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" Gracias "
Luego de la batalla contra Muzan, el silencio era como un segundo amigo de la finca mariposa. Tenso, incómodo, también representa los lamentos que no podían soltar.
Aoi caminaba a la habitación perteneciente de Kanao, llevaba consigo la bandeja de la cena, una buena excusa para pasar el rato con Tsuyuri, ya que llevaba varias semanas sin siquiera dirigirle la palabra a nadie.
Tocó " toc, toc" espero, nadie abrió, volvió a tocar en el mismo patrón "toc, toc ", volvió a esperar.
Aoi soltó un suspiro y trato con todas sus fuerzas, sonreír, sonreír para Kanao, lo necesita, siempre y ahora.
Cuando abrió la puerta, no había nadie, ni siquiera su propia sombra, desesperada, busco a la muchacha cazadora, fue hacía la mesita de noche y agarró la bandeja, salió y fue a buscarla, llamándola por su nombre, el nombre que las Kocho le hicieron escoger.
Aoi pronto se rendía, la única opción, fue ir al cuarto de Shinobu Kocho; Dónde concurre Kanao la mayoría del tiempo.
Abrió la puerta con cuidado, solo para ver a Kanao sentada en el futón observando detenidamente el pendiente de Shinobu, lo único que pido salvar de ella.
También llevaba consigo el antiguo pendiente de Kanae, Kanao no le importaba andar con los cabellos sueltos, con tal de no perder los pendientes que con tantos esmeró los cuido hasta ese día.
- Kanao, traigo tu cena. - no quiero comer Aoi.
Respondió Kanao, a pesar de lo automático que pudo ser su respuesta, la voz en si suena quebrada, desganada y eso lo comprendía Aoi.
Y por esto mismo, soltó el almuerzo, para así mismo correr a abrazarla, volverla a rodear con sus brazos y protegerla, quería soltar todas las cosas que guardo, esa noche.
- Kanao por favor, no descuides tu salud- Ahora ella no suena con la misma firmeza, atrajo más a Kanao entre sus brazos, temiendo perderla- No te descuides por favor, necesito que mejores y que te recuperes, estoy cansada de no poder hacer nada por ti, me importas tanto que mi propia vida y me duele verte así ¿Cómo lo tomarían Kanae y Shinobu al ver tu estado de salud? - ellas... No están aquí conmigo, se fueron Aoi, no las pude salvar, no las protegí. Como ellas lo hicieron conmigo.
Soltando sollozos, aferró y protegió los pendientes que tiene entre sus manos. Llorando en el hombro de Aoi.
- Lo siento- - - No, no lo sientas-
Sorprendida, Kanao y Aoi comparten mirada, una a otra.
- No lo sientas Kanao, está bien que hayas hecho tu esfuerzo, no todos podemos salvar a quienes amamos, Kanao no te lamentes por sobrevivir, maldita sea, no lo hagas ¿Y sabes porque? Porque agradezco que estés aquí conmigo.
- «Agradezco a Dios por querer dejarte viva, por traerme a alguien que me importa a casa, Gracias por haber sobrevivido y estar aquí conmigo cuando más lo necesito, Te quiero Kanao, te quiero tanto»
Una vez que terminó, lloró, soltando todo lo que guardo durante la guerra y después de está.
Lloró como no podía imaginar, lloró aún teniendo a Kanao en brazos, lloró aún cuando Kanao soltó los pendientes y también abraza a Aoi tan fuerte como ella a Kanao, como si teme perderla, así como paso con Shinobu.
Y Aoi, agradecía que Kanao saliera viva de la batalla, con todo y sus consecuencias, pero, al menos que esté bien.
Y así duraron toda la noche, una aferrada de la otra.
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Palabras: 572 [✓]
Wtf sobrepase las palabras Ni cuenta m di hasta q vi wkwkkw pero en fin-
