LIBIDINUM RELIGIO. (2022-2024)

MISA.

Hierofilia proviene de griego 'HIEROS' que significa divino o sagrado y 'FILIA' que significa amor.

Esta parafilia pese a ser un tabú suele ser muy común en personas que crecieron en un ambiente muy religioso o actualmente se dedican a algo relacionado. (teólogos, sacerdotes, monjas, etc.)

Quienes sufren dicha situación, suelen encontrar la excitación y el placer en objetos como biblias, figuras o rosarios, o incluso alabanzas y oraciones.

La intención de esta historia no es ser burlesca con la religión ni generar morbo a diferencia de la industria del cine para adultos. Tan sólo es entretenimiento que esperamos sea informativo de algún modo.

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Libidinum Religio I.

MISA.

(O como asistir al servicio dominical puede no ser tan malo.)

En un día extrañamente caluroso en Londres el joven conde Ciel Phantomhive se encuentra "estudiando" bajo la sombra de un frondoso árbol, aunque su mente se encuentra en los recuerdos del domingo anterior cuando en contra de su voluntad fue arrastrado a misa junto con los alumnos del colegio.

De solo recordarlo sus mejillas se tornaban rojas, y es que lo que sucedió en el servicio dominical fue de otro nivel...

»Flashback...

Fastidiado, enojado, alterado... muchos eran los calificativos que en ese momento podrían darle a Ciel Phantomhive quién con fuertes pisadas denotaba su molestia por haber sido despertado para asistir a misa... Su precioso domingo en el que planeaba dormir hasta la hora del almuerzo, luego volver a dormir y despertás únicamente para comer sería desperdiciado en aquella capilla jugando a ser un creyente.

Bueno, al menos tenía a su favor que los servicios religiosos eran tan aburridos que podría tomar una siesta sin problemas.

Vaya iluso...

En algún punto empezó a sentir cierta ansiedad por estar en ese lugar en un principio creyó que se trataba de su desprecio por estas cosas, así que sólo busco distraer su mente, pensó en su misión, en su empresa, en comida, en su prometida... Pero simplemente nada funcionaba, además en algún punto incluso pensó en su demonio mascota, en lo atractivo que resultaba y así fue como terminó pensando en sus encuentros nocturnos...

Soltó una carcajada ante ello, vaya lugar en el que venían.

-Phantomhive, es irrespetuoso hablar durante la misa o reír. - hablaba el profesor Michaelis sentándose junto con él en la última banca, la más lejana y menos visible de todas.

-¿Ahora te importa? -

-Usted debería estar allá enfrente escuchando atentamente para recibir la bendición. -

-No digas tonterías Sebastián. Desde que tengo esto. - señala su ojo cubierto por el parche. -No hay salvación para mí. Y aunque hubiera una posibilidad no la quiero. -

-Agresivo para estar en la casa de Dios. -

-Esto es solo un inmueble, no es para tanto... Y uno muy pequeño.-

-Es una capilla, no espere que tenga el tamaño de una abadía. -

-Vaya, no se como no lo pensé. - responde sarcástico. -Mejor dime algo, ¿por qué siendo un demonio no te quemaste tan pronto pusiste un pie aquí? -

-Sin duda sus buenos deseos son bien recibidos, pero le explicaré algo, tal como usted dijo esto es solo un inmueble, no espere que eso pase. Y si no lo ha notado, esto tampoco me hace daño alguno. - besa el crucifijo notando el sonrojo que aparece en el rostro del noble, una reacción que él conoce muy bien. -¿En qué piensa amo? Su rostro está rojo y se que fiebre no es.-