Vídeos para adultos ☘ ChanIn

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Ambos jóvenes habían dejado el tema por detrás. Decididos a no hablar de ello, pues estaban lo suficientemente avergonzados, pero ninguno de los dos pudo sacárselo de la cabeza, por lo que no pasó desapercibidos para sus amigos y hyungs.

—¿Por qué estás tan serio, Chan? —preguntó Jeongin a su dongsaeng, al verlo actuar tan extraño, pues el menor, de ojos grandes y sonrisa hoyuelada siempre tenía un rostro alegre y feliz, pero ese día estaba particularmente perdido, como si no estuviera en ese mundo.

—¿A qué edad perdiste la virginidad, Innie hyung? —Chan lo había pensado mucho antes de abrir la boca, pero finalmente preguntó entre nervioso y decidido; sorprendiendo, no sólo a Jeongin, sino también a sus demás amigos mientras comían hamburguesas en una tienda de paso.

—¿Qué clase de pregunta es esa? —fue el turno de Changbin para hablar. El mayor de todos en su grupo de amigos, era un chico que Chan había conocido cuando, mientras jugaba con sus compañeros de aula, le había lanzado sin querer un balón en la cabeza. Seo Changbin, jodidamente era como un modelo, pero ni siquiera le había regañado y lo invitó a unirse a su grupo de amigos.

Después de eso, él y su mejor amigo Jisung, ambos mucho menores que los otros se habían unido al pequeño grupo de Changbin.

—Es sólo que —comenzó a explicar, nervioso—, todos mis compañeros ya están perdiendo su virginidad y yo ni siquiera he visto una porno.

Los demás se soltaron a carcajear menos Jisung. Estando en las mismas condiciones que su amigo.

—Really? —preguntó Félix en inglés, sin creer lo que Chan acababa de decir, pues él a esa edad ya había perdido toda la inocencia.

—Es que mi mamá vigila todo —dijo jugando con los dedos de sus manos—, bloquea los sitios que son más dieciocho del celular y la computadora, además, revisa el historial de búsquedas. Nunca tuve la oportunidad —respondió con un tierno puchero.

—Kawai —le dijo Jeongin, el chico otaku del grupo y de forma cariñosa apretó las redondas mejillas de Chan, además, lo atrajo a su cuerpo para alborotar el cabello del más joven—. Eres demasiado kawai.

—Hyung —Chan se apartó, con un fuerte sonrojo en sus mejillas—, no digas eso.

—Respondiendo a tu pregunta —Jeongin empezó a hablar—, fue hace como dos años, creo que a los dieciséis. Apenas tienes catorce años, Chan, por eso no tienes que presionarte. Todo a su tiempo, ya tendrás tu oportunidad.

Chan le puso completa atención a la respuesta de su hyung, pero no logró detectar por qué la respuesta le había molestado. Al punto de dolerle el estómago.