Entrégate

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Inspiración: «Primera vez», Ricardo Arjona.

Aclaración: Este escrito es un prefacio del fanfic «A puerta cerrada».

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La mañana estaba resplandeciente, gracias al astro sol que iluminaba cada uno de los rincones de la universidad. Parecía una jornada cualquiera, pues los estudiantes se encontraban en sus clases o en sus actividades extracurriculares; sin embargo, realmente era una ocasión muy especial, sobre todo, para aquellos que festejaban las fechas en pareja. Ya que ese día era víspera de navidad, una celebración que se esperaba con mucha alegría y amor.

En la cafetería del campus se encontraban dos amigos tomando sus alimentos; los jóvenes tenían una hora libre antes de ingresar a su siguiente curso. Eran minutos valiosos que debían aprovechar, pues tenían que presentar un examen importante. Para el estudio no había fechas especiales.

Los colegas estaban comiendo y estudiando un poco.

Mikey y Baji cursaban el segundo año de la carrera de arquitectura. Desde la educación media, sabían que esa era la profesión que querían ejercer en la adultez. Por ello, ambos se esforzaban por ser los mejores estudiantes; meta que estaban logrando, ya que tenían los mejores promedios.

—Creo que estamos listos para la prueba. Asi que, terminemos el postre con calma y descansamos un poco —sugirió Keisuke, cuando cerró su libro—. Si veo una fórmula más, mis ojos se van a confundir.

—Tienes razón, llevamos días estudiando para este examen; no tengo ninguna dudas en que sacaremos la mejor nota. Siempre la obtenemos —fanfarroneó con sarcasmo el azabache, antes de tomar un poco de su jugo de naranja—. Por cierto, ¿qué tienes pensado hacer esta noche?

—Invité a Chifuyu a cenar. Iremos a un lindo restaurante con su familia, ya que desde hace mucho tiempo me comentó que quería conocerlo. Después lo llevaré a casa; mis padres quieren celebrar un momento con nosotros esta noche. Así que, tengo contemplado que el postre lo compartiremos con ellos —dijo el moreno con entusiasmo—. Y tú, ¿tienes todo preparado? ¿Cierto?

—Así es, llevo varios días pensando en cada uno de los detalles para esta noche. Quiero que todo sea perfecto. Deseo que Takemichi recuerde mucho este momento y, bueno... sea algo inolvidable.

—Te puedo asegurar que lo será. Deja de estar tan nervioso porque si él te ve así, solo lo vas a asustar —expresó, encogiéndose de hombros, luego tomó un pedazo de tarta y se la llevó a la boca.

—Tienes razón, pero... —susurró, haciendo que su amigo levantara la vista de la comida y lo mirara directamente a los ojos—. Baji, ¡no pretendo que piense que soy un depravado! Para Takemichi todo esto es nuevo y yo —bajó la mirada—, solamente quiero demostrarle todo el amor que siento por él. ¿Cómo sabré si Take también lo está disfrutando?

Keisuke parpadeó un par de veces y, luego suspiró. Entendía perfectamente por la situación que su amigo estaba pasando, ya que ambos eran mejores amigos; se conocían desde adolescentes y no tenían secretos el uno para el otro.

Él había conocido a todos los exnovios de Sano, sabía que este tenía conocimiento en el sexo, ya que desde los quince años había dejado de ser virgen, pero una cosa era tener un momento carnal en el que el placer invadía todo su ser, y otro muy diferente era hacer el amor. Eso era algo espiritual, una unión de almas que no se tenía con cualquiera. Y que él había experimentado con Chifuyu, pues ellos llevaban casi tres años de relación.

Los nervios de Mikey eran normales, el temor y la ansiedad era algo que Keisuke ya había vivido. Asi que, le sonrió mientras lo veía, tratando con este gesto que lograra comprender que todo estaría bien. El amor se manifestaría en el acto, y los dos estaban preparados para ese especial y mágico momento.

Entrégate [MaiTake]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora