002 | 𝙈𝘢𝘤𝙘𝙝𝙞𝘢𝘵𝘰

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¡Despierta de una vez, maldita sea!


Así es como un nuevo día empezó. Después de casi sentir que sus ojeras le harían agujeros en los ojos, se decidió a descansar con un delicioso macchiato a la mano, dentro de una cafetería de cuatro estrellas. Gracias a que ayer fue su primer día, se le ordeno patrullar casi toda la noche para suplantar a un idiota de su trabajo que murió, y solo por que se le ocurrió tocar los dientes de un demonio, creyendolo  totalmente muerto.

Cabe recalcar que sus horas de sueño son sumamente sagradas, pero si se trata de trabajo, no hay nada que hacer al respecto. Por suerte no le tocaría asistir otra vez hasta la tarde.

Para ser sincera, no noto cuando se quedó dormida sobre la mesa, pero justo cuando el sueño estaba en su mejor parte, un tipo raro y barbudo llega sin aviso a sacudirla cómo una maraca viviente. Por reflejo se levanta de golpe; mala idea, su deprorable salud le jugó una mala pasada y la presión rápidamente se le bajó. Todos seguían gritando y Nine aún no podía recobrar sus sentidos, tan solo se tallaba los ojos hasta casi sacarlos.

─ ¿¡Eres una Devil Hunter!? ¡Haz algo, maldita sea!

"¿Devil Hunte~r?"

Bosteza sin tener total conocimiento de lo que sucedía, que para cuando giro su cuello con tal de dar con la causa de esa voz tan ruidosa, solo dió con la cosa más deforme e inexpresiva en había visto en lo que iba del pacífico día. Y aún asi, ese grosero ni siquiera se disculpo, parece que estaba demasiado ocupado corriendo por su vida como todo un cobarde.

Ardiendole la sangre, y por más que lo insultara en todos los idiomas, esa cosa la secuestra sin previo aviso y la lleva lejos de su bebida ya fría.

Con la paciencia al límite empezó a contar. Por lo que su terapeuta le recomendó, contar desde trescientos hacia atrás suele ayudar mucho a la hora de padecer insomnio o problemas de ira. Una larga charla de problemas mentales después, lo puso en práctica hasta el día de hoy ¿Ahora funcionara de casualidad? 300, 299, 298, 297...

─ "Veamo~s ¿Que tenemos aquí?"

Pero su voz es tan irritante y ruidosa, que ignorarlo de por sí es difícil, así que mordiéndose la lengua lo mira a los ojos, o al menos al enorme agujero que tenía en la cabeza. Seguido, tenía tanto orificios en esa redonda cabeza, que las náuseas amenazaban en la boca de su estómago por la especie de Tripofobia que le dió siquiera mirarlo.

─ "¿Que sucede? ¿Te comió la lengua el gato?"

─ ¡Oh, no! ─Niega, moviendo su cabeza de un lado a otro─ ¡Solo estaba ocupada pensando en lo asqueroso que te ves!

Su boca, o lo que creía que lo era, se retuerce de ira, incapaz de creer esa gran falta de respeto. Por lo que, tanto así, tan cegado en un arrebato la lanzó en casi lo más alto de los aires, que cuando intenta estrellarla en el suelo, su brazo cortado se corta por si solo a la mitad ¿Que era esa velocidad tan bestial? ¿Un demonio la ayudo? No podía sentir la presencia de ningún hasta varios metros.

No se detiene e insiste, pero para cuando reaccionó, ella ya había llegado al suelo de una forma y otra y sin quebraduras, la paciencia se le agota. Rebela su mejor carta bajo la manga, que con tal de atontarla para que se vuelva un blanco fácil, ella simplemente no estaba en ninguna parte. Cristales rostros, establecimientos casi destrozados y gritos de terror por todos lados. Las personas corrían cómo hormigas pero ninguna de ellas era su tediosa enemiga.

𝙂𝘈𝙈𝘌 𝙊𝘝𝙀𝘙!! ─ Chainsaw ManDonde viven las historias. Descúbrelo ahora