『єᴘɪƖᴏɢᴏ』

55 3 1
                                    

Al despertar me doy cuenta de que no estoy en mi habitación, con pereza froto mis ojos, acostumbrándome a la poca luz que hay, le doy un vistazo rápido, me relajo al ver que solo se trata de la habitación de mi mejor amigo, YoonGi. Suspiro, al intentar levantarme de la cama un brazo me lo impide, volteo para ver que solo se trata de mi amigo durmiendo aquí, con mucho cuidado quito su brazo rezando por no despertarlo ya que eso le pone de mal humor, me levanto sin hacer ningún movimiento brusco y me dirijo al baño.

Una vez ahí adentro sonrió para mí mismo ya que lo logré sin despertar a mi amigo. Me pongo frente al espejo y mi aspecto es lamentable, mi cabello está muy alborotado, mis ojos están rojos e hinchados gracias a que no he parado de llorar, unas horribles ojeras bajo mis ojos, haciéndome ver aun peor. Intento sonreír para darme ánimos pero solo termino haciendo una mueca, al verme mejor en el espejo me doy cuenta de que también tengo puesta una ropa ajena a la que traía el día anterior y era lógico, la otra se había manchado de sangre.

—JungKook.—escuche su voz ronca, gracias a que apenas iba despertando, se estiro perezosamente y yo me senté en la orilla de la cama sin muchos ánimos de responder, de hecho, aún tenía una presión en mi pecho y unas ganas infinitas de llorar.—¿Me vas a contar que es lo que te pasa?—dirijo mi vista hacia él y me le quedo viendo, es como si esas palabras hubieran hecho un "clic" en mi cabeza, ya que en esta se reprodujeron imágenes del día anterior y del porqué me encontraba ahora en su casa, mis ojos se aguaron y puso una de sus manos en mi hombro con la idea de brindarme algo de apoyo.—Vamos, mocoso. Puedes confiar en mí, no me gusta para nada verte en este estado. No te puedo ayudar si no sé qué es lo que pasa. —mordí mi labio para evitar llorar.

—Sí. —mi voz sonó baja y quebrada, en cualquier momento me pondría a llorar de nuevo. — ¿Recuerdas a mi novia?—lo miro asentir, y tomo algo de aire buscando las palabras adecuadas para decir esto sin que duela como una mierda. —Bueno, ella tenía algunos problemas... y, ya no aguanto más. —sin poder evitarlo las lágrimas comenzaron a descender sobre mi rostro, mi amigo pareció comprender lo que decía ya que me jalo hasta él y me envolvió en sus brazos. El sonido de mi teléfono indicando una llamada me asusto un poco, lo tome mirando en el identificador el nombre "HyunJin" y contesté sin pensármelo dos veces.

—Hola Kook, no sé cómo decirte esto. —hubo un pequeño silencio, sé lo que va a decir y le corto antes de que pueda hacerlo, para él también debe de ser muy doloroso tener que decirlo en voz alta.

—Jin, tranquilo. No hace falta que lo digas, sé lo que paso, yo estuve ahí. Fui yo el que llamo a la ambulancia y escucho la noticia del Doctor. —YoonGi me miraba sin alguna expresión marcada, aunque en sus ojos había un deje de preocupación y tristeza. Se puso de pie y salió de la habitación.

—No lo sabía. Lamento mucho que hayas tenido que pasar por esto y verla de esa forma. —lo escuche maldecir por lo bajo, dejándolo pasar. —Es también incomodo hablar de esto, no sé cómo decírtelo. Pero por la tarde le daremos el adiós, si no quieres asistir te voy a entender, te mandaré la dirección por mensaje.

—No, estaré ahí. También necesitas apoyo y me gustaría dártelo.

—Sí. Y de verdad, me hubiese gustado demasiado juntarme contigo en una situación diferente, adiós.

—A mí también. Eso quizá se pueda en un futuro, adiós.—cuando escuche el pitido que indico que la llamada había terminado, arrogue con violencia el teléfono a la cama, mis piernas perdieron fuerza y caí, en ese momento entro YoonGi al cuarto con una pequeña bandeja que contenía dos platos con tostadas y dos vasos con jugo de naranja.

Al verme ahí, dejo rápidamente la bandeja en la mesa alado de su cama y se agacho quedando a mi altura, me abrazo de nuevo y sentí mis lágrimas caer una vez más, mi pecho ardía demasiado, esa sensación no se iba solo me estaba ahogando. No podía hacer otra cosa que no fuera llorar y soltar leves sollozos.

Grιτσs Sιlεηcισsσs ||ʜɪяαɪ ຕᴏຕᴏ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora