HEATHER

CAPITULO 2

¿Qué?, pensé. Parece un pesadilla, es decir, sabia que pasaría, pero...no tan  pronto.

Es que ella es tan...tan...perfecta. Sus ojos marrones, tan brillantes que resaltan cada ves que camina por el pasillo; su cabello negro azabache, es tan precioso como la noche; su cuerpo bastante desarrollado. Ella es, el ejemplo perfecto de heather. 

-¿Axel?,¿me estas escuchando?

-¿Que?,ah. Si, te escuche.

-¿Que piensas?

-Supongo que esta bien ella es muy bella,  se verían bien juntos - dije con el corazón apretado ¿por qué duele tanto?

- Sabes por alguna razón pensé que no lo tomarías bien pero me equivoque, sabes Alex ella de verdad me gusta y te juro que no exagero siento que ella es el amor de mi vida , jamas me había sentido así.

Sus palabras quemaron toda esperanza de que el pudiera sentir algo por mi.

- Entonces si te gusta tanto, te ayudare a conquistarla-dije sin tener en cuenta el peso de mis palabras.

                                                                       ...

Tiempo después de esa conversación  mateo y yo no habíamos parado de buscar formas en la que ellos pudieran acercarse, que pudieran enamorarse  el uno del otro, pero entre intento he intento lo único que paso fue que aparentemente se dieran su numero celular, digo aparentemente, por que mateo no se había animado a escribirle.

-Escribele un "Hola"- le sugerí a mateo.

- ¿Y si no me responde? ¿y si soy muy obvio?- dice el con preocupación. 

-¿Que es lo peor que podría pasar?

-No lo se.

Ese día después de clases caía una lluvia torrencial, nos agarro desprevenidos era una época de bastante calor yo y mateo estábamos en la puerta de la escuela esperando a que escampara.

-Estúpido frió.- dije casi muriendo de hipotermia.

- Estúpida lluvia- maldice Mateo.

 de repente pasa Maela y en su rosto tenia una mueca de preocupación como si algo estuviera pasando, si quisiera correr bajo la lluvia.

- Hey Maela, ¿Estas bien?- le pregunta Mateo.

- La verdad no, tengo un problema en casa y necesito llegar lo mas rápido posible.

- Entonces ten.- le ofreció la sudadera. He de aclarar que él era demasiado quisquilloso con la ropa, no se la prestaba a nadie, en cualquier situación, me dolió no se por que solo es un suéter, solo es poliester solo solo... - Para que no te enfermes.

- ¡Ay gracias! me salvas la vida. Te la devolveré mañana.- dice ella toda nerviosa y sonrojada.

Ella se la puso, y salio corriendo, joder si que corre rápido. Cuando volteo a ver a mateo, él esta sonrojado, con una sonrisa penosa, mientras la mira correr.

No estoy preparado para esto.

salí corriendo sin motivo aparente al mismo tiempo que mateo terminaba de mirarla y en lo que se dio cuenta que estaba corriendo debajo de la lluvia fue detrás de mi.

-¿Axel? ¿a donde vas?- dijo mateo mientras me perseguía.

  yo me dirija hacia nuestro lugar del que nadie sabia, era un jardín hermoso, alejado de todo esos lugares molestos, en cambio, lugar jardín siempre me daba paz, quería pensar. Necesitaba pensar, asimilar todo esto, dolía mucho, quemaba por dentro, solo quería esconderme y llorar.