×Mi Pequeña Serpiente× (Kurama X Mizuki)(Omegaverse)

Capitulo 4

Onikiri:Espero que el señor Mizuki pueda llegar al templo sano y salvo.

Kotetsu:Por primera vez concuerdo contigo.

Luego de salir de la preparatoria pudo ver cómo el cielo estaba tornándose oscuro, Mizuki quería regresar con su ama, pero tan solo pensar en el pelirrojo lo detenía, no quería volver a verlo o por lo menos hasta que logrará organizar sus ideas.

Al pasar una hora el albino se encontraba perdido en un parque, sentado en un banco con las rodillas por el pecho y su frente pegada a ellas. Odiaba estar en ese lugar, las personas solo paraban para susurrar sobre él y el clima estaba cada vez peor. Esperaría hasta que Nanami y Tomoe se dieran cuenta de que faltaba.

Cómo ya lo esperaba las gotas de lluvia comenzaron a caer sobre él, quería llorar, no podía creer que el día que había esperado tanto terminara tan mal.

Subió su cabeza al dejar de sentir la lluvia sobre él y al hacerlo se encontró con la última persona que quería ver en ese momento.

Exactamente, era Kurama, aún que traía un cubrebocas y lentes podía reconocerlo por su llamativo aroma, tenía en una mano un paraguas que sostenía sobre ambos.

—¡¿K-kurama?!—exclamó al verlo.

—Ssh—lo calló tapando su boca con su mano, no quería que lo reconocieran.

—¿Que haces aquí?, ¿me estabas siguiendo?—pregunto luego de apartar su mano de su boca, no había sentido su aroma después de salir del edificio.

—Las clases se acabaron hace quince minutos, por casualidad te ví en el parque y como no sabía si eras tú me baje a comprobar.—dijo desviando la mirada ya que no estaba diciendo la verdad completa.

—Bueno, ya viste que soy yo, ahora puedes irte, mi ama pronto vendrá por mí.—responde dándole un leve empujón para que se apartará.

Ríe al notar que estaba perdido, acariciando sus albinos cabellos.

—Nanami hoy tiene jornada de limpieza.—dijo divertido acercándose un poco más a él.

El omega se aleja un poco chocando con el respaldar del asiento que ya estaba empapado, suspira pensando en que más le podía salir mal en ese día. Estaría mejor en el templo.

—Puedo llevarte al templo si quieres, de todas formas hoy no tengo nada más que hacer.—ofrece ignorando que dentro de unos treinta minutos tendría que ir a grabar.

Suspira sabiendo que sería la única forma de llegar al templo y no quedarse a dormir en el parque empapado por la lluvia.

—Esta bien, pero no intentes nada raro, no tengo inconvenientes con volver a golpearte.

Asiente levantando su mano libre en son de paz, no estaba seguro de que aceptará su propuesta así que estaba un poco emocionado por tener al albino junto a él por unos minutos más.

Se aleja para que el omega se pudiera bajar del banco y cuando lo hizo volvió a acercarse inclinando el paraguas sobre él para que lo cubriera por completo.

Caminan hacia el auto del alfa en silencio dejando que Mizuki se concentrará en sus pensamientos recordando que cuando se sentaba con Nanami a ver sus "k-dramas", así le decía Nanami a esos shows de amor que le empezaban a encantar. Las parejas siempre caminaban juntas bajo la lluvia en un mismo paraguas, siempre en esos momentos solía pasar algo romántico entre ambos protagonistas, se darian un beso o se tomarían de las manos, dependiendo del capítulo de la serie. No quería que eso pasara con el cuervo, se sonroja y en un rapido movimiento se aleja del pelirrojo volviendo a ser bañado por la lluvia.

—¿Que pasa?¿Acaso muerdo?, no te hagas bajo la lluvia que podrías enfermarte.—dijo deteniéndose al notar que ya no estaba bajo el paraguas.

—N-no quiero estar bajo el mismo paraguas que tú, no quiero que me emparejen con mujeriego como tú.—dijo cruzado de brazos aún caminando alejándose del cuervo.

No supo que decir, no debía estar enterado de las muchas personas que querrían estar bajo ese paraguas junto a él. Aunque sin darse cuenta sus pensamientos le decían que ahora Mizuki era el único que debía estar ahí.

Se ríe al ver cómo empezaba a correr y, soltando un suspiro también siguió su paso.