Nada dura para siempre

Todo tiene un inicio

Capítulo I

02 de noviembre de 2018.

Cómo siempre iba tarde a la escuela, ¿por qué esto era una costumbre en mí?, he prometido cambiar esto sin fin de veces, pero creo que incluso el día de mi boda, si eso llega a pasar llegaré tarde igual.

Sin embargo, algo cambió ese día en el pasillo mientras yo me encontraba corriendo entre estos.

- ¡RAYOS!

-Pero Stefani por Dios, te puede fijar por donde vas, siempre vas tan deprisa que ni siquiera te das cuenta de que puedes llegar a lastimar un ser perfecto cómo yo.

Quería gritarle de cosas a este ser humano tan detestable, sin embargo ya iba demasiado tarde, y ponerme a pelear con el mejor amigo de mi hermana, que si bien es cierto era bastante atractivo, media un metro ochenta su cuerpo estaba bien trabajado y sin mencionar sus ojos, un azul peculiar, un azul tan lindo que ni siquiera podría describirlo, solo sé que había algo en ellos que hacía a cualquier chica querer mirarlos todo el día, No puede ser Stefani contrólate se supone que lo odias, ash subconsciente reacciona ya, después de regresar a la normalidad lo único que pude gesticular fue un.

-Cállate Malcolm, no por ser mejor amigo de mi hermana puedes tratarme cómo quieras.

-Lo enojona siempre lo traes contigo

-Y tú lo patético. - fue lo último que dije antes de volver a salir corriendo a mi clase, ya que el licenciado Albertou o cómo me gustaba decirle mi suggar, no por qué estuviera guapo sino más bien por qué tenía 70 años y tenía dinero a más no poder, me había amenazado con qué si llegaba tarde otra vez me mandaría directamente a extraordinario, y no gracias no quería irme a un extra en mi primer semestre de Derecho.

La clase estuvo como siempre, aburrida a más no poder, solo escuchaba que mencionaba cosas de la economía que la verdad no me causaba curiosidad en lo más mínimo, sin embargo, mi mente durante todo este tiempo solo podía pensar en algo, o mejor dicho en alguien, y sí me refiero a Malcolm por que aunque me cae mal, por ser el hombre más repugnante del mundo, siempre que tenía el más mínimo encuentro con él sentía que mi mundo se paralizaba, sentía que nadie más existía, cómo si solo fuéramos él y yo en esta vida.

Todo esto para mí era un sentimiento extraño, debido a que yo estaba o bueno estoy enamorada de Jeremy, o cómo mis amigos le dicen de Stuart, sí igual al nombre de los Minions, y es por qué media un metro con 60, pero él que más se burlaba de él era Malcolm que, aunque no lo conocía en una plática a mi hermana se le escapo decirle por su apodo, y de ahí no paraba de molestarlo con eso.

Sin embargo, no podía ni siquiera seguir pensando en mi novio, solo podía tener esa duda de Malcolm la cual terminó rondando más de lo que quería incluso cuando almorcé con Jeremy mi cabeza seguía pensando en aquel tipo que tanto odiaba, y la verdad en este punto pienso que solo lo odio por que probablemente no le provoque ese sentimiento o esa reacción a él.

Malcolm

Toparme con Stefani en el pasillo sin duda alegró mi día y aunque la forma en la que hablamos no fue la mejor siempre era bueno hacerla enojar, siempre que lo hacía se formaba un hermoso hoyuelo del lado derecho de su boca, Stefani tenía una sonrisa de infarto que créanme eso fue lo que me enamoró, pero sin duda sus ojos no puede ser, esos ojos marrones podrían sin duda llevarme a cualquier otro lugar, quisiera verla todo el día para poder apreciarla más, me di cuenta con el tiempo que tenía un hermoso lunar en el cachete derecho, y uno justo abajo del labio, sus labios carnosos, sin duda todo de ella era perfecto, su forma de caminar, su risa, cómo se enojaba cada que la molestaba, en fin habría algo que ella no hiciera bien.

Pero cada que quería hablar o intentar acercarme a ella sentía que no estaba a su nivel, y sí yo sabía que yo era guapo, pero ella era inteligente y hermosa cómo iba a estar alguien como ella con alguien cómo yo, sé que tengo inseguridades por que esas no te lo quitan tu apariencia, pero trataba de apaciguarlas y eliminarlas, pero sin duda siempre pensaba en que el día que ella me diera una oportunidad ese sería el día maravilloso de toda mi vida.

Capitulo II

Stefani

Mis días se volvían cada vez más aburrido y estresantes mi vida se basaba en ir a la universidad hacer tarea, estudiar para mis ordinarios, y por último tener que toparme a gente que en verdad me caía mal.

La verdad los únicos ratos que llegaba a tener libres, los ocupaba para que la misma duda de hace semanas me siguiera atormentando, sí así es en Malcolm, ya casi no nos vemos mucho, pero sigue estando esa idea en mi cabeza, sin duda cuando lo viera le tendría que decir todo, o por lo menos hacerle ver un poco más las cosas.

Ese día que llegar pronto por qué incluso había terminado con Jeremy por que no me sentía cómoda hablando con él, al saber que ya no sentía lo mismo que antes, sin embargo, a él le costaba asimilar que era mejor dejar todo, y me había dejado de hablar, así que durante todo este tiempo solo tenía a mi mejor amiga que si bien es cierto la conocí a principios de Semestre se volvió una parte importante en mi vida, y jamás quisiera perderla, además es cómo si ella y yo fuéramos almas gemelas en una amistad y eso es lo mejor que me pudo haber pasado.

Aunque tengo que confesar que ni ella sabía de la incertidumbre que me causaba este tipo, en algún punto llegue a pensar en darle una cachetada, pero no podría hacérselo era demasiado perfecto como para dañarle su rostro, pero bueno si algún día se lo mereciera, en verdad se la plantaría.