Historias y One-Shot de Lily Evans Potter

Solo llámame ángel

Tal vez la luz del sol será tenue
Y no importará de todos modos
Si el eco de la mañana dice que hemos pecado
Bueno, eso era lo que quería ahora
Y si somos víctimas de la noche
No seré cegado por la luz
Ángel de la mañana - jugo de newton

Las yemas de los dedos manchadas de tinta rozaron la llanura de su pecho desnudo, y Harry supo que no quería morir. No podía morir, no cuando necesitaba sentirla, saborearla, consumirla. Sus propias manos juguetearon con el dobladillo de su falda, y no supo decidir si quería arrastrar la tela por sus piernas largas y pálidas o amontonar el material áspero alrededor de la curva de sus caderas.

Cuando el giratiempo deshonesto se hizo añicos en un millón de pedazos a sus pies en la oficina del director, Harry nunca pensó que su viaje a través del tiempo terminaría aquí, en 1978. Y si estaba destinado a morir, como decía el recuerdo del pensadero, al menos su último recuerdo cariñoso sería de él enterrado dentro de ella.

"Te deseo", dijo ella en su boca. Sus dientes rozaron contra su labio inferior, y causó una sacudida de placer que descendió por el bulto presionando con fuerza contra la cremallera de sus pantalones vaqueros. Harry no sabía qué parte de él estaba más hinchada y dolorida, si sus labios o su pene.

"Yo también te quiero." Se le cortó la respiración cuando la mano de ella bajó hasta la cinturilla de sus pantalones. Sus labios rosados ​​y su mirada embriagadora enviaron sus caderas rodando ante su toque. La sangre comenzó a rugir en sus oídos cuando ella lo desabrochó. Su toque fue abrasador, quemando cada pieza expuesta de su carne mientras agarraba la parte superior de sus calzoncillos y los arrastraba hacia abajo, hacia abajo, hacia abajo hasta que su pene endurecido se balanceaba libremente.

Su lengua salió disparada y lamió su labio inferior mientras su mirada se fijaba en su erección descubierta. "Te ves lo suficientemente bien como para comer", dijo con una exhalación temblorosa. Ella se arrodilló ante él, y Harry casi se corre solo con la vista. "¿Puedo saborearte?"

"M-Lily", dijo Harry con una inhalación temblorosa mientras extendía la mano para atraerla hacia él. "No tienes que hacerlo".

Ella simplemente lo apartó antes de poner los ojos en blanco exageradamente por el problema. "No tengo que hacer nada, pero quiero hacerlo". Antes de que pudiera protestar más, su madre agarró la base de su pene y envolvió sus labios alrededor de la cabeza que goteaba.

"Joder", gimió Harry al ver sus mejillas ahuecarse y su cabeza subir y bajar por su largo cuerpo.

Sintió su sonrisa alrededor de su polla antes de que ella lo liberara de su boca con un obsceno chasquido . "¿Te hago sentir bien, bebé?" Ella rodeó su mano alrededor de su eje antes de bombearlo lentamente.

Sus ojos se cerraron con fuerza antes de que un gemido irregular se le escapara, "S-sí".

Continuó trabajando con él, dejando que su lengua revoloteara para lamer la hendidura goteante de su cabeza mientras su mano se deslizaba hacia su base. Ella arremolinó la parte plana de su lengua alrededor de su punta antes de arrastrarla a lo largo de su eje. Él pulsó en su mano.

"Pareces tan familiar", dijo Lily mientras salpicaba besos a lo largo de su longitud.

Los ojos de Harry se abrieron de golpe ante sus palabras, todo su cuerpo se volvió rígido y tenso.

Ella no podía saber, no debería saber. No había forma. Había sido tan cuidadoso. Claro, casi se había equivocado antes y la había llamado mamá, pero se contuvo. Pero Lily Evans no era tonta. Eventualmente sería capaz de reconstruirlo: un viajero del tiempo del futuro que se parecía casi exactamente a James Potter , casi exactamente.