—Brian, voy a verme con un amigo, regreso más tarde, ¿Si, amor?.
—A ja. —Respondió sin ganas este.
—Te amo, nos vemos.
Brian la ignoró, Anita se fue cerrando la puerta con un pequeño seguro.
May rápidamente soltó el amarre de la cuerda, masajeó cinco segundos su tobillo, se levanto de donde estaba y trato de abrir la puerta sin romperla, gruño, dio dos pasos hacia atrás y la pateo.
Esta se abrió de golpe, Brian rápidamente tomo a su hijo y corrió fuera de esa habitación.
Al salir por completo de la casa, algunas lágrimas aparecieron en sus ojos, sin dejarse llevar por las emociones, y ver que estaba muy lejos de la ciudad.
Se digno a correr, corrió sin parar, sin mirar atrás, solo corrió.
Al llegar a la ciudad, le pidió a una pareja que los llevará a el y a su hijo a el hospital más cercano y que llamarán a la policía.
Estos los reconocieron de inmediato, carteles con sus nombres y caras estaban pegados por todos lados de Londres.
...
El teléfono de Roger sonó, Roger miro a Anita y hablo.
—Dame un segundo.
Se levanto y descolgó el teléfono.
—¿Hola?.
—Roger, ¿Como está?.
—Oh, señor Hudson... Bien, pensé que me llamarían hasta saber algo nuevo... ¿Apareció alguna pista?.
—Brian y Rufus están vivos... En el hospital central de la ciudad, Brian insiste en querer verlo antes de dejarse revisar, no deja que nadie lo toque, lo necesitamos aquí, ahora.
—¡Voy enseguida!.
Roger colgó y salió corriendo a su habitación a ponerse algo decente, unos pantalones, se dejo la camisa de Brian puesta, se puso su chaqueta y corrió hacia abajo.
—¡Anita!, ¡Brian y Rufus aparecieron!.
Anita rápidamente grito.
—¿¡Que!?, ¿¡Que aparecieron!?.
—¡Si!, ¿Me acompañas?.
Anita rápidamente hablo.
—Claro.
...
Roger llegó corriendo viendo a muchas personas, desde noticieros hasta muchos policías.
—¡Brian!, ¡Brian!. —Grito Roger corriendo buscándolo con la mirada.
—¡Suelteme!, ¡No quiero que me toquen!.
Roger rápidamente reconoció esa voz, miro delante de él, ahí se encontraba Brian, empujando a un enfermero mientras lo fulminaba con la mirada.
—¡Brian!. —Grito Roger.
May volteó y antes de hablar un cuerpo se pegó a el suyo en un abrazo fuerte, escucho sollozos y lamentos en con la voz de Roger, sintió su olor, su cabello rubio y su calor.
—Roggie... Mi amor. —Lo abrazo con fuerza subiéndolo casi encima de el, Roger lloraba sin parar mientras besaba sus mejillas y su rostro.
Se besaron lentamente, al separarse, Brian limpio las lágrimas del rubio el cual hablo.
—¿Donde está?, ¿Donde está Rufus?, ¿El esta bien?.
—Esta grave, lo van a intentar, se puede salvar, estara bien... Tiene hepatitis, está muy enfermó... Dijeron que lo traje a tiempo...
—Mi Rufus... Y-yo... ¿Quien fue?, ¿Quien les hizo esto?.
Ambos se levantaron, Roger lo volvió a abrazar.
—Fue...
—Brian, que bueno que te encontraron. —Sonó la voz de Anita.
Brian la miro, aferró a el rubio más a su cuerpo y lo miro.
—Fue ella.
—¿Que?... — Roger lo miro y miro a Anita desepcionado.
—Ella hizo que Rufus se enfermara... Me tenía amarrado... Peor que a un perro.
Roger miro a Anita enojado, rápidamente trato de abalanzarse a ella, Brian lo sostuvo.
—¡Maldita perra!, ¡Psicópata de mierda!. ¡Te voy a hacer trizas!, ¡Tú me visitabas todos los días!, ¡Dijiste que no sabías nada!, ¡Voy a joderte!, ¡Cuando salgas de la cárcel voy a hacerte mierda!, ¡Hija de puta!.
Roger se dejó caer al piso, Brian se arrodilló a su lado y lo abrazo suavemente.
—Shh...
—Roger, yo...
Roger alzó la mirada y vio detrás de ella a el oficial Hudson, asintió y se aferró más a Brian.
—Anita queda arrestada por secuestro, tiene derecho a guardar silencio, todo lo que diga será usado en el juzgado.
—¡Sueltenme!, ¡Brian lo hice por que te amo!, ¡Por favor no me hagas esto!.
...
Roger miraba con atención a Brian, el cual comía con algo de rapidez la comida que el hospital le había dado.
Estaba emocionado de que estuviera a su lado de nuevo.
Brian lo miro, trago y hablo.
—¿Que pasa, Rog?.
—Es que te extrañe mucho...
Roger se sentó en la cama, Brian, satisfecho de haber terminado de comer, hizo la bandeja a un lado y atrajo a el rubio para abrazarlo.
—A mi también me hiciste falta...
—Pense que no te iba a volver a ver. Que no vería tus ojos nunca más...
Lágrimas aparecieron en los ojos del rubio, Brian las limpio.
—Hey, rubín. No llores, lo importante es que estamos aquí, juntos.
Roger asintió y lo volvió a abrazar con muchísima fuerza.
Nota del autor:
Disculpen por tardar literalmente siete meses de subir, no me encontraba en mi mejor momento, pero ahora lo estoy, estoy de maravilla.
Prometo ponerme al corriente con todo lo que debo de escribir, los amo. Gracias por tanto.
Atte: Jezebel Waters.

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𝐃𝐮𝐥𝐜𝐞 𝐚𝐫𝐨𝐦𝐚 𝐚 𝐦𝐢𝐞𝐥. [𝐌𝐚𝐲𝐥𝐨𝐫/𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞]
ФанфикBrian está en una universidad prestigiada para los alphas, betas y omegas de familias con muy buena situación económica, junto a su hermosa novia pelirroja Anita Dobson, siempre mintió con que percibía el aroma especial de está, Anita aún no desarro...