Serie de drabbles, one-shots, y two-shots sobre Enzo Fernández y Julián Álvarez.
ʚMLM.
ɞFluff, Angst y Smut.
ʚEnzo/Julián, con menciones a otros ships.
ɞModismos argentinos.
Contenido sexual explícito, incluye degradation kink.
Enzo top, Julián bottom.
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Julián tenía la sensación de que alguien lo miraba fijamente, gracias a eso un escalofrío recorrió su cuerpo. Aún así, no decidió voltear, tenía la leve sospecha de quien se podía tratar.
Siguió hablando con Lisandro como si nada, y aunque Julián no fuera muy lanzado, se tiraban onda de vez en cuando.
A Álvarez no le atraía particularmente Martínez, pero su sonrisa le gustaba mucho. Y sus labios le llamaban mucho la atención, tanto que su imaginación comenzó a volar, preguntándose cómo se sentiría besarlos.
Mientras tanto, un muy enojado Enzo veía toda la situación.
Le daba bronca verlos así de juntos, tirándose onda, ver a Julián siendo tan sinvergüenza.
Y lo peor de todo es que sabía muy bien por qué le enojaba tanto. Le gustaría creer que es porque son dos hombres en un lugar público, le gustaría creer que es porque es pecaminosa la manera en la que Lisandro mira a Julián le da arcadas, le gustaría sentir asco aunque en realidad fuera todo lo contrario.
Tenía celos.
Odiaba ver a Lisandro sonriéndole, tocándolo e incluso chamuyárselo a Julián.
Quería ir ahí y reclamarles. Quería ir justo donde estaban y demostrarle a Julián que le pertenecía.
──Bueno Juli, nos vemos──. Se despidió Lisandro mientras le daba un beso en el cachete. Julián le sonrió y lo despidió de la misma manera; con un beso en el cachete.
Si Enzo antes hervía de celos, ahora estaba que se moría.
Su ceño estaba fruncido y su lengua empezó a dolerle por la presión que sus dientes ejercían sobre ella.
Fernández se acercó a Álvarez, quien al verlo le dedicó esa sonrisa tan Julián Álvarez. Él azabache normalmente quedaría embobado con esa sonrisita, pero lo único que hizo fue aumentar su bronca.
──Enzo──. Saludó contento Álvarez, quien no parecía percatarse del estado de ánimo de su mejor amigo.
Fernández frunció aún más su ceño y agarró bruscamente la muñeca de Julián, quien se quejaba por la inesperada acción.
──Enzo, ¿qué mierda hacés?, soltame──. Seguía quejándose él número nueve, enojado por la brusquedad con la que era tratado.
Enzo no le habló en todo el camino, seguía muy enfurecido con Julián por ser tan trolo y descarado, con Lisandro por tenerle tantas ganas a Julián y consigo mismo por ser tan celoso e impulsivo.
