VI

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Luego del show se encontraba un animado Paul arreglandose en su camarin. Aunque no fuese un experto en el mundo del maquillaje intentaba hacer su mejor esfuerzo para pintarse un poco su cara para su cita. De momentos una bonita sonrisa se dibujaba en su rostro al recordar que su enamorado iba a verlo esta noche. Luego de tanto tiempo y amoríos fallidos se permitió abrir su corazón para una persona.

Una vez ya considerarse listo empezó a observarse detalladamente en el espejo para ver cada imperfección que haya provocado, quería estar los más presentable posible. Acomodó un poco su vestimenta y peinó su pelo.

Escuchó un golpeteo en la puerta así que camino hasta ella para abrir. Detrás se encontraba un hombre alto, con una cabellera negra perfectamente peinada hacia atrás, con una sonrisa encantadora, sus ojos azules y con un cierto brillo en ellos. En su mano traía un ramo de rosas blancas el cual fue entregado inmediatamente a Paul.

─ Muchas gracias, son muy bellas.─ Sonrió tímidamente.

─ Al igual que tú.─ Dijo para luego besar uno de los mofletes de Paul─ ¿Vamos?

Landers asintió y caminó junto al muchacho rumbo a un restaurante asiático.

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La velada había sido muy bonita pero todo tiene su fin. El caballeroso chico trajo nuevamente al hotel donde Paul y sus compañeros estaban quedandose por el momento. Llegaron a su habitación, se despidieron con un pequeño pero cariñoso beso en la boca y cuando uno tomó su camino.

Landers estaba en un mar de sentimientos encontrados.Estaba feliz e ilusionado luego de mucho tiempo. Mientras se vestía para ir a dormir pensaba en cada momento que había pasado con su cita. Cuando ya estaba a punto de dirigirse a su cama y finalizar con su día vio como un sobre pasaba por debajo de su puerta.

"Estoy tan obsesionado contigo que no puedo quitar mis ojos de ti ni por un segundo. He registrado cada uno de tus movientos de este día, he visto cada cosa que has hecho por lo tanto tuve que soportar verte coqueteando con ese estúpido. Tampoco me he perdido ese beso el cual me dio ganas de salir corriendo y darle un puñetazo en su cara por haber tocado algo que no es suyo. Luego me encargaría de ti, follandote violentamente mientras te obligo a decir que me perteneces y dejando marcas en tu cuerpo para que todos sean testigos de que lo eres.

Te dejaré una pista; soy extremadamente territorial y posesivo, así que no te sorprendas si desaparece cualquier persona que se le ocurra coquetar contigo o tu lo hagas con ellos porque si no eres mio no serás de nadie.

Bonita noche."


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eer el contenido de la carta sus ojos se abrieron como platos. Su sangre quedó helada. Estaba atónito al saber que su acosador perseguía cada uno de sus pasos y que era observado a toda hora del día.

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⏰ Última actualización: Sep 29 ⏰

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A pervert behind my back ; Richard Kruspe x Paul LandersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora