Capitulo 2

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📍 Guadalajara, Jalisco | 1990

Alexis

Caminaba por los pasillos de la hacienda, el día de ayer habían llegado los dueños y mi presentación con los patrones había sido un éxito, se sentían conformes con el cuidado que le había dado a sus caballos desde mi llegada.

Si bien era sabido dentro de la hacienda que mi madre era aquella mujer que había dedicado la mitad de su vida a servirle a la familia Álvarez y yo no trabajaba para ellos hasta hace apenas tres semanas, simplemente porque hace mucho no pisaba tierras Tapatías.

Cuando cumplí dieciséis años me fui a Puebla con mi papá, uno de los entrenadores de caballos más cotizados de todo México, trabajamos para charros muy reconocidos, dueños de caballos de carrera y caballos de escaramuza, así que nuestro trabajo era conocido a nivel nacional, ya sea porque los caballos que entrenábamos, alimentábamos y cuidábamos eran los ganadores de carreras o los que daban shows espectaculares.

Yo me encargaba de entrenar a jinetes y escaramuzas desde que tenía memoria pues tuve a los mejores maestros del arte charro, por algo fui el mejor de todo México.

Pero no iba a hablar de eso. No ahora.

Hace un mes exacto, mamá me había pedido regresar a mi natal Guadalajara, pues sus patrones necesitaban de alguien que entrenara a caballos que recién habían adquirido y que su preciosa yegua "Bombón" volviera a acostumbrarse a dar shows. Todos me conocían en mi pueblo por lo que me fue imposible negarme, no podía quedarle mal a mi jefecita.

A pesar de vivir lejos, venía muy seguido sin importar la distancia, tenía que echarles el ojo a mi hermana y a mi mamá, pero sobre todo visitar a mi novia la Mari. Así que este trabajo era una oportunidad para estar más cerca de ellas, no tuve que pensármela mucho.

—Buenos días—dije dándole un beso en la cabeza a mi madre y hermana.

—Buenos días mijito—dijo mi mamá levantándose—Te sirvo de almorzar—me quité el sombrero.

—No se preocupe má, yo me sirvo—dije poniendo el sombrero en la silla, camine hacia la estufa con la intención de tomar un plato pero ella me dio un manazo.

—Que te vas a servir tú, ya siéntate no seas terco—exclamó dándome otro golpe, ahora en la cabeza y atendí su petición.

—¿Qué tal ayer?—dijo mi hermana soplándole a su café—Verdad que los patrones son bien buena gente—dijo sonriéndome.

—Si y por eso quería darles una buena impresión—dije carraspeando—Han cuidado de ustedes mientras yo ando en puebla con mi 'apá.

—Y eso que no has conocido a...—mi mamá interrumpió a mi hermana.

—Alicia, ¡ya termina de comer caray! que tienes cosas que hacer chamaca—dijo mi mamá poniendo un plato frente a mí.

—Déjela ama—dije revolviendo todo—mi carnalilla debería andar estudiando, no trabajando—dije agarrando tortilla.

—El burro hablando de orejas Alexis—dijo jalándome la patilla e hice una mueca de dolor—Tú también deberías andar estudiando y aquí estás, entrenando a caballos ajenos.

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⏰ Última actualización: Dec 01, 2023 ⏰

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Desafiando al destino; Quackity PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora