Capítulo 27: Diferencia

219 13 8
                                    

Bajamos a la cafetería, nos sentamos en un lugar apartado y vinieron a traernos nuestro café

—¿Míos? — me mira serio

—Bueno... supongo que esa conversación que tuvo lugar en mi cabeza un millón de veces, ahora esta ocurriendo realmente, ¿verdad? — lo miro

—Si, así es— me mira

—Solo... dame un segundo— tomo un trago de café para tranquilizarme

—Cuando te fuiste... ¿lo sabias? — me mira serio, pero lo conozco tan bien que si lo miro relamer sus labios, es porque no sabe cómo reaccionar

—Lo supe unas semanas después, cuando ya estaba lejos, eso cambio mis planes— bajo la mirada

—No puedo creer que esto esté pasando— restriega su cara con sus manos

—Si dejaras que se acercaran a ti o si les hubieras puesto atención... lo hubieras notado enseguida, son muy parecidos a ti— lo miro

—____________ yo no soy bueno con los niños, tu lo sabes, además mi vida es diferente, estoy acostumbrado a un ritmo en el que unos niños no pueden tener lugar— se altera un poco por la situación

—Siempre quieres pelear con ellos— rodeo los ojos

—Los niños ya tienen un papa, David siempre esta ahí al pendiente de ellos— respira para calmarse —Ellos tienen suerte, ¿no? — me mira y sonríe de forma amarga —En lugar de un papa como yo... lo tienen a el que es como su propio superhéroe personal— tensa la mandíbula

—Pero al final de todo... tu eres su papa, aunque no te interese... lo eres— bufo

—Estuviste alejada de mi— me mira con algo de rabia

—El amor no es como en los cuentos de hadas— miro sus ojos por unos segundos y suspiro

—No estoy preparado para ser padre— niega

—Pero no quieres que estemos con Dave— lo miro —No puedo dejarte partir— me mira —Yo no puedo serlo porque necesitan a alguien que este mas interesado en ellos— me mira —Yo no soy una buena persona— suspira

—Entonces ya no hay que cruzar nuestros caminos— respondo decidida

—Esto no puede terminar así...— intenta tomar mi mano y la aparto —No puedo dejar tan fácilmente que estén con otro hombre como si nada—

—Para mi termino— lo miro —No quiero escuchar nada más— tomo mi bolso y me detiene

—Pero yo te amo— toma mi mano

—¿Y que hay de Edmund y Edward? — lo miro seria —Dices que me amas pero no quieres asumir la paternidad de tus hijos— niego algo molesta —No te necesito— sonrió —Eres un egoísta, inhumano y no necesito tu dinero— lo miro molesta

—Tienes que escucharme— hace que lo mire

—¿¡Ahora que!?— lo miro algo alterada

—Tengo miedo— no esperaba esa respuesta —Estas enojada conmigo, te rompí el corazón, te abandone, tuvimos dos hijos que ni siquiera saben de mi existencia y ahora estoy aquí intentando hablar, haciendo todo lo posible para que me perdones y encontrar una solución— baja la mirada y suspira —Esto es nuevo para mí, no sé cómo manejarlo, siempre puedo resolver todo en un segundo u mandar a alguien para repararlo, siempre todos me obedecen... menos tu— se acerca a mí y me separo

—No podemos seguir viviendo esta mentira mucho tiempo, si te quedas aquí... todo saldrá a la luz, aunque no lo quiera— tomo un poco de café para poner orden a mi cabeza

Te amo ahora y siempre   2temp  H.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora