Se pasaba el día obligándose a seguir respirando, a simplemente seguir porque aunque quería morir para detener ese cansancio que parecía consumir todo su ser, le temía a lo que hubiera mas allá o quizás, simplemente tenia miedo de fallar y tener que vivir con las consecuencias de su error, otra muesca de decepción y otra etiqueta en su larga colección exhibida en su cerebro solo para él y su conciencia.
Fuera como fuera, sentía que lo único que hacia sus días un poco mas transitables era el extraño con el que hablaba a diario a través de Facebook, sabia que no era saludable aferrarse a alguien que probablemente tenia una vida completa fuera de su ordenador a diferencia de él, alguien que probablemente tenia una familia, un trabajo, una existencia completa pero algunos días sentía que era lo único que lo mantenía unido, de manera frágil pero unido al fin y al cabo. Sabia que no iba a durar, que tarde o temprano el mundo real se filtraría al mundo ficticio que estaba creando en su cabeza, que sus horarios dejarían de ser tan coordinados, que los días malos serian mas que los buenos y que al igual que con cada pequeña cosa que lograba hacer suya, seria contaminada por su mera existencia pero hasta que eso sucediera se aferraría como si su vida dependiera de ellos, aunque probablemente hasta cierto punto lo hacia.
Pasaba su día luchando para llegar a la noche y se pasaba la noche dando vueltas a cada segundo del día intentando encontrar una solución, una respuesta a una de las muchas preguntas que llenaban su conciencia, iniciando con el mas común pero el mas confuso de todos los cuestionamientos: ¿Por qué nada de lo que hacia parecía estar bien?, pero por mas que repasara segundo a segundo, minuto a minuto, no llegaba a ninguna respuesta. No exigía, no pedía cosas imposibles, no ponía excusas y simplemente aceptaba la culpa que le estuviesen cargando, no hacia nada fuera de la linea pero de todas formas no parecía ser suficiente para nadie y lentamente comenzaba a ser demasiado para si mismo incluso, no estaba seguro de como podía estar cansado o decepcionado de si mismo pero se pasaba las ultimas horas de la noche rogando y llorando a su cerebro para que se detuviera, que solo terminara con la oscuridad que se filtraba por cada rincón empañando sus recuerdos mas bonitos o borrando la memoria de aquellos que ya no estaban pero seguían calentando una pequeña parte de su interior con el eco de abrazos en sueños.
Sabia y sentía que estaba llegando al final de la cuerda, era solo cuestión de tiempo, pero hasta que eso sucediera se pasaría el día una vez mas intentando llegar a la noche y pasando la noche a través de las diferentes redes o luchando con su propio cerebro para que por favor.. por favor se detuviera.. Basta...
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Lord of the last day
No FicciónPensamientos aleatorios (Por favor, si alguien se siente al final de cuerda, por favor, pide ayuda aunque de miedo y aunque lleve algo de tiempo, alguien te va a escuchar)