Sabor a mi

Capitulo 10

+21 Proceda con precaución

Pov Eda

La sonrisa no había abandonado mi rostro desde que Serkan encendió el auto.

El viento nos refrescaba mientras viajábamos por la carretera, solos por primera vez y con Serkan al volante. El plan perfecto.

— ¿Esto es real? — Le pregunto embobada apoyándome en el reposabrazos. — Serkan Bolat ha faltado a clases para pasar el día con su novia... Debe ser un sueño.— Él sonríe mientras niega con la cabeza sin quitar la mirada del frente.

— Podría mostrarte cuán real es —Levanto las cejas para que prosiga pero su mirada no se aparta del frente — pero por nada del mundo nos expondría a un accidente, así que guarda ansias para cuando lleguemos — Pongo los ojos en blanco sabiendo perfectamente el lado hipocondríaco de mi novio.

— Serkan... — Me quejo logrando que me mire de soslayo — ¿No puedes desactivar tu modo hipocondríaco por unos minutos? — hago un puchero tratando de convencerle.

— lo siento — dice riendo — creo que tendrás que aprender a vivir con ello... me muero si algo llega a pasarte — Mi sonrisa se vuelve gigante y me acerco a su mejilla para darle un pequeño beso.

— Bueno, aún con lo hipocondríaco y todo... te extrañe — En ese momento siento como la mano derecha de Serkan se entrelaza con la mía.

— Y yo a tí mi amor... de verdad quiero compensarte por...

—¿Por dejarme plantada... tres días seguidos? — Le digo tratando de molestarle un poco.

— Si...— Dice algo avergonzado mientras yo le lanzo un beso para que no se tense— Ni siquiera sabía porque me obligaban a estar ahí en medio de la investigación — dice algo irritado — Y cuando veía la hora ya era demasiado tarde... había fallado.

— Es muy extraña la investigación — El asiente luchando para no quitar la vista del frente, lo cual me causa aún más ternura — Pero según lo que dijo Fifi los oficiales solo estarán por esta semana — Él suspira agotado — ¿No es así?

— Eso espero... pero por lo que dijeron ayer quizas demore unos días más — su mano comienza a ponerse un poco inquieta — Además, nos pidieron hacer un plan de concientización contra el acoso sexual como consejo estudiantil... así que tendré que organizar algunas actividades con respecto a eso. — Dice en un tono cansado.

— Si quieres yo te puedo ayudar — Le digo con una sonrisa, consiguiendo que al fin me mire, aunque sea unos segundos.

—¿De verdad?— Asiento con una sonrisa enorme.

— No solo lo hago para pasar tiempo contigo... aunque es una buena motivación— El se ríe — Sino porque porque también me interesa que los chicos puedan estar preparados en casos de acoso o abuso de cualquier tipo. — Le digo con sinceridad — En mi otra escuela sucedían con demasiada frecuencia. Muy pocos tenían cómo defenderse ante una persona que tuviese más poder. — Noto como Serkan se tensa un poco al escucharme.

— ¿Alguna... alguna vez alguien se sobrepasó contigo? — Pregunta con temor

— Nada que mis puños no hayan podido arreglar — digo riendo pero puedo notar que él sigue tenso por lo que me acerco un poco más — No bebé... — Le digo tiernamente — Nunca pudieron hacer nada, siempre me supe defender. Soy una persona afortunada. —En ese momento noto como las mejillas de Serkan se sonrojan más de lo normal, notando cómo contrae el aire. — ¿Amor estás bien? — Él solo asiente, notando una tímida sonrisa que comienza a crecer en su rostro.

En ese momento me doy cuenta que es la primera vez que le llamó así, y quizás no se sienta cómodo con esa manera de llamarle, lo cual me costaría mucho reprimir después de llamarle así en mi mente por varias semanas. — ¿Está bien si te llamo así? — De pronto la inseguridad se apodera de mí, queriendo enterrar mi cabeza bajo tierra por la vergüenza —Si perdón es demasiado... — Me acomodo en mi asiento nerviosa cuando siento que su mano me retiene.