Sin Nombres 09

8 4 0
                                    


🪐

Sé que puedo levantarme y ver tu rostro frente al mío… Y pareces un alma tan pura. Nuestros rostros se ven tan limpios.
Pero lo que nadie sabe es que nuestras almas están corrompidas,
destruidas y sucias por dentro.
Y que mi saliva en tus manos y la tuya en mi cuerpo, nos hace ver que
nuestras almas están cayendo a un abismo donde solo nosotros nos
podemos salvar. En donde nadie quiere interferir, pero aun así nos buscan para destruir la pequeña y minia luz que nos queda.
Y solemos mirarnos y preguntar: ¿Tendremos salvación? ¿Ésta luz podrá brillar? ¿Tu alma se limpiará? ¿La mía se restaurará? Entonces nuestras almas quedan inmóviles, atrapas en un sueño hermoso, rodeado de pequeñas
pesadillas; donde solo tú y yo somos testigos de nuestros pecados.

.
.
.

SIN sus NOMBRES - Trilogía, Una Salida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora