaba mucho. Una vez que termine volví a salir del departamento ya que iría a entrenar para el juego que tendríamos con Polonia.

Llegue al lugar del entrenamiento. Solo pude suspirar pesadamente, dejé mis cosas en la banca y me acerque a mi equipo.

- Che Messi, ¿donde te habías metido - preguntó Enzo.

- Importa? Continuemos entrenando - dije.

Enzo solo rodó los ojos y continuó entrenando. De mi cabeza no salía Ochoa y de lo había pasado la noche anterior, por el momento lo que quería era no verlo y porq me moría de la vergüenza de verlo. Me sentía terrible tenía un dolor de culo insoportable pero valió la pena si después de la follada que me dio Ochoa.

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pov. Memo Ochoa

Me moví un poco y al no sentirlo abrí los ojos rápidamente. El se había ido, en ese momento mis nervios comenzaron a crecer y si quizás esto solo fue una noche? Si, quizás sonaba como un hijo de puta pero Messi siempre había llamado mi atención y tenerlo esa noche fue tan maravilloso. Me levante de la cama y me metí a dar un baño, tomé mis cosas y salí del departamento ya que tenía entrenamiento con mi equipo. Llegué al lugar del entrenamiento y dejé mis cosas en un lugar y entre a la cancha.

- Y esa cara Memo? - preguntó Héctor.

- Cuál? Si es la que tengo siempre - dije.

- Tu culo wey, seguro ya conociste a una morrilla - respondio Héctor riendo.

- Puede - dije riendo.

Héctor solo golpeo mi hombro y siguió entrenando. Yo empeze a calentar y de mi cabeza no salía todo lo que había pasado con el Argentino y de lo hermoso que se veía abajo de él gimiendo su nombre. Salí de mi trance cuando escuché la voz de Lozano y que ya íbamos a comenzar a entrenar.

Estábamos en el baño de los vestidores. Si, estaba tomando un ducha ya que había sudado mucho y enserio necesitaba esa ducha. Me estaba lavando mi cuerpo y sin darme cuenta mis manos bajaron a la erección que se me había formado. Y quite rápidamente mis manos, si, pensar en Messi me exitaba. Me vestí rápidamente y salí del baño de los vestidores, subí a la camioneta en la que mi equipo me estaba esperando. Solo quería llegar al hotel y buscar al hombre de pequeña estatura y que me ayudara en mi problema ya que el era el culpable de que yo este así, era completamente culpa de ese Argentino.

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