Esposa perfecta / Jenlisa

Capítulo 22

Rosé  se despertó en una bruma de dolor.

La luz del sol se colaba en la habitación por entre las cortinas. Un techo desconocido, los paquetes de jeringas claramente visibles. Podía oler un dulce aroma que llegaba de alguna parte. Cuando olió ese aroma familiar, gritó el nombre de su hermana. ¿Qué sucedió?

Había sido atrapada por el presidente Kim Recordó haber sido golpeada, desgarrado y dejado sufrir hasta que casi muere. Aunque no parecía que fuera a terminar, trató de aguantar con todas sus fuerzas. Sin embargo, Seo Joon-ahjussi no pudo hacerlo. Era insoportable ver a Seo Joon-ahjussi desmoronarse y colapsar ante sus propios ojos.

Al final, Rosé había renunciado a la cuenta en Luxemburgo para salvar la vida de Seo Joon, pero el presidente Kim no dudó en matarlo de todos modos.

Hijo de puta, Rosé iba a matarlo. Ya no era suficiente simplemente ponerlo de rodillas. Si no fuera por Jennie que lo retuvo, ya habría matado a Kim Hyun bin.

¿Qué sucedió?

Recordó haber visto a Jennie. El rostro de su hermana estaba pálido mientras corría para rescatarlo. ¿Cómo se las arregló su hermana, que siempre se había desmayado al ver sangre, para bajar alli? Más importante aún, ¿cómo se las había arreglado para traerlo aquí?

De repente, escuchó un clic cuando la puerta se abrió seguido de la voz de su hermana.

"Unnie..."

Esa voz un poco baja que tanto había extrañado.

Rosé volvió la cabeza. Jennie vestía una blusa suave con un par de pantalones. Su cabello quedó suelto. Rápidamente examinó a su hermana. No parecía que se hubiera lastimado en ninguna parte.

"Te dije que no vinieras".

Ante sus palabras, Jennie pareció decepcionada. Finalmente pudieron hablar correctamente después de un año de no poder hacerlo, pero lo primero que hizo fue regañarla. A Rosé tampoco le gustó, pero no pudo evitarlo.

"No seas ridícula"

Jennie se acercó a ella y miró su pálido rostro.

"¿Sabes que has estado durmiendo durante tres días?"

¿Tres días? No se había dado cuenta. Había estado dentro y fuera de la conciencia, y todo se sentía como un sueño.

"No lo sabia. ¿Dónde estamos?"

No había forma de que estuvieran en la casa de Lalisa Manoban, ¿verdad?

"Nuestra casa."

Jennie dijo 'nuestra casa!. Por alguna razón, esas palabras molestaron a Rosé. ¿Cómo se convirtió la casa de Lalisa Manoban en 'nuestra casa' para Jennie?

"¿Qué?"

-Lisa dijo...

Jennie apartó levemente la mirada. Ese era su hábito cada vez que se sentía incómoda. Rosé se puso nerviosa.

"¿Qué le dijiste?"

Los labios de su hermana estaban cerrados con fuerza. Ella volvió la cabeza y lo miró.

"Encontró tu certificado de nacimiento de EE. UU. No había nada que pudiera hacer".

¿Mi certificado de nacimiento?

Rosé frunció el ceño. Su rostro se puso rigido al darse cuenta. Lisa lo sabía todo. Sabía quién era su madre, quién era ella y lo que habían hecho.

¿Pero me trajo a su casa? ¿Por qué?

"¿Me estás diciendo que de alguna manera conseguiste que Lalisa Manoban me dejara quedarme en esta casa?"