Simplemente un ship ~ (HYUNLIX) ~

✧ I ✧

Ya llevaba algunos años viviendo en Corea y adaptarse desde Australia había sido un gran desafío, no solo por el idioma, sino también por el cambio cultural que esto significaba.

Estaba muy agradecido de su equipo de trabajo; Stray Kids, quienes siempre han estado ahí para apoyar y cuidar de él, pero en particular, se encontraba algo más que agradecido de su compañero de grupo, Hyunjin.

Cada vez que Felix se veía perdido en un mar agitado, Hyunjin lo devolvía a sus sentidos. Con solo una palabra, una sonrisa e incluso una mirada, era suficiente para sacar al menor de su ansiedad y llevarlo a otro tipo de trance, uno que sonrojaba sus mejillas y le obligaba a apartar la vista. No tenía claro en qué momento sus sentimientos dejaron de estar en los estándares de "amistad", pudo ser cuando se quedaban juntos hasta entrada la madrugada ensayando algún baile, pudo ser cuando después de un día agotador Hyunjin lo esperaba, sin importar la hora, con un ramion para cenar, pudo ser cuando le ayudaba amablemente con su torpe coreano, donde era imposible no distraerse por el movimiento de los labios del mayor mientras hondaba en la pronunciación, o también, pudo ser cuando por primera vez sus manos entrelazaron sus dedos y una corriente recorrió desde su nuca hasta su espalda erizando su piel, entendiendo que eso no era algo que ocurriera con alguien más, no con algún amigo.

Felix tenía claro sus sentimientos románticos por el mayor ocultos entre sus entrañas, aunque acusaban con desbordarse cada cuanto tiempo, cosa que el pecoso había podido controlar, por ahora.

Debido a esta relación tan cercana y la personalidad transparente de Felix, todos quienes los rodeaban entendían que eran buenos amigos, hasta el fandom comenzó a unirlos como si fueran pareja. En un principio la empresa a la cual ellos pertenecen, "JYP", no hizo caso a la cercanía de sus miembros, pero conforme los ingresos y búsquedas en redes sociales se incrementaban, consideraron que era momento de que este vínculo fuera canon y se pudiera potenciar. Comenzaron a dejar trabajos en conjunto, actividades y grabaciones en dúo, incluso más de algún MV con ellos como protagonistas, al final el "HyunLix", era rentable y permitido, por el staff.

Toda esta relación comercial no hacía más que alborotar el corazón en brasas de Felix, era difícil para el no involucrar sentimientos en cada interacción, en un inicio estaba seguro que iba a poder lidiar con ellos, pero fue ingenuo de su parte, considerar que es algo que uno pueda controlar.

Stray kids se encontraba en el aeropuerto, esperaban un vuelo a Japón que saldría en 2 horas más, por lo que esperar al embarque podía ser una tortura.

― Voy a ir a recorrer las tiendas en la primera planta. ― dijo es menor de los australianos mientras estiraba sus brazos desperezando su cuerpo. ― ¿Alguien quiere ir conmigo? ―miró hacía el resto; Bangchan y Seungmin estaban uno apoyado en el otro dormitando, Jeongin estaba concentrado en su Nintendo, Changbin estaba con su teléfono móvil al igual que Hyunjin, En tanto, Minho con Jisung ya habían ido a comer algo a alguna cafetería de la planta superior.

― Voy. ―Exclamó el rubio de lunar bajo su ojo. ― Si sigo aquí, moriré de aburrimiento. ―sonrió mientras guardaba su celular y tomaba su bolso de mano con sus documentos. ―vamos, te acompaño.

Ambos avisaron que estarían de compras y pendientes a sus móviles ante cualquier eventualidad antes de partir hacía la escalera mecánica.

― ¿Qué tienes ganas de comprar? ―dijo Hyunjin mirando al más bajo a los ojos, mientras sonreía ampliamente. ―yo necesito un tónico, me queda poco, podríamos pasar primero ahí. ―señaló una tienda de cuidado personal.

―Creo que compraré un perfume. ―Felix dijo no muy seguro, cuando una idea cruzó su mente y una sonrisa pícara se dibujó en sus labios, recordando que una vez revisó el neceser de Hyunjin y no encontró perfume en él y cuando consultó, se enteró que el mayor no usaba, ni nunca había usado fragancia. ― ¿me ayudas a escoger uno?

― No estoy seguro sobre los perfumes, pero puedo ayudarte con mi opinión. ―Hyunjin se adentró tras Felix que se entusiasmó una vez armado su plan para realizar un obsequio a su persona especial.

Estuvieron alrededor de veinte minutos probando aromas, discutiendo sobre que tan bien quedaban en la piel contraría, aunque para el australiano toda fragancia iba a la perfección con el aroma del mayor. Cuando al fin escogieron una, Felix le dijo a la encargada que compraría dos, Hyunjin lo miró extrañado, no solo por el límite permitido en la aerolínea, sino también por la cantidad de dinero que gastaría.

Ya realizadas las compras, Felix se acercó entregando uno de los perfumes al coreano, pidiendo por favor si podía el mantenerlo en su maleta para no tener problemas durante el viaje. Lo que Hyunjin no sabía, era que ese perfume sería para que pudiera él utilizarlo.

Tuvieron un vuelo tranquilo para la agenda apretada que tendrían durante esos días, se acomodaron en el hotel, en donde sortearon sus habitaciones, quedando Changbin junto a Hyunjin, Bangchan con Seungmin, Minho y Jisung, finalmente Felix y Jeongin. Cada quien se marchó a su ubicación, tenían que desempacar para poder revisar el itinerario con el staff.

Tocaron el timbre en la habitación que Felix compartía, cuando se aseguró que era alguien conocido, su corazón se agitó, respiró, tragó saliva y abrió la puerta, Hyunjin estaba del otro lado sosteniendo en sus manos el frasco aromático. ―Toma, esto es tuyo. ― dijo mientras miraba extrañado a Felix, quien agitaba sus manos y movía la cabeza en forma de negación. En su cara se notaba la confusión, no sabía si había dicho algo incorrecto por la reacción del menor.

―Es para ti, espero te guste y lo puedas disfrutar. ―sonrió ampliamente el de pecas, sus ojos casi desaparecían mientras sus dientes se asomaban brillantes.

―No era necesario, no esperaba esto, no compré nada para ti. ―titubeó Hyunjin observando hacía todos lados, se sentía avergonzado, no entendía como Felix podría ser una persona tan amable. ―Muchas gracias, es mi primer perfume, lo atesoraré. ―se inclinó para dar énfasis a sus palabras y volteando para regresar a su habitación.

El australiano cerró la puerta tras él y la mirada coqueta de Jeongin al interior de la habitación lo esperaba.

―Ay, mis ojos. ―exageró tapando sus orbes mientras alejaba su rostro deslumbrado por el brillo en el rostro del mayor de ambos. ―me voy a enamorar si sigo viendo a este Hyung tan genial. ―se acercó para abrazar por el cuello a Felix y despeinar su cabello gracioso. Felix solo lo miró haciéndose el desentendido, cuando en sus mejillas era evidente el color rojo que tenían.

Gracias por darle una oportunidad a mi primera historia. No olviden dejar su estrellita ✮

❤ Pronta actualización ❤